El acusado afronta un delito Clase X de terrorismo, que en Illinois es el más grave del Código Penal, con prisión obligatoria de hasta 30 años en caso de que sea declarado culpable. Afronta además un segundo cargo de daños criminales a la propiedad por más de 100 mil dólares.
Chicago (EE.UU.), 29 sep (EFE).- Un joven latino que sembró el pánico tras meterse con su camioneta en marcha dentro de un centro comercial de un suburbio de Chicago (Estados Unidos), y destrozar varios quioscos y tiendas en su interior, afronta cargos de terrorismo.
Javier García, de 22 años, estuvo internado en una clínica psiquiátrica desde el 20 de este mes, cuando ocurrió el hecho en el centro comercial Woodfield Mall, en el suburbio de Schamburg, cercano al aeropuerto internacional O'Hare.
Según un comunicado del Departamento de Policía de Schamburg, García fue dado de alta este viernes y desde entonces quedó bajo su custodia.
En una comparecencia en una corte local este domingo, el magistrado le denegó el derecho a fianza.
El acusado afronta un delito Clase X de terrorismo, que en Illinois es el más grave del Código Penal, con prisión obligatoria de hasta 30 años en caso de que sea declarado culpable. Afronta además un segundo cargo de daños criminales a la propiedad por más de 100 mil dólares.
En la audiencia de hoy, la Fiscalía señaló que el acto pudo haber sido planificado ya que al revisar el ordenador de García los investigadores descubrieron que había un historial de 124 búsquedas en internet relacionadas al centro comercial y fotografías aéreas.
Su abogado, Amil Alkass, dijo que García tiene problemas mentales y calificó de "agresivos" los cargos que le presentaron.
"Es algo que sorprende, dada la naturaleza del acusado. García no es un terrorista y nunca tuvo problemas con la justicia antes. Es la primera vez que se involucra en un hecho policial", afirmó durante la audiencia.
Los investigadores creen que García, domiciliado en Palatine, otra ciudad de los suburbios, actuó solo, pero no han determinado con exactitud qué pretendía cuando condujo su camioneta dentro del centro comercial y provocó destrozos en varios quioscos y comercios.
Algunos vídeos publicados en redes sociales mostraron a gente dentro del centro comercial que el día de los hechos salía corriendo para protegerse del vehículo que circulaba erráticamente por el corredor principal del primer nivel del Woodfield Mall y haciendo chirriar los neumáticos.
El vehículo se detuvo tras estrellarse contra una columna, sin provocar atropellos ni víctimas, y García fue detenido por varias personas que luego lo entregaron a la policía.
Algunos testigos dijeron a medios locales que el conductor lucía "aturdido y confundido" cuando fue detenido sin oponer resistencia.
En un entrevista a televisiones locales, sus familiares señalaron que el acusado está en tratamiento que supone tomar medicación.
Según el comunicado policial, el joven estaba desarmado y aparentemente no era su intención atacar a alguna persona o comercio en particular.
The car drove into woodfield through sears right passed my mom! Sooo scary! pic.twitter.com/bwm85RRr6T
— Nicole Doyle (@Nikkidoylee) September 20, 2019
La investigación fue realizada por la Policía de Schamburg, con la colaboración de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) de Chicago, y los cargos fueron aprobados por la fiscalía del Condado de Cook.