A pesar de tener asma, sus familiares recuerdan a JJ Boatman como un niño muy activo y sano.
Ciudad de México, 31 de enero (SinEmbargo).- JJ Boatman, un niño de nueve años, murió en un hospital infantil de Fort Worth, en Texas, Estados Unidos a causa de complicaciones por la COVID-19.
De acuerdo con información recogida por CBS DFW, una tarde el menor estaba jugando y corriendo, sin embargo, ese mismo día por la noche comenzó a tener complicaciones para respirar por lo que fue llevado en helicóptero desde Vernon, donde vive su familia, al Cook Children’s Medical Center.
“Simplemente estaba corriendo y jugando ese mismo día, y por la noche le gritaba y le lloraba a su mamá que no podía respirar. Su mamá se acercó, y su cara ya estaba azul y sus labios estaban azules”, relató Gabriel Ayala, tío del menor a la cadena de televisión.
Ahí, los médicos le dijeron a la madre que los pulmones de JJ Boatman estaban llenos de líquido. Posteriormente, le informaron que el niño había fallecido por complicaciones relacionadas con la COVID-19.
Semanas antes, JJ Boatman había celebrado su cumpleaños número nueve con tacos y pastel junto a su familia. “Nunca supimos que ese iba a ser su último cumpleaños”, comentó Ayala.
Además, su tío dijo que JJ Boatman tenía asma, pero que eso no le impidió ser activo y jugar con sus primos o hermanas mayores.
Mientras lamentó la muerte de su sobrino, Ayala señaló que esta enfermedad puede darle a cualquiera y espera que la gente siga tomando el virus en serio.
“Vamos a extrañar su vida entera. Se va a perder toda la vida. Su vida ni siquiera había comenzado”, lamentó Ayala.
