Entre abril y junio, a nivel global, las ventas cayeron un 44.5 por ciento anual. El significativo descenso en las ventas fue producto de la pandemia y el hecho de que Nissan optó por suspender la producción en muchas plantas.
Nissan Motor insistió en que, como ya ha precisado previamente al presentar un plan que se extenderá hasta 2023, se enfocará en tres mercados claves: Japón, China y Estados Unidos.
Tokio, 29 de julio (EFE).- El grupo Nissan perdió 285 mil 589 millones de yenes (2 mil 313 millones de euros) en el primer trimestre de su ejercicio fiscal (abril-junio), frente a los 6 mil 377 millones de yenes (52 millones de euros) que ganó en el mismo periodo del pasado ejercicio, en tanto que redujo en un 50.5 por ciento sus ingresos.
Nissan se anotó unos ingresos de 1.17 billones de yenes (11 mil 145 millones de dólares), frente a los 2.37 billones de yenes (22 mil 518 millones de dólares) que tuvo entre abril y junio de 2019.
Los datos del primer trimestre del año fiscal de Nissan fueron difundidos en una rueda de prensa telemática que ofrecieron directivos del grupo desde su sede, en Yokohama, al sur de Tokio, en la que también dieron a conocer las proyecciones para el actual ejercicio fiscal.
Según dijo el presidente de la compañía, Makoto Uchida, para el año fiscal que cierre en marzo del año próximo Nissan espera mejorar un 0.2 por ciento su resultado, aunque calcula que acabará el ejercicio con unas pérdidas netas de 670 mil millones de yenes (6 mil 358 millones de dólares).
Los datos fueron difundidos recalcando el "desafiante clima de negocios" que, según Uchida, sufre el sector por el impacto de la pandemia de coronavirus, que ha generado una fuerte reducción en la demanda de vehículos a nivel global.
Al cierre de junio pasado, Nissan anotó unos ingresos de 1.17 billones de yenes (11 mil 145 millones de dólares), frente a los 2.37 billones de yenes (22 mil 518 millones de dólares) que tuvo entre abril y junio de 2019.
Su resultado operativo arrojó una pérdida de 153 mil 926 millones de yenes (mil 461 millones de dólares), frente al beneficio operativo de mil 609 millones de yenes (15 millones de dólares) que tuvo en el primer trimestre del ejercicio fiscal anterior.
Nissan precisó que entre abril y junio pasados a nivel global las ventas cayeron un 44.5 por ciento respecto al mismo período del año pasado, hasta 12.49 millones de vehículos, y en el caso de Nissan la reducción fue del 47.7 por ciento, hasta 643 mil unidades.
Uchida destacó ese "significativo descenso en las ventas" a causa de la pandemia y el hecho de que Nissan, al igual que otras firmas del sector, optó por suspender la producción en muchas plantas.
Sólo en Japón, en el primer trimestre de su año fiscal Nissan tuvo una reducción del 33.7 por ciento en sus ventas, hasta 84 mil vehículos, mientras que en Estados Unidos la caída fue del 49.5 por ciento.
Nissan Motor insistió en que, como ya ha precisado previamente al presentar un plan que se extenderá hasta 2023, se enfocará en tres mercados claves: Japón, China y Estados Unidos.
"Estados Unidos es donde Nissan ha lanzado el principal proceso de transformaciones", dijo el jefe de operaciones del grupo, Ashwani Gupta.
En las previsiones para el año fiscal de 2020, Nissan prevé que la venta de automotores a nivel global tendrá una reducción del 16 por ciento y en el caso de Nissan caerá un 16.3 por ciento. En China la reducción será del 4.6 por ciento y en Estados Unidos del 24 por ciento.
Para el ejercicio que cierre en marzo del año que viene Nissan calcula que tendrá una reducción del 21 por ciento en sus ingresos, mientras que el resultado operativo tendrá un rojo de 470 mil millones de yenes (4 mil 463 millones de dólares).
"Nissan se enfrenta a considerables desafíos en este año fiscal", insistió Uchida.
Nissan insistió hoy en que, como ya viene expresando desde hace meses, tiene intención de reducir un 20 por ciento su capacidad de producción ante la caída en la demanda de vehículos.
Esa disminución ha implicado, entre otras decisiones, la de cerrar su planta en Barcelona, que ya fue confirmada en mayo pasado y que no fue mencionada al presentar Nissan los resultados de hoy.
Nissan se enfrenta ante el desafío de relanzar la compañía tras los malos resultados que viene acumulando, primero por la crisis interna a raíz del arresto de su máximo directivo, Carlos Ghosn, el 19 de noviembre de 2018, y después por el impacto de la pandemia de coronavirus.
El ejercicio anterior lo cerró Nissan con unas pérdidas de 671 mil 216 millones de yenes (6 mil 225 millones de dólares), lo que supuso los peores resultados en dos décadas.