La “Ruta de la Raicilla” viaja a través de diversos municipios y comunidades de la costa jalisciense como Las Juntas, Los Veranos, Punta Pérula, El Tuito, entre muchos otros, en donde se aprecia el proceso de elaboración de la bebida de raicilla.
Ciudad de México, 28 de julio (SinEmbargo).- Uno de los destilados de Jalisco es la raicilla, bebida que destaca por su tratamiento especial y artesanal. Este destilado cuenta con Denominación de Origen desde 2019 que certifica su elaboración en 16 municipios de Jalisco y uno de Nayarit. En Costalegre, son dos los municipios que cuentan con la denominación: Cabo Corrientes y Tomatlán.
Tanto la Raicilla de Sierra como la Raicilla de la Costa, derivadas de la zona geográfica de Jalisco donde se producen, han tomado cada vez mayor fuerza en la preferencia de las personas que la han catado. Esta bebida espirituosa se puede degustar en tabernas tradicionales, restaurantes típicos, haciendas o en exclusivos hoteles de la región de Costalegre, Jalisco.
La raicilla cuenta con proceso artesanal, después de la siembra y cosecha del agave, la piña entra en un proceso de limpieza, se parte y cuece en hornos sellados que generan un calor de aproximadamente 130 grados. Posteriormente, se deja reposar para comenzar a convertir los azúcares en alcohol. Las piñas de agave horneadas se enfrían y se muelen, generando un líquido transparente que se fermenta y se destila. Así es como nace la raicilla, la cual mantiene un contenido de alcohol de entre 35 y hasta los 55 grados. Cada productor de raicilla puede llevar un proceso variado para su elaboración y de la misma forma, se puede elevar en mayor o menor cantidad la graduación de alcohol para obtener un sabor atrayente al paladar y, sobre todo, que sea un producto de alta calidad.
Si hablamos de la Ruta de la Raicilla hay que visitar varios municipios y comunidades de la costa jalisciense como Las Juntas, Los Veranos, Punta Pérula, El Tuito, entre muchos otros, en donde se aprecia el proceso de elaboración de la bebida de raicilla.
A continuación, te compartimos un par de lugares donde los turistas locales, nacionales y extranjeros podrán realizar un recorrido lleno de sabor e historia, y en el que el paladar será el más privilegiado al catar este destilado típico e histórico de la región, codiciado gracias a su exquisito sabor, el cual puede disfrutarse al natural, en la típica crema de raicilla o a través de diversos y exquisitos cócteles, desde los clásicos hasta creaciones innovadoras.
-Hacienda el Divisadero: Ubicada en El Tuito en Cabo Corrientes, Jalisco, se encuentra Hacienda el Divisadero. Es un lugar donde se produce raicilla con la tradición y los procesos únicos de la Hacienda. Cada botella se elabora con meticulosa atención al detalle para garantizar una experiencia inigualable, asegurando así un sabor excepcional,y garantizando calidad y excelencia de la raicilla.
Los agaves utilizados para la producción de la raicilla en Hacienda el Divisadero son cultivados durante un ciclo de crecimiento que puede extenderse de 9 a 16 años; esto permite que alcancen su máxima madurez y calidad. Durante este período, se les brinda cuidados especiales para garantizar un desarrollo óptimo. Cuando llega el momento de la jima, se realiza una meticulosa selección manual de los agaves, evaluando su madurez y dulzura.
Para conocer y degustar esta raicilla, Hacienda el Divisadero cuenta con recorridos especiales a grupos o recorridos privados.
Tabernas Tradicionales de Costalegre : Se le denomina “tabernas” a aquellos lugares en donde se preserva la tradición artesanal de la elaboración de la raicilla; por lo general son espacios rústicos, tradicionales y llenos de historia, equipados artesanalmente con hornos, cuartos de fermentación y destilación en donde los maestros raicilleros aplican todos sus conocimientos para preparar dicho destilado proveniente de agaves cultivados o silvestres de las especies Maximiliana Baker, Inaequidens koch, Valenciana, Angustifolia Haw y Rhodacantha.
Algunas de las tabernas tradicionales y más reconocidas ubicadas en El Tuito son: Taberna Huaraches de Oro, Taberna de Chalio, Taberna Abigail, Taberna Japo, Taberna Gorupa, entre otras. Los maestros raicilleros de la región son históricamente reconocidos por su trabajo y aprendizaje de generaciones anteriores.
