Durante el juicio salieron a relucir presuntos sobornos a todos los niveles del Gobierno mexicano por parte del cartel de Sinaloa, que presuntamente dirigió el acusado junto con su socio Ismael “el Mayo Zambada” para poder operar su negocio de narcotráfico, en los que implicaron al ex Presidente mexicano Enrique Peña Nieto.
Nueva York, 29 de enero (EFE).- La Fiscalía federal en el caso por narcotráfico contra Joaquín “El Chapo” Guzmán que se lleva en Nueva York pidió al juez que impida a la defensa señalar en sus argumentos finales que los gobiernos de Estados Unidos y el mexicano conspiraron para encausar de forma selectiva al alegado líder del cartel de Sinaloa.
Tras finalizar la presentación de 56 testigos, 13 de ellos cooperantes del Gobierno de Estados Unidos, la Fiscalía presentó una moción al juez del caso, Brian Cogan, para pedir que evite además argumentos de la defensa sobre una alegada conspiración entre Estados Unidos y México para encubrir la corrupción en este último país.
Durante el juicio salieron a relucir presuntos sobornos a todos los niveles del Gobierno mexicano por parte del cartel de Sinaloa, que presuntamente dirigió el acusado junto con su socio Ismael “el Mayo Zambada” para poder operar su negocio de narcotráfico, en los que implicaron al ex Presidente mexicano Enrique Peña Nieto.
Desde el primer día del juicio, el 14 de noviembre pasado, la defensa aseguró que el entonces Presidente mexicano Enrique Peña Nieto y su predecesor, Felipe Calderón, fueron sobornados por Zambada.
Señala la Fiscalía además en la moción que la defensa ha alegado durante el este proceso, y sin evidencia, que Zambada sobornó al Gobierno de México para lograr sus propósitos (de que se procesara) a Guzmán Loera.
“Además, de haber existido esa evidencia, que no existe, dicho argumento es completamente irrelevante en la culpabilidad del acusado”, indicó la Fiscalía.
Argumentó además al juez que la defensa ha hecho esfuerzos, durante el interrogatorio de testigos, para obtener declaraciones sobre sobornos pagados a funcionarios del Gobierno de México por o a nombre del Mayo Zambada.
Guzmán Loera, extraditado a Nueva York hace dos años, enfrenta cargos por narcotráfico, el principal de mantener una empresa criminal de forma continuada, y de ser hallado culpable enfrenta cadena perpetua.
La Fiscalía había reducido de 17 a 11 los cargos y previo a finalizar el juicio eliminó una de las acusaciones por trafico de drogas, por los que será evaluado por el jurado.
El jurado, cuyas edades oscilan entre los 20 y 50 años y entre los que hay inmigrantes de Polonia, Etiopía y Asia, podría comenzar a deliberar el próximo viernes, después de 36 días de juicio.
La defensa del Chapo sólo presentó un testigo, que fue entrevistado hoy por Jeffrey Lichtman, uno de sus abogados, en un interrogatorio que sólo duró una media hora.
El agente del FBI John Roberts fue preguntado sobre alegadas inconsistencias en un informe que escribió en 2017 durante un interrogatorio que hizo al colombiano Jorge Cifuentes, testigo cooperante del Gobierno de Estados Unidos, que suplía droga al cartel de Sinaloa.
Durante esa entrevista Cifuentes alegó que un agente corrupto de la Marina colombiana le facilitó el acceso a un USB en que había información de una investigación que hacía el Gobierno de su familia de narcotraficantes, así como del “Chapo”.
En su informe, Roberts declaró erróneamente que el USB le fue mostrado por un miembro de la Marina estadounidense.
La defensa del Chapo ha intentado a lo largo del proceso socavar la credibilidad de los testigos ante el jurado. La Fiscalía presentará sus argumentos finales mañana y la defensa el jueves.