Mientras se llevaba a cabo la reunión en Washington, Estados Unidos, Corea del Sur y Japón emitieron una declaración conjunta condenando el lanzamiento del misil como una “violación flagrante” de numerosas resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y criticando la profundización de la cooperación militar entre Corea del Norte y Rusia, particularmente el despliegue de las tropas norcoreanas.
Por Tara Copp, Matthew Lee y Edith M. Lederer
Washington, 31 de octubre (AP).- El Secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, dijo el jueves que tiene información de que unos ocho mil soldados norcoreanos están ahora en la región rusa de Kursk, cerca de la frontera con Ucrania, y se preparan para ayudar al Kremlin a luchar contra las tropas ucranianas.
En un momento dramático, durante una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU, el Embajador adjunto de Estados Unidos ante Naciones Unidas, Robert Wood, pidió más tiempo para complementar sus comentarios anteriores, donde condenaba la creciente cooperación militar entre Rusia y Corea del Norte.
“Acabamos de recibir información, que llega ahora mismo, de que en este momento hay unos ocho mil soldados de la RPDC en el Óblast de Kursk”, dijo Wood, usando el acrónimo de la República Popular Democrática de Corea, o Corea del Norte. Kursk es una región que las fuerzas ucranianas tomaron por sorpresa en agosto.
“Y tengo una pregunta muy respetuosa para mi colega ruso: ¿Rusia todavía sostiene que no hay tropas de la RPDC en Rusia? Esa es mi única pregunta y mi último punto”, dijo.
El representante ruso en la reunión del consejo, que Rusia convocó para discutir la paz y la seguridad internacionales, no respondió al comentario y la sesión fue suspendida.
El despliegue de hasta 12 mil soldados norcoreanos en Rusia se ha convertido en un tema clave, mientras los líderes de Estados Unidos y Corea del Sur se reúnen en Washington esta semana, alimentando preocupaciones de que la presencia de esos soldados desestabilizará aún más la región Asia-Pacífico y ampliará la guerra de Moscú en Ucrania.
A medida que algunos de esos soldados se acercaban a Ucrania esta semana desde sitios de entrenamiento en el este de Rusia, las principales preguntas giran en torno a qué nuevas tecnologías militares podría obtener Corea del Norte de Rusia a cambio del despliegue, y si podría llevar a otras naciones a enviar a sus propias fuerzas a luchar en la guerra.
Las discusiones ahora se trasladan al Departamento de Estado, donde el Secretario Blinken y el Secretario de Defensa, Lloyd Austin, sostienen conversaciones el jueves con el Ministro de Relaciones Exteriores de Corea del Sur, Cho Tae-yul, y el Ministro de Defensa, Kim Yong-hyun.
También el jueves, Corea del Norte lanzó por primera vez en casi un año un misil balístico intercontinental, demostrando un potencial avance en su capacidad para lanzar ataques nucleares de largo alcance en el territorio continental de Estados Unidos. Algunos expertos especularon que Rusia podría haber proporcionado asistencia tecnológica a Corea del Norte para el lanzamiento.
Mientras se llevaba a cabo la reunión en Washington, Estados Unidos, Corea del Sur y Japón emitieron una declaración conjunta condenando el lanzamiento del misil como una “violación flagrante” de numerosas resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y criticando la profundización de la cooperación militar entre Corea del Norte y Rusia, particularmente el despliegue de las tropas norcoreanas.
“Instamos firmemente (a Corea del Norte) a cesar de inmediato su serie de acciones provocativas y desestabilizadoras que amenazan la paz y la seguridad en la península de Corea y más allá”, dijeron.
En una conferencia de prensa realizada el miércoles en el Pentágono, Austin dijo que soldados norcoreanos vestidos con uniformes rusos y portando equipo ruso se desplazan hacia Ucrania, en lo que llamó una acción peligrosa y desestabilizadora.
