Es un hecho. El Departamento de Comercio estadounidense anunció esta mañana aranceles a la importación de acero y aluminio de la Unión Europea (UE), Canadá y México, en una decisión que dispara las tensiones comerciales y provocará represalias de sus socios.
El Gobierno de México informó esta mañana que impondrá medidas equivalentes a diversos productos ante las medidas proteccionistas de Estados Unidos en acero y aluminio. Lo mismo hará Canadá.
Washington/Ciudad de México, 31 de mayo (SinEmbargo/Agencias).– El Departamento de Comercio estadounidense anunció esta mañana la suspensión de la exención a la imposición de aranceles a la importación de acero y aluminio de la Unión Europea (UE), Canadá y México, en una decisión que dispara las tensiones comerciales y provocará represalias de sus socios.
“Hemos decidido no extender la exención para la UE, Canadá y México, por lo que estarán sujetos a los aranceles del 25 por ciento y 10 por ciento” en el acero y el aluminio, indicó Wilbur Ross, Secretario de Comercio de Estados Unidos, poco antes de cumplirse el plazo para tomar una decisión al respecto.
El Gobierno de México informó esta mañana que impondrá medidas equivalentes a diversos productos ante las medidas proteccionistas de Estados Unidos en acero y aluminio. Las medidas equivalentes se harán a diversos productos como aceros planos (lamina caliente y fría, incluidos recubiertos y tubos diversos), lámparas, piernas y paletas de puerco, embutidos y preparaciones alimenticias, manzanas, uvas, arándanos, diversos quesos, entre otros, hasta por un monto equiparable al nivel de la afectación.
Esta medida estará vigente hasta en tanto el gobierno estadounidense no elimine los aranceles impuestos.
El Presidente Enrique Peña Nieto sostuvo esta mañana una conversación vía telefónica con el Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau, quien le confirmó que su país también establecerá medidas compensatorias proporcionales.
Ayer por la noche, The Wall Street Journal anticipaba que Estados Unidos aplicaría los nuevos aranceles a las importaciones de acero y aluminio procedentes de la Unión Europea, México y Canadá. La decisión, dijo, podría poner en peligro las complejas negociaciones sobre el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). Ayer, los negociadores se esforzaban por llegar a un acuerdo con la amenaza de la reactivación de los aranceles en el horizonte. Finalmente, la fecha ha llegado y el acuerdo todavía no ha visto la luz.
Esto fue confirmado esta mañana por el mismo Gobierno de Trump; por su Secretario de Comercio, Wilbur Ross.
El anuncio llega después de que Trump ha endurecido otra vez su mensaje de odio contra México. Hace unas semanas llamó “animales” a los migrantes (aunque después quiso corregir) y esta semana anunció que los mexicanos pagarán por el muro que construye en la frontera, de por sí una gran majadería contra el país vecino del norte.
El Presidente Trump anunció los impuestos en marzo, pero Estados Unidos otorgó exenciones a la Unión Europea, Canadá, México y otros aliados de Washington. Ross dijo que las conversaciones con Canadá y México sobre el Tratado de Libre Comercio “están tardando más de lo que esperábamos”.
Agregó que en las negociaciones con Europa ha habido “algunos avances”, pero no lo suficientes como para merecer una exención.
SIN ACUERDO EN EUROPA
El WSJ recordó que en el caso de la Unión Europea esa negociación tenía como plazo este viernes, pero no se ha llegado a un acuerdo y el jueves se dará a conocer la extensión de las medidas arancelarias a los países europeos. Aun así, una de las fuentes consultadas por el Journal apuntó que la posición de Washington todavía podría cambiar si se llega a un acuerdo de última hora, aunque las dos partes creen que hay pocas probabilidades de que ello suceda.
Parte de los contactos entre ambas partes se están llevando a cabo en París, con motivo de la reunión que celebra allí la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE). El secretario de Comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross, dijo hoy en París que en caso de que finalmente Washington aplique esos nuevos aranceles al acero y el aluminio de la Unión Europea ello no debe impedir que sigan las negociaciones para llegar a un arreglo en este tema.
AUROPA RESPONDERÁ DE MANERA “DECIDIDA Y UNIDA”
Europa ha amenazado con responder de manera”decidida y unida” aplicando sus propios nuevos aranceles a determinadas importaciones de Estados Unidos, como las motocicletas, en caso de que la Casa Blanca decida finalmente aplicar las nuevas tarifas para el acero y el aluminio europeos.
“China no ha usado esto como una excusa para no negociar (en referencia a los gravámenes)… solo la Unión Europea está insistiendo en que no podemos negociar si hay aranceles”, criticó el secretario de comercio estadounidense desde la capital gala horas antes de reunirse con la comisaria europea de comercio, Cecilia Malmström. Un encuentro donde no pareció haber consenso alguno según pudo deducirse del comunicado emitido posteriormente. “Afortunadamente podríamos tener una agenda positiva con nuestros pares estadounidenses sin aranceles ni cuotas. Sin embargo, siendo realistas, no creemos que podamos esperar eso”, sentenció la alta funcionaria europea.
Los Estados miembros se juegan hasta unos 6,050 millones de euros con los aranceles sobre las importaciones al acero y al aluminio, según los datos que baraja la Comisión Europea. Una cifra que Bruselas contrarrestará gravando la importación de una lista de productos estadounidenses por valor de 6,400 millones de euros. En abril pasado, la administración Trump extendió hasta el 1 de junio la exención a México, Canadá y la Unión Europea para la imposición de aranceles a sus exportaciones de acero y aluminio a Estados Unidos.
A mediados de mayo, el secretario estadunidense de Comercio, Wilbur Ross, indicó que el presidente Trump decidiría si extiende las exenciones arancelarias a México o Canadá, dependiendo del estado de las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de Norteamérica (TLCAN) .
LA CAMARA DE COMERCIO PIDE NO IMPONER ARANCELES
La Cámara de Comercio de Estados Unidos (USCC) hizo este miércoles un llamado al presidente Trump para desechar su plan de imponer aranceles a las importaciones de acero y aluminio, y advirtió que serían un impuesto a los consumidores estadunidenses. “Estados Unidos no debe expandir los aranceles cuota a las importaciones de acero y aluminio a países adicionales a partir del 1 de junio, como se ha amenazado”, apuntó el vicepresidente de Asuntos Internacionales de la USCC, Myron Brilliant.
“Tal acción impactaría a los manufactureros estadunidenses con más altos costos, desaceleración del crecimiento del sector de la construcción y pondría frenos en la creación de empleos en ambas industrias clave”, señaló. La cúpula empresarial estadounidense hizo notar que los precios del acero de su país ya son casi 50 por ciento más altos que aquellos de Europa y China, mientras que los precios del aluminio han sido “extremadamente volátiles”. “Esta acción se agregaría sustancialmente a esos retos”, sostuvo Brilliant.