Une y vencerás. Gobierno + Autodefensas

05/02/2014 - 12:00 am

Tal como algunos investigadores lo habían vaticinado, el gobierno federal podría estar detrás de los grupos de autodefensa, sobre todo ante la incógnita de la procedencia de armas y de recursos en manos de civiles que en la mayoría de los casos pertenecen a la clase más desfavorecida.

La firma del acuerdo con los grupos de autodefensa reafirma la hipótesis anterior. No es coherente que un grupo de civiles quienes su queja principal reside en la violencia y la extorsión por parte de los Templarios hacia ellos así como en la corrupción por parte de las autoridades, ahora se unan con quienes están coludidos con ese grupo de delincuentes que tanto daño les han hecho. Como tampoco es normal que en cuanto Mireles tuvo el accidente fue custodiado por las fuerzas federales.

El gobierno federal tenía dos opciones  cara al pueblo: "intentar" que los grupos de autodefensa se unieran a sus filas y a su lucha o reprimirlos y juzgarlos con todo el peso de la ley por los delitos que se hubieran llegado a cometer. La primera es muy riesgosa ya que la historia ha demostrado que estos grupos de autodefensa aún y siendo genuinos en un principio terminan siendo grupos paramilitares difíciles de disuadir; la segunda por su parte no es precisamente popular ya que durante las pasadas semanas la sociedad mexicana mostró gran empatía, afinidad y apoyo hacia estos grupos.

¿Cuál sería la reacción popular si el gobierno hubiera reprimido con todo el peso de la ley a aquellos que por sus "propios medios" y ante la ineficacia de la autoridad buscan defenderse de la delincuencia organizada, de los malos, de los otros? Considero que una reacción de desaprobación.

Optaron por la primera y lo hicieron bajo un acuerdo en donde se establecen las acciones a seguir tanto de un lado como del otro. Veamos los 8 puntos que en cierta forma institucionalizaron y legalizaron la violencia que independientemente de su objetivo, estaban ejerciendo los grupos de autodefensa.

Primero: los grupos de autodefensa se incorporan a los cuerpos de defensa rurales entregando una lista de sus integrantes, esto como medida temporal bajo el mando de la autoridad.

Segundo: los integrantes de las autodefensas podrán formar parte de la policía municipal.

Tercero: los grupos se obligan a registrar las armas y el gobierno se compromete de dotarlos de herramientas para su comunicación, traslado y operación.

Cuarto: los municipios serán auditados del uso de los recursos.

Quinto: se rotarán los agentes del ministerio público locales y federales.

Sexto: se establecerá una comunicación permanente con las autoridades para ofrecerles apoyo.

Séptimo: las personas que están siendo juzgadas por portación de armas y que están en libertad provisional podrán firmar en el estado de Michoacán y no tendrán que desplazarse.

Octavo: se aplicará todo el peso de la ley contra los servidores públicos que tengan responsabilidades.

Analicemos un poco los riesgos: el primer riesgo es el control y la temporalidad de los grupos. Son personas que en su origen están acostumbradas a actuar bajo una autoridad jerárquica, parecida a la militar pero con un tinte de compadrazgo y complicidad. Sus jefes eran el tío, primo, doctor del pueblo, etc. Siempre alguien cercano y conocido, ahora es todo lo contrario, unos auténticos ajenos que además actuaron tarde y por su ineficacia tienen gran culpa en que esto haya llegado hasta donde lo ha hecho. Por otro lado es sencillo decir que los grupos son temporales pero su disuasión puede ser más complicada de lo que fue su alienación.

Asimismo el hecho de que se incorporen a las fuerzas municipales supone un enfrentamiento de intereses ya que fueron los mismos integrantes de los grupos quienes dijeron que los policías municipales estaban fuertemente corrompidos por los Templarios. Conflicto de intereses que puede ser "solucionado" con herramientas y recursos proporcionados por la autoridad federal ya que el tercer punto del acuerdo lo establece así.

El último punto del acuerdo es la cereza del pastel, estableciendo que se aplicará todo el peso de la ley contra los servidores públicos que tengan responsabilidades, es una manera de enviar el mensaje a los grupos de autodefensa diciéndoles que tienen que obedecer y también otra forma de decirnos a toda la sociedad que nada quedará impune. Cabe mencionar que este último punto no se tendría ni que mencionar pues es obligación de la autoridad aplicar la ley en todo momento.

@criminologiamex

Mercedes Llamas
Doctoranda en Gobierno y Administración Pública por el Instituto Universitario Ortega y Gasset de la Universidad Complutense de Madrid, Maestra en Criminología y Política Criminal por el INACIPE y Licenciada en Educación Especial en Infracción e Inadaptación Social por la Escuela Normal de Especialización.
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