El financiero regiomontano compró su participación en la televisora mexicana a través de Fintech LatAm Sarl. Con dicha adquisición, Martínez se ha convertido en el tercer mayor accionista de Televisa.
Ciudad de México, 30 de octubre (SinEmbargo).- El director ejecutivo de Fintech Advisory, David Martínez, adquirió el 7.8 por ciento de las acciones de Televisa, convirtiéndose así en el tercer inversionista con mayor participación en el consorcio de Emilio Azcárraga Jean, quien recientemente dejó la presidencia ejecutiva tras un escándalo de corrupción investigado por los Estados Unidos.
El financiero regiomontano compró su participación en la televisora mexicana a través de Fintech LatAm Sarl el pasado 13 de septiembre, previo a la salida de Azcárraga Jean de la empresa.
Un documento de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés), apunta que David Martínez se ha convertido en el tercer mayor accionista de Televisa, únicamente después del propio Emilio Azcárraga y la empresa Dodgers & Cox.
Este miércoles, las acciones de Televisa cerraron con una venta de 9.87 pesos, significando un incremento del 0.71 por ciento con respecto al día previo, aunque la empresa se ha mantenido en una fuerte caída luego de que se diera a conocer la investigación que el Departamento de Justicia estadounidense emprende en contra del consorcio al darse a conocer un caso de corrupción ligado a sobornos que fueron supuestamente dados a la FIFA.
Dicho escándalo, conocido como FIFA Gate, implica a Televisa la condena de pagar 95 millones de dólares, luego que fuera demandada por un inversor estadounidense por sobornar a funcionarios de la FIFA para obtener los derechos de transmisión de la Copa del Mundo en 2018, 2022, 2026 y 2030.
Aunque el escándalo data 2017, hasta ahora la televisora informó a sus inversionistas sobre la investigación de la cual es objeto y las posibles repercusiones financieras.
Según la investigación del Departamento de Justicia de Estados Unidos, durante un proceso judicial, un testigo alegó que una subsidiaria de la empresa habría realizado pagos indebidos a oficiales de la FIFA.
En 2023, la compañía mexicana de medios acordó pagar 95 millones de dólares para resolver una demanda colectiva de accionistas. Según los demandantes, citados por el medio Investing, las acusaciones de soborno habían afectado el valor de las acciones de Televisa, ya que habrían inflado artificialmente el valor de sus ADR que se negocian en Estados Unidos.
Esto generó que el pasado 24 de octubre se diera a conocer la salida de Emilio Azcárraga Jean como presidente ejecutivo del consorcio televisivo.
La “licencia”, como se menciona en el comunicado oficial dirigido a los inversionistas y a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), es de carácter inmediato con lo que, por primera vez desde su fundación –en 1930 por parte de Emilio Azcárraga Vidaurreta– el poderoso grupo no será liderado por un miembro de la familia Azcárraga.
Azcárraga Jean es hijo del famoso Emilio Azcárraga Milmo, más conocido como “El Tigre”, quien murió el 16 de abril de 1997, además de nieto del fundador Emilio Azcárraga Vidaurreta, quien falleció el 23 de septiembre de 1972.
Esto ha generado que las acciones de Grupo Televisa presentaran una turbulencia en lo que va del año. Dicha información la dio a conocer la televisora al cierre de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) el pasado jueves 24 de octubre y desde el viernes 25 los precios de sus títulos sufrieron una caída que se detuvo al mediodía de este lunes.
Para el economista y politólogo Mario Campa, esta caída en el precio de las acciones de Televisa se debe en mayor parte a los resultados de su reporte trimestral.
“Las acciones también están cayendo por el reporte trimestral de Televisa, incluso la salida de Azcárraga puede ser positiva si se interpreta como que un cambio de rumbo en la dirección de la compañía. Sin embargo aquí hay todo un caso de corrupción y hay temor no tanto por la salida de Azcárraga, sino porque pueda haber un problema más fuerte para la empresa, como una multa”, dijo en entrevista al recordar que un juicio abierto en Estados Unidos le puede costar millones de dólares a la empresa.
