En la reunión de este día de la OPEP se espera limitar las extracciones en un nivel de entre 32.5 y 33 millones de barriles diarios (mbd) a partir de enero próximo, desde el volumen récord de 33.64 mbd que alcanzaron en octubre. La dificultad radica en establecer cuántos barriles debe retirar cada socio del mercado.
Ciudad de México, 30 de noviembre (SinEmbargo/EconomíaHoy).– Los precios del petróleo, tanto de Brent como de West Texas, avanzan a paso firme antes de la reunión de la OPEP en Viena. El mercado da por hecho el acuerdo para recortar la producción de crudo tras los mensajes de conformidad de Arabia Saudí, Irán e Irak, los principales actores del cártel. Un delegado de la OPEP ha asegurado a Bloomberg que el recorte será de 1,4 millones de barriles para los miembros de la OPEP y de 600,000 para los países No-OPEP, por encima de los 1.2 millones previstos iniciales.
Los precios del crudo reaccionan así a las palabras del ministro saudí de Energía, Khalid al-Falih, quien expresó su confianza en que “se está acercando un acuerdo” entre los miembros de la OPEP, según declaraciones recogidas por Reuters, un optimismo secundado por los representantes de Irak e Irán, considerado el principal escollo para lograr un pacto para reducir la oferta de crudo.
En concreto, el ministro iraquí de Petróleo, Jabbar al-Luaibi, ha asegurado que hay unanimidad para un recorte de la producción que duraría seis meses y sería supervisado por un comité del cártel. “Soy muy optimista sobre la posibilidad de obtener resultados fructíferos. Sí, va a haber recortes definitivamente”, dijo al-Luaibi, quien añadió que espera que el barril de petróleo supere los 55 dólares.
De acuerdo a la agenda prevista, los ministros de la OPEP han dado comienzo a una reunión informal a primera hora de la mañana en el hotel Vienna Park Hyatt de la capital austríaca y unas dos horas después la reunión oficial ha empezado en la sede oficial del cártel.
¿Qué se espera? La idea inicial pasa por limitar las extracciones en un nivel de entre 32.5 y 33 millones de barriles diarios (mbd) a partir de enero próximo, desde el volumen récord de 33.64 mbd que alcanzaron en octubre. La dificultad radica en establecer cuántos barriles debe retirar cada socio del mercado, lo que enfrenta sobre todo a Arabia Saudí con Irán y en menor medida con Irak.
Al inicio del encuentro, el ministro de Petróleo de Irak, Bijan Zanganeh, se ha mostrado optimista de cara a un acuerdo para reducir la oferta, mientras su homólogo iraní, Bijan Namdar, ha anunciado que no congelará su producción, aunque optará por negociar. Por su parte, el ministro de Arabia Saudí, Jalid Al-Falih, aseguró que el mercado petrolero se recuperará también si el grupo no logra hoy un acuerdo para limitar su producción. A pesar de que estos mensajes han sido acogidos de manera positiva no está claro que sea suficiente para contentar a Arabia Saudí. ¿Cuáles son los puntos clave para entender las disputas dentro de la OPEP?
¿QUÉ SON LAS CUOTAS ?
La OPEP introdujo en 1982 por primera vez un sistema de cuotas individuales de producción de crudo para sus miembros, limitando el techo conjunto en 17,1 millones de barriles diarios (mbd). En los años siguientes intentó mantener los precios mediante aumentos y recortes de esa oferta, repartiendo proporcionalmente las variaciones del caso entre todos los socios.
En 2011 el tope máximo de extracción conjunta había alcanzado los 30 mbd pero las cuotas nacionales quedaron obsoletas por los cortes de la producción en varios de los socios, como Irak, Irán, Libia o Nigeria, a raíz de diversos conflictos en esos países.
Estos mismos países aspiran ahora a que los miembros que por el contrario incrementaron sus suministros, como Arabia Saudí, los Emiratos Árabes Unidos o Kuwait, sean los que más se retiren del mercado.
Sobre todo Libia y Nigeria quedarían fuera del compromiso de reducir su bombeo para que puedan recuperar el nivel perdido. Según los cálculos publicados en el último informe de la OPEP, en octubre las extracciones del grupo llegaron al máximo histórico de 33.64 mbd.
Con 10,53 mbd, Arabia Saudí es el indiscutible número uno del grupo al haber bombeado el 31.3% del total. Le siguen los rivales Irak (4.56 mbd ó un 13.5%) e Irán (3.69 mbd o un 11%), pues ambos aspiran a ser el segundo productor del grupo.
La producción de los Emiratos Árabes Unidos (3.0 mbd, 8.9%) y de Kuwati (2.83 mbd, 8.4%) supera a la de Venezuela, que se sitúa en sexto lugar con 2.07 mbd o un 6.15%.
Reunidos en Argel, los ministros de la OPEP alcanzaron en septiembre un acuerdo preliminar para dejar la producción entre 32.5 y 33 mbd en 2017, aunque sin un consenso sobre la forma de aplicar el recorte, es decir, la fijación de nuevas cuotas individuales, el desafío de la reunión de mañana.
¿QUÉ IMPORTANCIA TIENE LA COOPERACIÓN?
La OPEP ha instado a sus principales competidores a adherirse a sus esfuerzos, algo que ha ocurrido ya dos veces este siglo. En 2008, cuando los precios habían caído por la crisis financiera mundial y la OPEP acordó el mayor recorte de su historia, de 4.2 mbd, Rusia y Azerbaiyán, que no pertenecen a la organización, se comprometieron a retirar 320,000 y 300,000 bd, respectivamente.
A fines de 2001 -el barril se había desplomado hasta los 17 dólares tras los atentados terroristas del 11 S, Rusia, México, Noruega, Omán y Angola añadieron 460.000 barriles al recorte de 1.5 mbd que pactó la OPEP.
Hoy Angola es miembro de la organización. Rusia se ha mostrado dispuesta a, por lo menos, congelar el nivel de su oferta. Asimismo, México, Brasil, Kazajistán, Azerbaiyán y Omán podrían acceder a un compromiso si la OPEP logra mañana el acuerdo.
¿QUÉ ROL JUEGA EL PETRÓLEO DE ESQUISTO?
Los altos precios entre 2011 y 2014 impulsaron las explotaciones de mayores costes al hacerlas rentables, como la del petróleo de esquisto o de lutita. Éstos se consigue mediante una combinación de tecnologías avanzadas como la explotación horizontal y la fractura hidráulica (fracking, en inglés), en un proceso que convierte en petróleo materia orgánica que hay en rocas.
En Estados Unidos este tipo de producción se disparó hasta los 4.5 mbd en 2014 y fue uno de los factores claves de la abundante oferta que desequilibró el mercado.
Liderada por Arabia Saudí, la OPEP optó entonces por defender su participación en el mercado abriendo las espitas y aceptando precios bajos para combatir así a la oferta rival. Los expertos calculan que en Estados Unidos las extracciones del esquisto han caído en cerca de 1.5 mbd en los últimos dos años.
Para la OPEP, el petróleo de esquisto supone un desafío que no había tenido antes: un crudo “rival” que amenaza con volver al auge en cuanto los precios se recuperen medianamente.