Economía
El Tren Maya hizo su primer recorrido de prueba de Campeche rumbo a Mérida, Yucatán, con el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, el 1 de septiembre. Imagen ilustrativa.

La apuesta: más Estado

Ferrocarriles, aerolínea, Internet, un banco. Las empresas estatales están de regreso

31/12/2023 - 3:00 pm

El Gobierno federal ha apostado en los últimos años por recuperar empresas estatales en la aviación, con la operación de ferrocarriles y también al poner en funcionamiento el banco del Bienestar y con un programa para que la CFE proporcione Internet en zonas rurales y a precios bajos.

Ciudad de México, 30 de diciembre (SinEmbargo).ー En materia de infraestructura, el 2023 estuvo marcado por el regreso del servicio de trenes para pasajeros, el reinicio de operaciones de una aerolínea a cargo del Gobierno mexicano y la venta de paquetes de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para llevar internet a zonas rurales.

El 15 de diciembre se realizó el viaje inaugural del Tren Maya, descrito por la administración federal como “el más importante proyecto de infraestructura, desarrollo socioeconómico y turismo” del sexenio; tres meses antes se realizó el primer viaje del Tren Interurbano México-Toluca, obra olvidada en el Gobierno de Enrique Peña Nieto.

Además, el 26 de diciembre, la aerolínea Mexicana de Aviación realizó su primer vuelo desde el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) luego de años de haberse declarado en quiebra. El Presidente Andrés Manuel López Obrador, crítico de las decisiones de gobiernos pasados que dejaron en manos de particulares las empresas públicas, describió esta acción como el inicio de “una etapa nueva”.

En su conferencia matutina de ese día recordó que el Estado mexicano contaba con “todos los ferrocarriles, todos los aeropuertos, todos los puertos, las empresas de telefonía”, así como con bancos, empresas mineras y estaba a cargo de la producción del petróleo y la industria eléctrica.

“Todo eso se tenía y de repente llegan nuevos gobernantes con la idea de que estas empresas públicas tenían que pasar a manos de particulares, todas esas empresas públicas, y se lleva a cabo un gran fraude. Claro que para llevar a cabo todo este traslado de empresas públicas a manos de particulares engañaron mucho diciendo que no funcionaban las empresas públicas”, acusó.

El mandatario describió como un “grupo de saqueadores” a los políticos y empresarios responsables.

“¿Quiénes se quedaron con todas esas empresas? Los gobernantes o los amigos cercanos a los gobernantes. ¿Y cuánto pagaron por esas empresas? Porque se habló de que con lo obtenido, con la venta de esas empresas, se iba a beneficiar al pueblo. Pues prácticamente no se obtuvo nada porque se remataron. Si una empresa valía mil millones, la vendían en abonos, en 50 a los amigos o a prestanombres. Eso sucedió desde el Gobierno de Miguel de la Madrid, pero se intensificó ese remate con [Carlos] Salinas de Gortari. Él fue el que entregó más empresas y todo lo hacían legal. Aparentaban subastas. ¿Quién da más? Pero ya de antemano se sabía quién se iba a quedar con un banco, quién se iba a quedar con una empresa”, denunció el Presidente.

En ese contexto, destaca que fue a inicios de este mes cuando la CFE anunció la venta de paquetes de internet móvil de banda ancha para que prácticamente en todo el país las personas tengan señal a través de la asociación con el sector privado, pero sin dejar de estar en manos del Gobierno mexicano.

La administración federal actual también ha denunciado cómo políticos entregaron a empresarios los bancos nacionales e impulsó la creación del Banco del Bienestar como uno de sus proyectos insignia. La institución pública que distribuye los apoyos sociales de su administración contaba con 2 mil 204 sucursales en funcionamiento hasta la mitad de 2023.

El mandatario ha insistido en sus críticas a la privatización de bancos de la década de los 90. “Es un emblema o distintivo, uno de los tantos otros, de lo que fue el periodo neoliberal. Acabaron con los bancos públicos. Dejaron un banquito como testigo de que en algún tiempo hubo banca pública (…) que se llamaba Bansefi que no tenía ni siquiera sistema de cómputo”, expuso desde Palacio Nacional el 7 de julio.

ARRANCAN TRENES

El Gobierno de López Obrador considera el Sistema Ferroviario Mexicano como un área prioritaria para el “desarrollo nacional”, así lo describe en el decreto publicado el 20 de noviembre que oficializa la creación de siete rutas de trenes de pasajeros, además de las que cubrirá el Tren Maya y al Tren Interoceánico del Istmo de Tehuantepec.

Con esto se busca que el servicio concesionado de transporte de carga también ofrezca el traslado de personas a través de los 18 mil kilómetros de vías férreas que empresas privadas comenzaron a operar desde 1995, durante el sexenio de Ernesto Zedillo.

Las primeras siete rutas que se concesionarán para ofrecer el servicio a pasajeros son:

1) Tren México-Veracruz-Coatzacoalcos

2) Tren Interurbano AIFA-Pachuca

3) Tren México-Querétaro-León-Aguascalientes

4) Tren Manzanillo-Colima-Guadalajara-Irapuato

5) México-San Luis Potosí-Monterrey-Nuevo Laredo

6) México-Querétaro-Guadalajara-Tepic-Mazatlán-Nogales

7) Aguascalientes-Chihuahua-Ciudad Juárez

Las primeras diferencias entre empresarios y el Gobierno mexicano por esta media se registraron en mayo con Grupo México, del empresario Germán Larrea Mota Velasco, cuando la Secretaría de Marina ocupó los tramos de tres líneas que corren en el Istmo de Tehuantepec, concesionadas desde 1998 a Ferrosur, S.A. de C.V., parte de la compañía del multimillonario.

Fue en junio cuando Grupo México acordó regresar al Gobierno federal 127 kilómetros de vías férreas en el tramo del Istmo hacia Veracruz y el Gobierno amplío su concesión ocho años en una de las líneas.

El retorno de los trenes en México se observó desde el 15 de septiembre, con el primer viaje de “El Insurgente”, como fue llamado el Tren Interurbano México-Toluca, que inició operaciones a lo largo de las primeras cuatro de siete estaciones que para 2024 conectarán la capital del Estado de México con la capital del país.

Primeros usuarios de «El Insurgente» Tren Interurbano México-Toluca, el cual se inauguró el 15 de septiembre de 2023. Foto: Crisanta Espinoza, Cuartoscuro.

En julio, previo a su inauguración, el Gobierno federal anunció que la inversión de la actual administración en dicha obra había sido de 97 mil millones de pesos y se estimaba que para 2024 el Tren Interurbano tendrá una demanda de 81 mil pasajeros diarios.

Mientras que el 15 de diciembre se realizó el primer viaje del Tren Maya sobre el tramo que recorre de Palenque, Chiapas, a Cancún, Quintana Roo; y para el cual los boletos se agotaron en tiempo récord.

El proyecto emblemático de la administración morenista no estuvo exento de críticas de ambientalistas por la devastación de suelos forestales y la falta de atención a los llamados de pueblos indígenas aledaños que exigieron un alto a la construcción.

Además, el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) de la Cámara de Diputados identificó entre enero y diciembre de 2022 un gasto aprobado para el Tren Maya de 62 mil 942 millones de pesos, aunque se ejerció en dicho año un total de 173 mil 012 millones, casi el triple del monto previsto inicialmente en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2022.

Sólo una semana después, reiniciaron las operaciones de la Línea Z del Ferrocarril Interoceánico del Istmo de Tehuantepec. Los movimientos de carga ya se realizaban desde septiembre. El servicio de pasajeros comenzó con nueve estaciones y con capacidad de transporte hasta de 400 personas por tren, durante el periodo de preapertura habrá un viaje al día, posteriormente aumentarán conforme a la demanda.

La línea recorre el trayecto Coatzacoalcos-Salina Cruz a través de 308 kilómetros de vías férreas. El Gobierno federal ha defendido el proyecto al asegurar que conectará el mercado de Asia con la costa este de Estados Unidos.

Decenas de personas esperaron el arribo del primer tren de pasajeros de la Línea Z del Corredor Interoceánico en la estación de Ciudad Ixtepec, Oaxaca. Foto. Carolina Jiménez, Cuartoscuro

MEXICANA DE AVIACIÓN, LA APUESTA POR BANCOS E INTERNET

El vuelo de Mexicana de Aviación del AIFA a la base área de Tulum, en Quintana Roo, ーcon una parada en Yucatán por las condiciones climáticasー significó el retorno de una aerolínea en manos del Estado. La empresa fue privatizada durante el Gobierno de Vicente Fox Quesada al entregarla al empresario Gascón Azcárraga, quien finalmente la llevó a la quiebra. 

«Lo importante es que se rescata esta línea aérea de México luego de actos de corrupción y de estas entregas que se hicieron de bienes públicos a particulares», opinó el Presidente López Obrador el martes.

Por ahora, Mexicana será manejada por el Grupo Aeroportuario, Ferroviario y de Servicios Auxiliares Olmeca-Maya-Mexica, S.A. de C.V.​, el cual está administrado por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y que fue creado en 2022 para gestionar infraestructuras como el AIFA y el Tren Maya.

La nueva aerolínea realizará operaciones desde el AIFA hacia 14 destinos del país en los estados Baja California, Chiapas, Campeche, Guerrero, Jalisco, Nuevo León, Quintana Roo, Sinaloa, Tabasco, Tamaulipas y Yucatán.

Mexicana de Aviación reanudó operaciones después de 13 años sin actividad. Foto: Mario Jasso, Cuartoscuro
Mexicana de Aviación reanudó operaciones después de 13 años sin actividad. Foto: Mario Jasso, Cuartoscuro.

En 2005, el Gobierno de Fox Quesada vendió Mexicana de Aviación –empresa creada en 1921 y una de las tres aerolíneas más antiguas del mundo– a Grupo Posadas, propiedad de Gastón Azcárraga Andrade, por sólo 165 millones de dólares, tras 23 años de mantenerse como una empresa que contaba con participación estatal mayoritaria luego de que en 1982 el Gobierno de México compró el 54 por ciento de las acciones de la empresa.

Los problemas de la aerolínea comenzaron casi desde que fue comprada. En 2006, la compañía, bajo el argumento de que atravesaba por problemas financieros, solicitó a sus sindicatos que le proporcionara los ahorros de sus trabajadores sindicalizados, lo que ocasionó conflictos con ellos.

Por ello, y bajo la afirmación de que la empresa sólo era viable con la colaboración económica de sus sindicatos, Mexicana de Aviación firmó un contrato con la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA) para adecuar los salarios y prestaciones de los pilotos, con lo que, por cuatro años, la aerolínea ahorró 200 millones de dólares. Otra estrategia fue crear filiales con condiciones desfavorables para las y s empleados.

En 2010 se dio a conocer que la aerolínea atravesaba por una grave situación financiera, lo que provocó el cese de operaciones y que casi tres años más tarde, el 3 de abril de 2014, se decretara la quiebra de la aerolínea. Más de 8 mil 600 trabajadores exigieron desde entonces  recuperar su fuente laboral.

López Obrador criticó esta semana la entrega de la aerolínea a Gascón Azcárraga, pues la describió como un pago por el apoyó que el empresario dio a la campaña de Vicente Fox, también describió a quienes participaron en acciones de este tipo como un “grupo de saqueadores”.

En ese sentido, el Jefe del Ejecutivo criticó que empresarios aliados de gobernantes recibieran empresas del Estado. Como ejemplo, expuso que el empresario Carlos Slim se quedó con Teléfonos de México, pero que como Roberto Hernández ambicionaba lo que ahora se conoce como Telmex, se molestó porque no le correspondió a él y, denunció, le entregaron Banamex.

“No crean que se lo dieron así: ‘A ti te toca’. No. Simularon una licitación y a él le correspondió Banamex. Luego negociaron con otro grupo, con otras personas para entregar Bancomer y resultó que el que obtuvo casualmente el segundo lugar en Banamex fue al que le dieron Bancomer, pero ya habían negociado también a quién le iban a entregar Bital y el que quedó en segundo lugar cuando entregaron Bancomer, a ese le tocó Bital”, relató.

López Obrador se refirió a la gestión de Carlos Salinas de Gortari, quien siendo Presidente, el 1 de mayo de 1990 envió al Congreso un proyecto de ley para modificar la propiedad de los bancos estatales mediante un régimen de propiedad mixta. En ese entonces el Estado controlaba la propiedad de 18 entidades bancarias: Banamex, Serfin, Internacional, Bancomer, Somex, Comermex, Confía, Cremi, BCH, Bancrecer, Atlántico, Banpaís, Multibanco, Mercantil de México, Promex, Bancen, Mercantil del Norte, Banorie y Banoro.

Entre los 23 hombres que acumularon riquezas en el sexenio salinista, muchos de ellos gracias a las privatizaciones, están Carlos Slim Helú (Grupo Carso); Emilio Azcárraga Milmo (fallecido en 1997, Grupo Televisa); Marcelo y Lorenzo (finado) Zambrano Treviño (Cemex); Jerónimo Arango (Grupo Wal-Mart); Alberto Baillères González (Grupo BAL); Roberto Hernández Ramírez (Grupo Financiero Banamex); Lorenzo (finado) y Roberto Servitje Sendra (Grupo Bimbo) y Ricardo Salinas Pliego (Grupo Elektra y TV Azteca).

Fachada de una sucursal de Citibanamex ubicada en avenida Paseo de la Reforma, en la Ciudad de México.
Fachada de una sucursal de Citibanamex ubicada en avenida Paseo de la Reforma, en la Ciudad de México. Foto: Daniel Augusto, Cuartoscuro.

El Gobierno federal actual hizo público su interés por recuperar Banamex, pero en agosto argumentaron la decisión de no continuar con la adquisición porque está por terminar su gestión.

Ese mes, López Obrador retiró el interés del Gobierno por comprarle Banamex al estadounidense CitiGroup, pero pidió a la próxima gestión que considere la adquisición.

“No hay que descartar eso, un Gobierno que inicia, por ejemplo, tiene tiempo. Imaginen cuánto maneja el Gobierno en los bancos y hay que pagar comisiones y luego también en los bancos se pagan impuestos”, dijo el 3 de agosto en conferencia de prensa.

Por sus críticas al enriquecimiento de algunas empresas, el mandatario ha defendido desde el inicio de su gestión la creación del Banco del Bienestar, al que describió en abril de este año como «el banco más importante de México», pues cuenta con 25 millones de personas beneficiarias.

Este año se reportó 553 sucursales en proceso de construcción. En abril, con estas acciones el banco tenía un avance del 77.92 por ciento del cumplimiento del compromiso que hizo López Obrador al llegar a la Presidencia.

El Presidente Andrés Manuel López Obrador en la inauguración de una sucursal del Banco del Bienestar en abril. Foto: Gobierno de México

El 2023 también cierra con el inicio de la venta de paquetes de la CFE, a través de su división Telecomunicaciones e Internet para Todos (CFE-TEIT), para sus nuevas tarjetas SIM (chips con conexión móvil), esto como parte del programa Internet para el Bienestar, con la intención de llegar a comunidades rurales con precios que van desde 50 pesos.

La CFE ha informado que Internet para el Bienestar tiene 94.7 por ciento de cobertura en el país, con 10.115 torres de conectividad, la señal se obtendrá a través de la red propia y de asociaciones público-privadas. Desde 2020 Altán Redes firmó con CFE-TEIT un contrato de servicios mayoristas, convirtiendo a la empresa del Estado en un Operador Móvil Virtual de la Red Compartida.

Los paquetes de internet que ofrece la CFE incluyen llamadas y mensajes a México, Estados Unidos y Canadá; además de permitir la navegación en redes sociales.

Montserrat Antúnez
Periodista. Comprometida con comunicar temas sobre acceso a la justicia y derechos humanos. Trabaja por un periodismo con perspectiva de género y que respete la dignidad de las personas.
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