Más tarde, el hotel Arlo compartió una disculpa pública para Harrold y su hijo, afirmando que aunque el gerente pidió que la Policía interviniera para aclarar debidamente el asunto, “se podría haber hecho más para aliviar la disputa”.
Ciudad de México, 28 de diciembre (SinEmbargo).– Una mujer estadounidense acusó a un joven afroamericano de robarse su teléfono celular en el vestíbulo de un hotel en Nueva York, Estados Unidos. Las acusaciones eran falsas y racistas.
De acuerdo con un video publicado el sábado 26 de diciembre, el músico de jazz Keyon Harrold y su hijo de 14 años de edad entraron al hotel boutique en el barrio de SoHo, Nueva York, cuando una mujer se acercó a ellos y comenzó a inculpar al menor de edad por quitarle su celular.
Ante los señalamientos, el jazzista comenzó a grabar a la mujer, quien no dejaba de gritar y señalar al joven por la desaparición de su teléfono móvil en el vestíbulo del Hotel Arlo.
La mujer expuso a uno de los trabajadores del lugar que el hijo del músico tenía un iPhone, y que se trataba del suyo, por lo que el padre del menor respondió diciéndole que “no sólo hay un iPhone en el mundo”.
Woman lies on black CHILD claiming he stole her iPhone
|
spoiler 🚨: it was his phone
(via Keyon Harrold) pic.twitter.com/gvEPLxlbIy— Karen (@crazykarens) December 27, 2020
En el metraje compartido por el mismo Keyon Harrold, artista afrodescendiente, se puede ver al gerente del hotel pidiéndole al menor de edad que mostrara el teléfono celular que llevaba en los bolsillos, en un aparente intento de verificar la afirmación de la mujer. Ante la petición, el músico le dijo al joven que no lo hiciera porque no era su culpa y que las afirmaciones de la mujer no tenían fundamento.
“Muéstrame el celular”, exigió la mujer. “No, no lo hagas. Ella está mintiendo. ¿Por qué no lo pones en ‘encontrar mi iPhone’?”, respondió firmemente el también padre del menor. La joven dijo que la aplicación para encontrar el teléfono estaba encendida y que apuntaba al lugar dónde estaba su hijo.
El gerente del lugar insistió en que el joven enseñara su celular alegando que se trataba de políticas del hotel, pero Harrold volvió a negarse y dijo que no podían hacerle eso a su hijo, mucho menos por ser menor de edad.
Segundos después la grabación mostró al músico y a su hijo retirándose del lugar mientras la mujer continuaba gritando y alegando que no los dejaran ir porque ellos tenían su teléfono celular.
De acuerdo con declaraciones que hizo el jazzista a medios locales, los empleados del lugar nisiquiera cuestionaron a la mujer sobre por qué pensaba que el menor había tomado el teléfono “sólo le dieron la razón”.
Más tarde, el hotel Arlo compartió una disculpa pública para Harrold y su hijo, afirmando que aunque el gerente pidió que la Policía interviniera para aclarar debidamente el asunto, “se podría haber hecho más para aliviar la disputa”.
“Estamos profundamente desanimados por el reciente incidente de acusaciones infundadas, prejuicios y agresiones contra un huésped inocente del hotel Arlo”, escribió el hotel y se comprometió a “asegurarse de que esto nunca vuelva a suceder en ninguno de nuestras sucursales”.
El teléfono móvil de la mujer fue devuelto más tarde por un conductor de Uber que lo encontró en el automóvil y que la propia joven habría olvidado al bajar de su servicio.