El testimonio del narcotraficante Óscar Nava Valencia, alias “El Lobo”, podría derivar en una cadena perpetua en EU en contra de Gerardo González Valencia, líder de Los Cuinis y cuñado del “Mencho”.
Los Ángeles, 28 de junio (LaOpinión).- Durante el juicio que se llevó a cabo en Estados Unidos contra Genaro García Luna subieron al estrado varios testigos colaboradores, siendo uno de ellos Óscar Nava Valencia, alias “El Lobo”, quien llegó a ser uno de los máximos líderes del Cártel del Milenio.
Al estar inmiscuido en el mundo del narcotráfico, este sujeto estuvo relacionado con varios líderes criminales, principalmente aquellos que tenían su base de operaciones en los estados de Michoacán y Jalisco, como es el caso de Gerardo González Valencia, uno de los líderes de Los Cuinis, brazo financiero del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Es precisamente González Valencia, alias “El Flaco”, quien ahora enfrenta un juicio en Estados Unidos, y el próximo 21 de julio podría ser sentenciado a cadena perpetua.
Su equipo de abogados pidió a un tribunal en Washington que la pena carcelaria de su cliente, también cuñado de Nemesio Oseguera Cervantes, alias “El Mencho”, no rebasara los 16 años debido a que su participación al frente del grupo criminal fue breve.
Sin embargo, una serie de testimonios, entre los que destaca “El Lobo” podrían hundir al delincuente, pues aseguró ante un Juez que entre 2004 y 2009 vendió al menos 30 toneladas de cocaína a los Cuinis, y que cerca de la mitad la vendió personalmente a Gerardo González.
Estas declaraciones están asentadas en documentos judiciales a los que tuvo acceso el periodista Ángel Hernández, de Milenio, en donde Óscar Nava identificó al cuñado del “Mencho” como una pieza fundamental del brazo financiero del CJNG.
Durante su testimonio, dijo que invirtió en otros cargamentos de cocaína que Los Cuinis conseguían de un sujeto al que conocían como Rastrojo, en Colombia.
“Nava Valencia, Los Cuinis y Rastrojo invirtieron en tres cargamentos, cada uno contenía al menos mil 500 kilogramos de cocaína”, se lee en el memorándum con el que la Fiscalía estadounidense busca sentenciar a González Valencia.
En otro hecho ocurrido en 2007, según cuenta “El Lobo”, invirtieron en otro cargamento de cinco toneladas que sería transportado en un semisumergible hacia costas de Chiapas, pero que fue interceptado antes de llegar a México.
Los tripulantes de la embarcación la hundieron antes de que pudiera ser asegurada, pero aún así las autoridades pudieron conseguir 280 kilos de la droga.
Nava Valencia también ayudó a confirmar que “el acusado era un líder, si no es que el líder principal, de la Organización de Tráfico de Drogas de Los Cuinis.” Es decir, “El Lobo” veía a Gerardo González Valencia como un colega, no como un subordinado.