A partir del 1 de octubre habrá un aumento de 1.83 pesos para los trabajadores de la zona B con la homologación del salario mínimo.
Ciudad de México, 28 de septiembre (SinEmbargo).– La Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) y la Comisión Nacional del Salarios Mínimos (Conasami) anunciaron el día de hoy la homologación del salario para los trabajadores de las zonas A y B del país, que a partir del próximo 1 de octubre, será de 70.10 pesos; es decir, para los habitantes de la zona B, habrá un aumento de 1.83 pesos.
En conferencia de prensa, en la que también estuvieron los representantes de las cámaras empresariales, patronales y de servicios, los funcionarios públicos señalaron que esta decisión obedece a la demanda que durante décadas han exigido los trabajadores y la población en general.
El titular de la STPS, Alfonso Navarrete Prida, enfatizó que uno de los objetivos de esta acción es el de recuperar el poder adquisitivo de los salarios, que durante los últimos 40 años, ha tenido una pérdida del 76 por ciento, aunque ahora el aumento anunciado tendrá un impacto de 4.1 por ciento en términos reales y que no afectará al aumento que año con año se realiza.
También comparó el aumento de dos pesos, con la situación que se vivía en 1930, año en el que había 111 áreas geográficas con salarios mínimos diferentes y la brecha entre el salario más alto y el más bajo era de 300 por ciento.
En el evento al que denominaron “sesión histórica” señalaron en reiteradas ocasiones que esta decisión se tomó con la participación del gobierno federal, empresarial y de los trabajadores, y que todos los sectores podrán hacerse cargo de lo las situaciones que implique, ya que a pesar de las condiciones internacionales, el sector productivo del país puede dar ese paso; el aumento, dijo Prida, es el resultado de la realidad económica del país.
A este entorno de estabilidad, agregó que ya son dos años en los que no se ha reportado una huelga general, situación que se debe a que todos los sectores saben cuál es el camino, no porque la voluntad de los trabajadores se haya doblegado.
A finales de julio pasado, Gonzalo Hernández Licona, Secretario Ejecutivo del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), señaló que la razón por la que el número de pobres aumentó en casi 2 millones de personas durante la administración de Enrique Peña Nieto, era la disminución de los ingresos, lo que al mismo tiempo reflejaba la falta de crecimiento económico.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), de 2012 a 2014, el ingreso corriente total promedio trimestral por hogar se redujo en términos reales en 3.5 por ciento. Actualmente, 8.5 millones de mexicanos son vulnerables a la pobreza por motivos de sus ingresos; más de 43 millones están por debajo de la línea de bienestar económico, y 11.4 millones viven bajo la línea de bienestar mínimo.
El aumento del salario tendrá un impacto en las percepciones de 751 mil 915 trabajadores que laboran en los 2 mil 341 municipios clasificados en la zona geográfica B. Enrique Solana Sentíes, presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Servytur), señaló que éste sector es el que podría tener el mayor reto, al ser en el que se concentra el mayor número de trabajadores que perciben el salario mínimo y que están en la informalidad como en el caso del turismo, sin embargo, señaló que se logrará implementar.