Encanto es una película situada en Colombia que habla sobre la presión de no estar a la altura de las expectativas y el miedo a revelar imperfecciones. El filme de Disney ya está disponible en salas de cines.
Ciudad de México, 28 de noviembre (AP).- Mirabel es extraordinaria en el sentido de que, en lo que respecta a su familia, es completamente normal.
Esa es la configuración del nuevo musical animado absolutamente encantador de Disney, Encanto, que cambia el típico guión de una película para niños. En lugar de pocas personas mágicas en medio de un mar ordinario, aquí lo ordinario es, bueno, extraño.
“Me quedaré a un lado / Cuando brilles”, Mirabel le canta a sus hermanos y hermanas especiales, aunque confiesa: “No estoy bien”.
Resulta apropiado que Encanto, impulsada por ocho canciones originales del creador de Hamilton Lin-Manuel Miranda, se convierta en lo más especial de todo — un triunfo en cada categorías: arte, música y alma.
Comienza con Mirabel Madrigal, una jovencita de corazón dulce y ojos muy abiertos de una familia mágica en Colombia, donde su vibrante casa alberga a muchas generaciones. Cada Madrigal a la edad de 5 años revela una magia interior, como la capacidad cambiar de forma, hablar con animales, una superfuerza o una audición poderosa. Ellos, a su vez, ayudan a la comunidad circundante.
Pero la magia de alguna manera ha pasado por alto a Mirabel (cuya voz original hace Stephanie Beatriz), quien a medida que crece quiere ser útil en una familia de hermanos parecidos a los Avengers (Vengadores). “Con o sin don, soy tan especial como el resto de mi familia”, dice.
Pero pronto no todo estará bien para esta familia cuya magia se basó en la tragedia. Las grietas, literalmente, aparecen en los cimientos de su casa y su severa matriarca, la abuela Alma, se preocupa en silencio de que su magia pueda estar fallando. Depende de Mirabel investigar qué está pasando y salvar a la familia.
Los directores Byron Howard, Jared Bush y Charise Castro Smith llenan esta historia con su propia magia: rostros expresivos, flores brillantes, ratas danzantes, burros divertidos y una casa que se vuelve un personaje en sí mismo, con persianas y azulejos que se mueven emocionados.
El elenco de voces (en inglés) incluye a John Leguizamo, Wilmer Valderrama, Maluma, Adassa, María Cecilia Botero, Angie Cepeda, Diane Guerrero y Jessica Darrow.
Miranda le inyecta sus dotes teatrales a la primera canción, “The Family Madrigal”, con la que presenta al extendido clan, y crea “Waiting on a Miracle” para Mirabel, nuestra valiente heroína con gafas que detiene el tiempo para cantar su melodía quejumbrosa.
Le da la rockera “What Else Can I Do?” a una hermosa hermana que hace florecer las flores pero que está secretamente inquieta, y le regala a la hermana súper fuerte el tema “Surface/Pressure”, que revela el estrés secreto que siente. Y está la excelente y divertida melodía grupal “We Don’t Talk About Bruno”, sobre un paria de la familia.
La acción tiene lugar principalmente en la casa laberíntica, aunque hay partes mágicas que desafían la física. Tampoco hay un villano tradicional, solo un malestar a medida que la magia se desvanece.
Como siempre en una película animada de Disney, las imágenes son una delicia. Miren cómo un motivo de mariposas se representa sutilmente en el patrón del vestido de Mirabel. También hay una toma panorámica de la comunidad colombiana al atardecer con sus luces y velas encendidas que es cálida y acogedora.
Encanto es una película sobre la presión de estar a la altura de las expectativas y el miedo a revelar imperfecciones. Se trata de marginados e inadaptados a la vista de todos. “A veces, los bichos raros de la familia tienen una mala reputación”, dice el guion. “Eres más que tu don” es otro diálogo. Detrás de todo eso hay un aplauso a la inmigración y cómo debemos prestar nuestros dones a la comunidad. Es la película de Acción de Gracias que todos necesitamos en 2021.
“Encanto”, un estreno de Walt Disney Studio, tiene una clasificación PG-13 (que advierte a los padres que podría ser inapropiada para menores de 13 años) de la Asociación Cinematográfica de Estados Unidos (MPAA, según sus siglas en inglés) por “algunos elementos temáticos y peligros leves”. Duración: 99 minutos. Cuatro estrellas de cuatro.