Desde el pasado mes de octubre la ACNUR adelantó en su Informe Semestral de Tendencias, en el que analizó el desplazamiento forzado durante los primeros seis meses de este 2023, que a finales de septiembre, el número de personas desplazadas “probablemente superó los 114 millones” a nivel mundial. En México, esta situación no es ajena.
Ciudad de México, 31 de diciembre (SinEmbargo).- Durante este 2023 la violencia provocó el aumento del número de personas desplazadas a nivel mundial, y México no fue la excepción, ya que no sólo fue el espacio al que arribaron miles de migrantes irregulares, también experimentó varios episodios de desplazamiento interno, la mayoría causados por la irrupción del crimen organizado, así lo dio a conocer el Informe Operacional de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Durante el Foro Mundial sobre los Refugiados de 2023, evento que estuvo a cargo del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) de la ONU en conjunto con el Gobierno de Suiza, se dio a conocer que en el mundo la población desplazada por la fuerza sumaba un total de 114 millones de personas.
Desde el pasado mes de octubre la ACNUR adelantó en su Informe Semestral de Tendencias, en el que analizó el desplazamiento forzado durante los primeros seis meses de este 2023, que a finales de septiembre, el número de personas desplazadas “probablemente superó los 114 millones” a nivel mundial, por razones como “la guerra, la persecución, la violencia y las violaciones de derechos humanos”.
A través de un comunicado publicado el 25 de octubre, la ACNUR destacó que tan sólo a finales de junio 110 millones de personas habían sido desplazadas a la fuerza en todo el mundo, un aumento de 1.6 millones con respecto al final de 2022.
“En los tres meses desde junio hasta finales de septiembre, ACNUR estima que el número de desplazados forzosos aumentó en cuatro millones, elevando el total a 114 millones. El conflicto en Oriente Medio estalló el 7 de octubre, más allá del período cubierto por este informe, por lo que no tiene en cuenta sus consecuencias en términos de desplazamiento humano”, añade en el comunicado.
Mientras que en su Informe Operacional la ACNUR señaló que en México, entre los meses de septiembre y octubre, el número de migrantes irregulares que arribaron al territorio nacional pasó de 650 personas diarias a más de mil 500 a tres mil al día, principalmente provenientes de Cuba y Haití, incluso recordó el episodio por el que Ferromex tuvo que suspender sus servicios ante la gran cantidad de personas que buscaban abordar este transporte.
“En el norte de México, durante septiembre y octubre 2023 varios cientos de personas llegaron en tren a Piedras Negras y Ciudad Juárez para cruzar la frontera con Estados Unidos, cuando las cifras alcanzaron su punto máximo y mil 500 personas esperaban los trenes en el estado de Coahuila, la compañía ferroviaria Ferromex suspendió temporalmente el servicio de trenes durante varios días”, detalla.
“La llegada de personas en movimiento a través del sur de México fue particularmente notable en la ciudad fronteriza de Tapachula, Chiapas, el principal punto de entrada a México”, añade el informe, en el que se rememoró el episodio del pasado 30 de octubre, en el que tres mil personas, en su mayoría hondureños, integraron una caravana que partió desde Tapachula, Chiapas, la cual llegó a Huixtla, Chiapas.
En este sentido se apunta que desde el inicio de este 2023 y hasta el pasado 30 de noviembre, un total de 136 mil 934 personas solicitaron asilo, “cifra supera en casi 30 por ciento el número total de solicitudes presentadas durante el mismo periodo de 2022”, y detalla que durante el mes de octubre los estados de Chiapas, Tabasco y Veracruz concentraron el 72 por ciento de “todas las solicitudes tramitadas en el país”.
Asimismo, “entre julio y noviembre de 2023, la Ciudad de México ha visto crecer el número de solicitudes de asilo, siendo los venezolanos la principal nacionalidad, seguidos de haitianos y hondureños. De julio a noviembre de 2023, alrededor de 20 por ciento de todas las solicitudes de asilo en el país se presentaron en la Ciudad de México”, destaca el documento de la ACNUR.
Esta situación se ha visto reflejada en la saturación de los albergues, que operan a su máxima capacidad. Por ejemplo, el informe indica que estos “continúan sobresaturados al 500 por ciento de su capacidad, como el albergue de CAFEMIN. El albergue del gobierno de Tláhuac [Alcaldía] aloja hasta tres mil personas aún cuando su capacidad es para 150 personas”.
Por lo anterior se han disparado los asentamientos informales, “sobre todo en ciudades como Matamoros y Reynosa”. “Estos asentamientos plantean graves problemas de protección para las personas que viven en ellos, como la seguridad, el acceso a agua e higiene, las condiciones generales de vida y el riesgo de enfermedades infecciosas”, añade el documento.
Pero el desplazamiento México también se ha incrementado de manera interna, subrayó el Informe Operacional de la ACNUR, publicado en pasado mes de noviembre, ya que destacó que se ha presentado un incremento en el desplazamiento interno, particularmente en la frontera norte del país, por lo que ahora los mexicanos “representan casi la mitad de la población de los albergues”.
Este aumento del desplazamiento interno en los últimos meses responde a causas como el “incremento de la violencia perpetrada por grupos delictivos y disputas por la tierra en al menos siete estados”. Por ejemplo, el informe señala que “en el estado de Michoacán, se requirió una respuesta de emergencia debido al desplazamiento de alrededor de 800 personas por enfrentamientos entre grupos del crimen organizado”.
Asimismo refiere datos de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (CMDPDH), los cuales señalan que “más de 379 mil personas fueron desplazadas en México por incidentes de violencia entre 2006 y 2021”, misma organización que pronosticó que finales de este 2023 “habrá 30 mil desplazados internos más”.
De acuerdo con el Informe Mundial sobre Desplazamiento Interno (GRID) 2023, los desastres naturales, los conflictos y la inseguridad motivaron el desplazamiento interno en México de nueve mil 200 personas, tan sólo durante 2022, siendo la inseguridad la principal causa de este fenómeno, en el que el 90 por ciento de los casos sucedieron en los estados de Chiapas, Michoacán y Zacatecas.
“El cartel de la droga Jalisco Nueva Generación fue responsable de al menos dos mil 700 desplazamientos en Michoacán y Zacatecas. Alrededor de dos mil 100 ocurrieron el 29 de septiembre, cuando miembros del cártel entraron en el municipio de Chinicuila, en Michoacán, menos de dos semanas después de que se produjera un terremoto de 7.7 grados”, destaca el documento.
“Según se informa, ya habían obligado a más de la mitad de la población de la ciudad a huir a finales de 2021. Enfrentamientos entre grupos criminales rivales, que se apoderaron del territorio de Zacatecas, provocaron 600 desplazamientos en mayo, particularmente en la comunidad rural de El Mirador. Muchas de las familias regresaron, pero la continua inseguridad aumenta el riesgo de que se repitan los desplazamientos”, agrega el GRID.