¿Volverá Simone Biles a los Juegos Olímpicos de Tokio? La gimnasta abandonó este martes su prueba en equipos y habló de sus dificultades psicológicas. No estará en el concurso general del jueves 29 de julio. Como ella, en el pasado muchos deportistas han tenido que enfrentarse a dificultades psicológicas durante su carrera. Hoy el tema ha dejado de ser tabú.
Por Farid Achache
Ciudad de México, 28 de julio (RFI).– Este miércoles 28 de julio, la estadounidense Simone Biles se retiró oficialmente del concurso general previsto el jueves. Con cinco medallas, incluyendo cuatro oros ganados en Río en 2016, Simone Biles es considerada la mejor gimnasta de todos los tiempos.
“Tras una evaluación médica, Simone Biles se ha retirado de la final de equipos para centrarse en su salud mental”, indicó la federación en un comunicado publicado el martes por la tarde.
ENFRENTÁNDOSE A SUS DEMONIOS
La federación estadounidense había advertido que la participación de la superestrella de la gimnasia sería evaluada “diariamente” en todas las pruebas en las que está inscrita la tetracampeona olímpica, es decir viga y salto el domingo, suelo el lunes y barras asimétricas el martes.
El martes por la tarde la estadounidense se derrumbó en la competencia por equipos y explicó que se estaba “enfrentando a los demonios en su cabeza” a pesar de que aspiraba a conseguir seis títulos olímpicos en Japón.
“Cuando me subo a la colchoneta, soy sólo yo y mi cabeza… enfrentándome a mis demonios. Tengo que hacer lo que es correcto para mí y centrarme en mi salud mental para no comprometerla”, dijo llorando.
“No tengo tanta confianza en mí misma como antes. Siento que no me divierto tanto como antes. Tengo que hacer lo correcto para mí”, añadió.
Biles se había tomado dos años de descanso tras Río 2016. Volvió a la escena internacional en los Campeonatos del Mundo de 2018 en Doha, donde ganó seis medallas, cuatro de ellas de oro, batiendo un récord de cuatro victorias en el concurso general individual.
Quizás, el nombre de Simone Biles comenzó a tomar fuerza en el año 2016 cuando en los juegos olímpicos de Rio con 19 años, gano 4/5 medallas de oro en las disciplinas de gimnasia con un margen de ventaja abrumador, sobre todo en los ejercicios de suelo pic.twitter.com/LHfdzOFO1o
— Plue (@stuck_word) July 26, 2021
UNA INFANCIA DESTRUIDA
A los 6 años, Simone Biles fue colocada en un centro de acogida. Sus padres no podían cuidar a sus cuatro hijos debido a una adicción a las drogas y al alcohol.
En enero de 2018, Simone Biles reveló que sufrió abusos sexuales por parte de Larry Nassar, el ex médico del equipo nacional de gimnasia, quien fue condenado en diciembre de 2017 a 60 años de cárcel. Desde entonces, Biles ha admitido que se considera una como “sobreviviente”.
“Hoy en día, creo que los problemas de salud mental en el deporte son más comunes. Somos humanos, tenemos que proteger nuestra mente y nuestro cuerpo, en lugar de hacer lo que el mundo espera que hagamos”, recuerda Simone Biles.
Antes de los Juegos la gimnasta indicó que cargaba “el peso del mundo” sobre sus hombros. Se esperaba desde hacía meses que fuera la estrella y ganadora de los Juegos de Tokio y apareció en las portadas de muchas revistas. Desde el martes, ha recibido muchos mensajes de apoyo, como el de Michele Obama.
Aquí el momento exacto en que la gimnasta estadounidense Simone Biles se lesiona, aún más, el tobillo (sus entrenadores no lo quieren aceptar). Ya sentía, de por si molestias. Muy lamentable pues queda prácticamente fuera de las competencias..🤸#Tokyo2020
– pic.twitter.com/5mehHhJaar— Shevoanne (@Shevoanne1) July 28, 2021
CADA VEZ MENOR TABÚ
Algunos deportistas de élite han escondido durante mucho tiempo sus dificultades psicológicas, antes de revelarlas una vez terminada su carrera. La tenista Naomi Osaka y la superestrella de la gimnasia en cambio no dudaron en revelar las suyas.
Michael Phelps, considerado una leyenda de la natación con 28 medallas olímpicas, reveló en 2018, dos años después de su retirada de las piscinas, que había sufrido depresión durante su carrera, ahogando sus angustias en el alcohol. Incluso contó que había llegado a considerar el suicidio.
Otros, como el ciclista británico Mark Cavendish o el nadador australiano Ian Thorpe, también han confesado haber sufrido depresión o ansiedad durante sus carreras. Jan Ullrich, ganador del Tour de Francia de 1997, era uno de los corredores con más talento de su generación antes de caer en el dopaje y luego en la depresión, con estadías en clínicas psiquiátricas y centros de rehabilitación.