La mayor percepción de riesgo sobre la moneda mexicana se debió a la caída del ¨PIB en 2020 de 8.5 por ciento; la lentitud en la campaña de vacunación; así como la aprobación en el Congreso de la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica y la presentación de la de Hidrocarburos.
Ciudad de México, 31 de marzo (SinEmbargo).- Este miércoles los mercados observaron el cierre del primer trimestre del año en el que los impulsos positivos se debieron a los avances en las campañas de vacunación en el mundo contra la COVID-19. Sin embargo enfrenta un entorno de aumento de casos y nuevos cierres parciales de movilidad por la tercera ola de contagios en Europa.
En el mercado de capitales el primer trimestre de 2021 fue positivo, debido a una mejor expectativa en torno a la recuperación económica global por los avances en las campañas de vacunación, así como por el impulso que generó el cambio de administración en Estados Unidos.
El peso enfrentó una depreciación trimestral de 2.36 por ciento (47 centavos), desde el cierre de 2020, cuando el tipo de cambio se ubicó en 19.9500 pesos por dólar. El movimiento se debió a un fortalecimiento del dólar relacionado con una mayor percepción de riesgo ante el incremento de casos de la COVID-19 al inicio del año y hacia finales de marzo, con la tercera ola de contagios en Europa. Las expectativas de presiones inflacionarias adicionales en EU impactaron negativamente al peso, así como una mayor incertidumbre por las "ventas en corto" como lo ocurrido con el fenómeno GameStop.
La mayor percepción de riesgo sobre la moneda mexicana también fue interna, debido a los datos del PIB de 2020, en los que el Inegi mostró una caída de 8.5 por ciento, la mayor desde 1932. También por la percepción de lentitud en la campaña de vacunación, así como la aprobación en el Congreso de la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica y la presentación de la de Hidrocarburos.
El dólar spot se vende en 20.4200 pesos, en tanto que en ventanillas de Banorte se coloca en los 20.70 pesos por cada billete verde.
Fue la segunda divisa más apreciada en el mes de marzo, cuando se apreció 2.50 por ciento (52 centavos), desde el cierre del tipo de cambio de febrero en 20.9440 pesos por dólar. La clave para la recuperación leve del peso fue un incremento en los precios de petróleo ante la expectativa de una recuperación económica global más rápida, impulsada por la campaña de vacunación. Además de la decisión del Banco de México de mantener la tasa de interés sin cambios en 4.0 por ciento.
"Para el segundo trimestre, se mantiene la expectativa de que el tipo de cambio permanezca en el escenario central en un rango de entre 20.50 a 21.50 pesos por dólar", adelantó Gabriela Siller, analista de Banco Base.
El IPC (S&P/BMV IPC) de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) terminó marzo con ganancias trimestrales del 7.21 por ciento (3 mil 179.38 unidades más) desde el cierre de 2020 en 44 mil 066.88 puntos. En el mes aumentó 5.95 por ciento (2 mil 653.35 puntos) desde el cierre del 26 de febrero en 44 mil 592.91 unidades.
El 17 de marzo tocó un máximo en el año de 48 mil 314.24 puntos, un nivel nivel no visto desde el 10 de octubre del 2018.
Pese a las ganancias mensuales y trimestrales el IPC terminó la jornada en las 47 mil 246.26 unidades, un retroceso de 1.38 por ciento, equivalentes a -658.74 puntos.
"El mercado accionario local fue impulsado al alza por el optimismo a nivel global y no por factores internos", destacó la analista de Banco Base.
Los factores de riesgo para el mercado interno son una lenta recuperación económica y la aprobación de políticas que impacten directamente en la atracción de inversión fija, como lo son la reforma a la Ley Eléctrica y de Hidrocarburos. "Además de ahuyentar la inversión, incumplen con algunas cláusulas del T-MEC, lo que pone en riesgo la relación comercial con Estados Unidos. De igual manera, las reformas se alejan de la estrategia de perseguir energías renovables, la cual es muy apoyada por Biden y el equipo demócrata, lo que podría generar diferencias entre ambas administraciones", expresó.
Siller destacó que, en adelante, los factores fueron de riesgo para el mercado bursátil son la posibilidad de presiones inflacionarias en EU que podrían llevar a la Reserva Federal a moderar un poco su postura monetaria; ventas masivas en activos del sector tecnológico, así como el riesgo de burbujas especulativas por la una mayor liquidez en el sistema financiero, derivada de las políticas monetarias expansivas de los bancos centrales.