Mauricio Valle, director del remake de esta comedia de amor, consideró que hacer la segunda versión de una cinta tan exitosa no es más complicado que hacer una película normal, y al hacer una nueva versión parte del punto en el que no le importa la comparación.
Ciudad de México, 31 de agosto (AP).– El amor intenta superar todas las barreras, incluso las de la pérdida de memoria a corto plazo, en Como si fuera la primera vez, una comedia romántica protagonizada por los actores mexicanos Vadhir Derbez y Ximena Romo.
La nueva versión cinematográfica de 50 First Dates (Como si fuera la primera vez) con Adam Sandler y Drew Barrymore de 2004 tiene varios cambios: en vez de desarrollarse en Hawái fue filmada en las paradisiacas playas de República Dominicana y la pareja no es de mediana edad, sino que son veinteañeros. Lo que sí tienen en común ambas cintas es la falta de memoria de Luci (Romo), quien sólo puede recordar su pasado remoto y cree que vive eternamente el mismo día que tuvo un accidente por el que perdió la memoria.
Dirigida por el mexicano Mauricio Valle, entre cuyos créditos destacan Dariela los martes y La mala noche, la película muestra que las personas con alguna enfermedad mental como Luci pueden llevar una vida bastante funcional e incluso tener relaciones amorosas.
“Retrata esta enfermedad, pero creo que lo hace de una forma esperanzadora, lo hace de una forma divertida, te hace ver que el amor lo hace todo posible, que en realidad la vida puede seguir a pesar de, y eso me parece un mensaje muy lindo”, dijo Romo en una entrevista reciente a propósito del estreno de la cinta este fin de semana.
“Si estás enamorado, tú crees en esa persona y que esa persona es para ti. El amor lo puede todo y vas a mover montañas con tal de estar con esa persona y adaptarte”, dijo por su parte Derbez, quien da vida a Diego, un biólogo que llega a trabajar a un centro marino y se enamora de Luci en un restaurante de hotel a donde va a desayunar todos los días.
El experimentado actor mexicano Alejandro Camacho, con créditos en telenovelas como Yo no creo en los hombres, Imperio de cristal y Muchachitas y las películas Todos queremos a alguien, Guerrero negro y Zurdo, dijo que entró muy fácilmente en su personaje del padre de Luci, quien para evitar que se angustie por no saber en qué día vive simula junto con su hijo (Paco Rueda) que todos los días son el día que Luci se accidentó.
“Nos conocimos en el avión (a Dominicana) y yo le dije ‘soy tu hijo’ y se rió”, recordó Rueda sobre su primer encuentro con Camacho. “Entendimos muy bien nuestra relación. Fuimos muy sensibles el uno al otro, nos escuchamos. Esa relación estaba fuera del set, eso servía mucho, tanto que en el hotel pensaban que era mi papá, que yo era su hijo”, recordó Rueda.
Como es de esperarse, el padre de Luci y su hijo ven con recelo que Diego intente acercarse a ella, pues creen que no podrá comprenderla.
“Llega a sacarlos de este loop (vuelta) interminable en el que están para tratar de darles a todos una mejor calidad de vida y que sus vidas puedan tener un futuro hasta cierto punto”, dijo Derbez. “Ven tanto cariño de parte de él y tanta insistencia con buenas intenciones obviamente que le dan esa oportunidad de decir ‘sé parte del equipo’”.
Coproducida por Lantica Media, Le Petit Soldat Cinema y Sony Pictures International Productions, la cinta tuvo entre su equipo de producción a técnicos dominicanos y cuenta con la actuación de actores locales como Omar Augusto Luis, Loraida Bobadilla, Cynthia Guzmán y Johnnie Mercedes.
“No creo que sea más complicado que hacer una película normal, si vas a hacer una nueva versión de una película partes del punto en el que no te debe de importar la comparación”, dijo el director sobre el hecho de retomar la historia 15 años después con nueva tecnología y un mundo cambiado. “Lo que sí es un hecho es que tú buscas una película en donde tengas algo que decir… No es más difícil que hacer una película original o más fácil, es igual, es tú película y es tu visión de ese proyecto”.