El sospechoso repartía panfletos antes del incidente, dijo la agencia, aunque no reveló su contenido. De inmediato, añadió, no se pudo detectar daño alguno al cuadro ni al marco, que estaban siendo examinados en el taller de la institución.
BERLÍN (AP).— Una persona arrojó sangre falsa a un cuadro del pintor francés Henri de Toulouse-Lautrec en un museo de Berlín, un acto que recordó recientes protestas de activistas ecológicos, aunque al parecer no estaba vinculado, informaron autoridades el lunes.
La persona lanzó la pintura roja a la obra “El payaso” en la Alte Nationalgalerie de Berlín el domingo, y luego adhirió una de sus manos con pegamento a la pared, indicó la autoridad de museos alemana.
Ich bin erschüttert über diesen weiteren sinnlosen Angriff auf die Kunst, der diesmal keiner klimapolitisch aktiven Gruppe zuzuordnen scheint. Das Werk ist wohl nicht schwer beschädigt, jedoch durch Farbe und Kleber Schaden im Ausstellungssaal entstanden. https://t.co/xRzGq4H1a9
— Hermann Parzinger (@hparzinger) October 30, 2022
La policía detuvo a la persona.
El director de la Fundación Cultural Prusiana, que supervisa a la autoridad de museos, se expresó el domingo “asombrado por este ataque insensato contra el arte, que en este caso al parecer no puede ser atribuido a grupo alguno activo en el campo de la política climática”, reportó la agencia de noticias dpa.
Hatte eine Clownsnase auf , das Bild mit Kunstblut bespritzt und Zettel rumgeworfen und sich dann festgeklebt. Ansonsten war sie recht schweigsam. pic.twitter.com/s3vpYgUYnk
— svigo (@svigo) October 30, 2022
Hermann Parzinger dijo que, según evaluaciones iniciales, no hubo daños considerables al cuadro, aunque se tuvo que remover pegamento y tinta de la pared donde colgaba la obra de arte.
El incidente ocurre después de otros parecidos perpetrados por el grupo Uprising of the Last Generation (“Alzamiento de la Última Generación”), que ha bloqueado calles y ha tirado puré de papas contra un cuadro de Claude Monet en un museo en Potsdam, en las afueras de Berlín.
El domingo, dos activistas ambientalistas se adhirieron con pegamento al esqueleto de un dinosaurio en el Museo de Historia Natural de Berlín para protestar por lo que dicen es la falta de acción del Gobierno alemán para encarar la crisis climática.
Las mujeres se adhirieron a los palos que sujetan al enorme esqueleto de un dinosaurio que vivió hace decenas de millones de años. “A diferencia de los dinosaurios, nosotros podemos cambiar nuestra suerte”, declaró la activista Caris Connell, de 34 años, mientras varias personas merodeaban por el museo. “¿Queremos quedar extintos como los dinosaurios, o queremos sobrevivir?”.