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Más de un millón en Luisiana y Mississippi se quedarán semanas sin luz por “Ida”

31/08/2021 - 7:44 am

Las autoridades estadounidenses advirtieron que el daño fue tan extenso que podría tomar semanas reparar el tendido eléctrico tras el paso de “Ida”, el quinto huracán más poderoso en azotar el territorio continental de Estados Unidos.

Por Rebecca Santana y Jay Reeves

NUEVA ORLEANS (AP) — Rescatistas en barcos, helicópteros y camionetas para aguas altas pusieron a salvo el lunes a cientos de personas que quedaron atrapadas en las inundaciones provocadas por el huracánIda“, mientras los equipos de reparación de servicios públicos se apresuraban a llegar después de que la tormenta empapara la costa de Luisiana y arrasara con la red eléctrica del estado en el sofocante calor de finales de verano.

Las personas que viven en medio del laberinto de ríos y pantanos a lo largo de la costa del estado en el Golfo de México se resguardaron en sus áticos o techos y publicaron sus direcciones en redes sociales con instrucciones para que los equipos de rescate los ubicaran.

Más de un millón de clientes en Luisiana y Mississippi, incluidos todos los de Nueva Orleans, se quedaron sin electricidad luego de que “Ida”, uno de los huracanes más poderosos en azotar el territorio continental de Estados Unidos, se abrió paso el domingo.

El daño fue tan extenso que las autoridades advirtieron que podría tomar semanas reparar el tendido eléctrico.

La tormenta se degradó la noche del lunes a depresión tropical y seguía avanzando tierra adentro, provocando lluvias torrenciales. Se le atribuyeron por lo menos dos muertes: de un automovilista que se ahogó en Nueva Orleans y de una persona que fue golpeada por la caída de un árbol en las afueras de Baton Rouge.

Greg Nazarko, gerente del bar Bourbon Bandstand de Nueva Orleans, se apoya en un poste ante el club donde estuvo durante el paso del huracán “Ida”, que dejó la ciudad sin electricidad, el lunes 30 de agosto de 2021. Foto: Gerald Herbert, AP

Sin embargo, aún se desconocía toda la magnitud de los daños, debido a que muchas carreteras estaban intransitables y no había servicio de telefonía móvil en muchos lugares. Christina Stephens, portavoz del Gobernador John Bel Edwards, dijo que dado el nivel de destrucción, “vamos a tener muchas más muertes confirmadas”.

La oficina del Gobernador dijo que el daño a la red eléctrica parecía ser “catastrófico”, una noticia desalentadora para aquellos que se quedaron sin refrigeración o aire acondicionado durante los días veraniegos, con pronósticos de temperaturas superiores a los 26 grados Celsius (80 grados Fahrenheit) y cercanas a los 32 grados Celsius (90 Fahrenheit) a mediados de semana.

“Hay más preguntas que respuestas. No puedo decirles cuándo se restablecerá la electricidad. No puedo decirles cuándo se retirarán todos los escombros y se realizarán las reparaciones”, dijo Edwards durante una conferencia de prensa. “Pero lo que sí puedo decirles, es que vamos a trabajar muy duro todos los días para entregar la mayor cantidad de ayuda que podamos”.

Los rescatistas locales, estatales y federales se combinaron para salvar a por lo menos 671 personas hasta el lunes por la tarde, comentó Edwards.

En la azotada comunidad de LaPlace, ubicada entre el río Mississippi y el lago Pontchartrain, los rescatistas salvaron a gente de casas inundadas en un operativo casi constante.

Debbie Greco, su esposo e hijo resistieron la tormenta en LaPlace con los padres de Greco. El nivel del agua alcanzó a las ventanas del primer piso, luego derribó la puerta trasera y llenó la casa de ladrillo con más de un metro (4 pies) de agua. Se refugiaron en el segundo piso, pero entonces los vientos huracanados derrumbaron el techo.

Finalmente fueron rescatados por un bote después de esperar en el único sitio seco, cinco personas compartiendo el rellano de la escalera.

“Cuando reconstruya esto me voy. Ya me cansé de Luisiana”, comentó el padre de Greco, Fred Carmouche de 85 años, quien ha vivido en el estado toda su vida.

En otra zona de LaPlace, la gente sacaba pedazos de chimeneas, canaletas y otras partes de sus viviendas a la acera y los residentes de un parque de casas rodantes caminaban entre las aguas de la inundación.

El huracán “Ida” tocó tierra firme en el 16to aniversario del paso del huracán “Katrina”, la tormenta de 2005 que rompió los diques de Nueva Orleans, arrasó con la ciudad y a la que se le atribuyeron mil 800 muertes.

En esta ocasión, Nueva Orleans pareció escapar de las catastróficas inundaciones que temían las autoridades de la ciudad.

Los vientos de 230 kilómetros por hora (150 millas por hora) de “Ida” la convirtieron en el quinto huracán más potente en azotar el territorio continental de Estados Unidos. Sus vientos eran de 64 km/h (40 mph) el lunes a mediodía.

En el extremo suroeste de Mississippi, vecindarios enteros quedaron rodeados de agua, y muchos caminos estaban intransitables. Se reportaron varios tornados, incluido uno en Saraland, Alabama, que arrancó parte del techo de un motel y volcó un tráiler, causando heridas al conductor, según informó el Servicio Nacional de Meteorología.

Se tenía previsto que “Ida” aumentara su velocidad el lunes por la noche antes de arrojar lluvias sobre los valles de los ríos Tennessee y Ohio el martes, la región montañosa de los Apalaches el miércoles y la capital de la nación el jueves.

Los meteorólogos advirtieron que existía la posibilidad de inundaciones y aludes a lo largo del trayecto de “Ida” antes de que se desplace hacia el mar sobre Nueva Inglaterra para el viernes.

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