Moscú, 30 ago (EFE).- Decenas de miles de personas se han dirigido por internet a la administración de la región rusa de Altái para pedir que se castigue a los responsables de quemar vivo a un gato callejero en la ciudad de Barnaul.
El pasado 15 de agosto, un grupo de jóvenes roció de gasolina a un gato callejero y prendió fuego al animal, que poco después falleció con quemaduras de primer y segundo grado a pesar de haber recibido atención veterinaria.
La fiscalía de Barnaúl incoó ese mismo día una causa penal por “trato cruel con un animal causándole la muerte” y está investigando los hechos.
Además de las 38 mil personas que han solicitado por internet un castigo para los maltratadores del felino, otras 1,362 personas han firmado una petición colectiva en la que exigen a las autoridades que los bárbaros que lo quemaron sean juzgados, según informan medios rusos.
La Fiscalía General de Rusia informó de que prestará especial atención al devenir de la investigación de un suceso que ha indignado a los habitantes de Altái.