Los cuerpos llegaron a San Salvador tras recorrer más de 120 kilómetros de carretera, y fueron llevados a las instalaciones de una funeraria municipal, que comparte terreno con el cementerio público La Bermeja. Se espera que Óscar y Valeria sean enterrados en una misma sepultura en dicho cementerio la mañana del lunes.
Por Hugo Sánchez
San Salvador, 30 jun (EFE).- Los cuerpos de los salvadoreños Óscar Martínez y su hija Valeria, fallecidos el pasado domingo al tratar de cruzar el río Bravo para llegar a Estados Unidos y que ponen rostro a la crisis migratoria que enfrentan miles de centroamericanos, llegaron este domingo a El Salvador.
La tragedia de Óscar y su hija, originarios de la localidad de San Martín, ha consternado a la comunidad internacional tras la publicación una estremecedora instantánea que muestra sus cuerpos boca abajo a la orilla del río.
La fotografía deja ver la mitad superior del cuerpo de la pequeña entre la camiseta y el torso de Óscar, lo que sugiere un último intento del hombre de protegerla.
Un portavoz del Gobierno salvadoreño confirmó a Efe que los restos de los migrantes ingresaron por la frontera con Guatemala, conocida como La Hachadura, pasadas las 08:00 horas local (14:00 GMT) en dos vehículos de una funeraria.
Los cuerpos llegaron a San Salvador cerca de las 11:00 horas local (17:00 GMT), tras recorrer más de 120 kilómetros de carretera, y fueron llevados a las instalaciones de una funeraria municipal, que comparte terreno con el cementerio público La Bermeja.
La caravana que trasladaba los restos ingresó por un acceso secundario del cementerio para esquivar a los medios de comunicación que esperaban la llegada en la entrada principal.
Se espera que Óscar y Valeria sean enterrados en una misma sepultura en dicho cementerio la mañana del lunes tras las exequias, a las que no tendrá acceso la prensa a petición de la familia.
En el país centroamericano aguardaba la llegada de los restos Tania Vanessa Ávalos, esposa de Óscar y madre de la niña de menos de dos años de edad.
Ávalos salió el jueves desde el municipio de Matamoros, en el estado de Tamaulipas, junto a los cuerpos de su esposo Óscar y Valeria rumbo a la ciudad de Monterrey, en Nuevo León.
La joven, que logró ser rescatada de las aguas del río que divide a México de Estados Unidos, llegó el viernes acompañada del cónsul salvadoreño en Monterrey, Rafael Rosales.
Las autoridades salvadoreñas explicaron en una conferencia de prensa, a la que fue llevada la joven, que los cuerpos se trasladaron vía terrestre hacia El Salvador porque "es un procedimiento mucho más rápido y muchos más directo", y permite tener un mayor "cuidado de los cuerpos".
El Ejecutivo de Nayib Bukele fue criticado por diversos sectores por presentar a Ávalos ante los medios de comunicación en el aeropuerto internacional San Óscar Arnulfo Romero.
"La familia de Óscar y su hija serán apoyadas en todo lo que el Gobierno pueda hacer, pero me parece de muy mal gusto que expongan a la familia en una conferencia", publicó el mandatario en su cuenta de Twitter el viernes y pidió "más criterio" a sus responsables de comunicaciones.
La familia de Óscar y su hija serán apoyadas en todo lo que el Gobierno pueda hacer, pero me parece de muy mal gusto que expongan a la familia en una conferencia.
Todas las direcciones de comunicaciones de este Gobierno deben tener más criterio, sobre todo en este tipo de casos.
— Nayib Bukele 🇸🇻 (@nayibbukele) June 29, 2019
El joven matrimonio intentaba llegar a Estados Unidos para pedir asilo, como lo hacen muchos de sus compatriotas que tratan de escapar de la pobreza y la violencia de las pandillas que golpean a El Salvador.
En Matamoros, el mexicano Federico Peláez, quien conocía al fallecido, contó a Efe que Martínez "se desesperó porque no calificó para que le dieran un número (en la garita fronteriza) y se le hizo fácil cruzar, se puso a la niña en la espalda y se los llevó la corriente".
La imagen del padre y su hija, según diversos medios de comunicación, es la representación más trágica de la migración centroamericana, que se ha incrementado desde octubre de 2018.
Pese a la crudeza de la fotografía y a los constantes llamados de las autoridades a evitar la migración irregular, en el río Bravo han sido vistos nuevos intentos de cruzar.
En el último mes, la crisis migratoria que se vive en las dos fronteras de México se ha agudizado luego de que Estados Unidos diera al país un ultimátum para acabar con el flujo migratorio.
El país, gobernado por el izquierdista Andrés Manuel López Obrador, se encuentra aplicando un plan migratorio que pasa por endurecer la vigilancia fronteriza.
La Organización de las Naciones Unidas ha reclamado medidas para proteger los derechos humanos de los refugiados y migrantes, tras la muerte de Óscar y Valeria.