Según los científicos, en el año 1965 las concentraciones atmosféricas de dióxido de carbono de la Tierra excedieron las 320 partículas por millón, un pico nunca alcanzado en los anteriores 2.5 millones de años, informa ScienceDaily.
Ciudad de México, 29 de septiembre (RT).- Científicos de la Universidad de Texas A&M advierten sobre la elevada concentración de dióxido de carbono acumulada en la atmósfera en los últimos 60 años. En el estudio titulado “Los bajos niveles de CO2 durante toda la época del Pleistoceno”, publicado en la revista Nature Communications, los expertos afirman que los humanos del tipo “Homo sapiens” nunca habían vivido en unas condiciones atmosféricas como las actuales.
Humans didn’t live with a high carbon dioxide atmosphere until 1965, finds a @TAMUGeosciences study. ? #tamuhttps://t.co/Obcm4Drc60
— Texas A&M University (@TAMU) 26 de septiembre de 2019
El estudio muestra que durante los 2.5 millones de años que duró el Pleistoceno, el promedio de concentración de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera era de 250 partículas por millón. Los niveles de hoy, en comparación, son de más de 410 partículas. Según los científicos, en el año 1965 las concentraciones atmosféricas de dióxido de carbono de la Tierra excedieron las 320 partículas por millón, un pico nunca alcanzado en los anteriores 2.5 millones de años, informa ScienceDaily.
El dióxido de carbono es un gas de efecto invernadero que contribuye al calentamiento de la atmósfera de la Tierra y es considerado un impulsor del cambio climático global, de manera que “es muy importante estudiar las concentraciones atmosféricas de CO2 en el pasado geológico porque nos permite ver qué niveles de CO2 tuvimos, cómo era el clima y qué relación existía entre ambos” afirma Yige Zhang, coautor del estudio de investigación y profesor asistente en el Departamento de Oceanografía de la Facultad de Geociencias de la universidad texana.
CÓMO Y DÓNDE SE REALIZÓ EL ESTUDIO
Científicos de la Universidad Nanjing, en China, y un miembro del Instituto de Tecnología de California (EU) también participaron en la investigación y analizaron los carbonatos del suelo en la meseta de Loess, en el centro de China, para cuantificar los niveles de dióxido de carbono atmosférico en los últimos 2.5 millones de años.
“Los carbonatos formados durante la formación del suelo generalmente alcanzan el equilibrio isotópico del carbono con el CO2 ambiental del suelo, que es una mezcla de CO2 atmosférico y CO2 producido por la respiración del suelo”, dijo Jiawei Da, de la Universidad Nanjing. “Mediante la aplicación de un modelo de mezcla de dos componentes, podemos reconstruir los niveles de paleo-CO2 utilizando carbonatos en los suelos fósiles”.
Según los estudios realizados, se confirma que los niveles de dióxido de carbono actuales no tienen precedentes y son mucho más elevados de lo que jamás se haya registrado, y aún está por verse cómo nos afectarán estas condiciones.
“Este ambiente actual con un alto contenido de CO2 no es sólo un experimento para el clima y el medio ambiente, sino que también es un experimento para nosotros mismos” aseguró uno de los expertos.