Una vez que la reforma a la Ley de Seguro Social entre en vigor, será obligatorio para las y los empleadores de personas trabajadoras del hogar inscribirlas al seguro para que accedan a prestaciones como el servicio de guardería.
Ciudad de México, 30 de octubre (SinEmbargo).–Las trabajadoras del hogar mexicanas consiguieron un logro histórico: la aprobación de una reforma a la Ley de Seguro Social que obliga a las y los empleadores a garantizarles el acceso a la seguridad social y otras prestaciones.
La reforma aprobada la semana pasada en la Cámara de Diputados llega después de años de exigencias e injusticias, y aunque para la impulsoras este es un momento de celebración, reconocen que una vez que entre en vigor el principal reto será que la ciudadanía reconozca al trabajo del hogar como cualquier otro, y por ende, se garantice el derecho a realizarlo en condiciones dignas.
Este 27 de octubre, la Cámara de Diputados aprobó con 486 votos a favor, ninguno en contra y una abstención, incluir en la Ley del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) las obligaciones que tienen los empleadores de inscribir a las personas trabajadoras del hogar al seguro social para que accedan a servicios médicos, hospitalarios y farmacéuticos; al seguro de riesgos de trabajo, pensión por invalidez y vida, a un fondo para el retiro, así como a prestaciones sociales dentro de las que se encuentran velatorios y guarderías.
Ahora, la reforma debe ser publicada por el Poder Ejecutivo federal para su entrada en vigor. En ella se define a la personas trabajadora del hogar “como aquella que, de manera remunerada, realice actividades de cuidados, aseo, asistencia o cualquier otra actividad inherente al hogar en el marco de una relación laboral que no aporte para la persona empleadora beneficio económico directo, en cualquiera de las siguientes modalidades: quien trabaje para una o diferentes personas empleadoras y resida o no, en el domicilio donde realice actividades”.
Cuando la votación concluyó en la Cámara de Diputados, un grupo de trabajadoras del hogar y defensoras de los derechos laborales celebraron exclamando: “¡Justicia!, ¡justicia! ¡Lo logramos!”, como se observa en un video difundido en las redes sociales del Centro de Apoyo y Capacitación para Empleadas del Hogar (CACEH), una de las promotoras de la reforma. Y es que hablar de derechos para este sector de la población era algo impensable al menos hace 22 años, cuando la organización se formó, menciona en entrevista Marcelina Bautista, su fundadora.
💜💚Está fue nuestra reacción ante la aprobación de la Seguridad Social será obligatoria para las personas #TrabajadorasDelHogar en la Cámara de Diputados – H. Congreso de la Unión ✨😄🥳@NormagabrielaL5@AlvaroVelarca#SeguridadSocialObligatoria #ConSeguroTrabajasMejor #EsDeLey pic.twitter.com/AFJTmfUGVG
— CACEH Nacional (@CACEHmx) October 27, 2022
La historia de la activista es clave para entender los derechos que hoy reconoce el Estado. Desde que Marcelina tenía 14 años, en 1981, migró de Nochtixtlán, Oaxaca, a la Ciudad de México para emplearse como trabajadora del hogar y durante 21 años sufrió discriminación, abusos y violencia. Su experiencia la llevó a fundar el CACEH en el año 2000, donde imparten pláticas y talleres a otras mujeres para que reconozcan la importancia de exigir sus derechos.
“Es muy importante toda una lucha que hemos emprendido las trabajadoras del hogar desde hace 22 años. Hemos aprendido cómo incidir para poner el tema en la mesa pública y sobre todo lograr aliados no solamente afuera [a nivel internacional], sino adentro, con legisladores, pues tenían que reconocer a un sector que forma parte importantísima en los hogares y que también aporta a la economía, al Producto Interno Bruto aunque sea de manera indirecta.
“Nosotras hemos ido logrando argumentar la importancia de este trabajo, sobre todo el apoyo que da una trabajadora del hogar a una familia, a las y los legisladores, el apoyo que da una trabajadora a un empresario o empresaria”, destaca Marcelina Bautista.
La mayoría de las personas que se dedican al trabajo del hogar en México son mujeres, representan el 88 por ciento de los 2.3 millones de personas que laboran así, según indican datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del cuarto trimestre de 2021 del Inegi.
Aunque en los últimos años el Gobierno federal ha reconocido públicamente la importancia del trabajo del hogar, brindar derechos laborales para esta población sigue siendo un gran pendiente, muestra de ello es que en México hay 2.3 millones de personas trabajadoras del hogar, pero el 99 por ciento carece de un contrato laboral por escrito, de acuerdo con datos del Inegi.
Los resultados de la organización de mujeres que laboran en este sector ya son tangibles al menos desde 2019, cuando el Gobierno federal creo un programa piloto para incorporar a personas trabajadoras del hogar al IMSS, después de un fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que declaró inconstitucional la exclusión de estos y estas empleadas del régimen obligatorio del Seguro Social.
Sin embargo, del universo de más de 2.2 millones de personas trabajadoras del hogar, el IMSS sólo ha afiliado a 52 mil 060, “cifra que no representa ni siquiera el 3 por ciento de este sector vulnerable”, resaltó en un comunicado el CACEH.
Aún con la existencia de ese programas, las trabajadoras del hogar han tenido que lidiar en los últimos años con la resistencia de sus empleadores. Sin embargo, ellas insisten en que no cesarán en sus exigencia de derechos laborales, pues reconocen que tener garantizados ,por ejemplo, servicios médicos y días de descanso le cambió la vida a muchas de ellas. Así lo comentó en abril Estela Vásquez Vera, una trabajadora del hogar con 46 años de experiencia, en entrevista para SinEmbargo Al Aire, quien luchó y consiguió ser incorporada al seguro social.
“Cuando nos reunimos a lo del seguro piloto que se lanzó dije yo: ‘si lo pido mis empleadores me van a correr, no me lo van a dar’. Pero no quité el dedo del renglón. De hecho mi empleador me dijo a ver: ‘A ver, Estelita , vamos a hablar. ¿Para qué quiere el seguro?, ¿cuántos años tiene?’ O sea, como diciéndome que ya estaba vieja, yo le dije ‘yo sé que ya estoy grande, pero yo quiero, seguro’ (…). Para mí es muy importante el seguro porque a mí me cambió mi vida, cambió completamente mi vida porque yo tenía un dinerito ahorrado para cuando me enfermara y ya cuando tuve el seguro pues ya hice mi casita, porque mi casita era de lámina”, dijo en esa ocasión.
Estela destacó que el reconocer su en el hogar como lo que es: un trabajo, le permitió acceder a vacaciones, descansos en días feriados y jornadas de trabajo de ocho horas por primera vez en más de 40 años.
Otro aspecto de la vida de las personas trabajadoras del hogar que cambiará con lo aprobado en la Cámara de Diputados es que las empeladas podrán beneficiarse del servicio de guarderías, “eso es muy importante porque muchas de ellas tienen que dejar a sus hijos encargados con otras personas para poder cuidar a otros niños”, destacó Marcelina Bautista.
Además de lo aprobado en materia legislativa, desde el 3 de julio de 2021 entró en vigor en México el Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo que protege los derechos de las personas trabajadoras del hogar.
“Como México ratificó el convenio, tiene que implementar políticas públicas para su cumplimiento y lograr un trabajo digno para las trabajadoras”, recordó Bautista.