El Papa Francisco se enteró con “pesar” de los cargos y concedió la excedencia a Pell para que se defienda, señaló el portavoz del Vaticano, Greg Burke. Las reformas financieras en la Santa Sede seguirán en su ausencia, agregó.
Por Nicole Winfield, Kristen Gelineau y Gaspar Ruiz-Canela
Ciudad del Vaticano, 29 de junio (AP/EFE) — El Cardenal George Pell anunció este jueves que abandonará temporalmente su cargo como responsable de las finanzas del Vaticano después de que la Policía australiana lo acusó de múltiples cargos de supuestos abusos sexuales “históricos”.
Pell compareció ante reporteros este jueves para negar las acusaciones, denunciando lo que calificó de "difamación incesante" en los medios y dijo que regresará a Australia para confrontar los cargos.
El Papa Francisco se enteró con “pesar” de los cargos y concedió la excedencia a Pell para que se defienda, señaló el portavoz del Vaticano, Greg Burke. Las reformas financieras en la Santa Sede seguirán en su ausencia, agregó.
Pell fue citado para comparecer en la corte estatal de Victoria, en Australia, el próximo mes.
Pell nació en la ciudad de Ballarat el 8 de junio de 1941 en el seno del matrimonio formado por George Arthur, un ex campeón de boxeo de fe anglicana, y Margaret Lillian, una devota católica, y tiene dos hermanos: Margaret y David.
El Cardenal estudió en los centros católicos Loreto Convent y St Patrick en Ballarat, donde destacó como deportista y hasta jugó durante una época con el club Richmond Football en la Liga de Fútbol Australiano.
Sin embargo, Pell se decantó por su vocación religiosa e ingresó en el seminario Corpus Christi, en el estado de Victoria, en 1960 y tres años más tarde se marchó a Roma a continuar sus estudios. En la década de 1970 y 1980 ejerció como sacerdote y educador en distintas parroquias y centros católicos australianos, incluido en su natal Ballarat.
El Cardenal fue el primer dirigente católico en abordar los abusos sexuales a menores en el seno de la Iglesia australiana, con la puesta en marcha en 1996 de un programa de compensaciones económicas, aunque recibió críticas por no dar suficiente apoyo a las víctimas.