A varios usuarios de redes y simpatizantes les ha gustado la ilustración, que buscaba exhibir a López Obrador como autoritario. La han tomado e “intervenido”. (Ver imágenes).
Ciudad de México, 28 de mayo (SinEmbargo).– La portada de ayer de la revista británica The Economist ha causado distintas reacciones. Una primera parece obvia: indignación entre simpatizantes y en los círculos cercanos al Gobierno mexicano. Pero una segunda es la adopción o intervención: los trazos de la ilustración principal, que evocan las campañas oficiales del cardenismo y tienen similitudes con el constructivismo ruso o soviético, son utilizados por algunos para promover al Presidente Andrés Manuel López Obrador y al Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), el partido en el poder.
La revista inglesa The Economist dedicó ayer la portada a López Obrador. La ilustración principal utiliza el estilo del grabado: alto contraste, pocas tintas, y énfasis en el rojo y el negro. El texto de páginas adentro es una crítica ácida contra el Presidente mexicano cuando faltan días para las elecciones del domingo 6 de junio, que serán las más grandes de la historia en el país.
La publicación no es distinta a otras que la misma revista ha hecho en el pasado. Los recursos periodísticos del texto y la puesta en página parecen tomados de hace 15 años. The Economist titula “El falso Mesías”. El historiador mexicano Enrique Krauze publicó, antes de las elecciones de 2006, un texto similar que llamó “El Mesías tropical”. Ambos textos han salido días antes de dos elecciones cruciales para el movimiento lopezobradorista.
Pero a varios usuarios de redes y simpatizantes les ha gustado la ilustración, que buscaba exhibir a López Obrador como autoritario. Ha tenido un efecto contrario. La han tomado e “intervenido”, técnica que resignifica piezas y que quizás empezó en el siglo XX con Marcel Duchamp y sus llamados “readymades”, objetos del cotidiano modificados para convertirlos en arte. Un urinal cualquiera se volvió pieza de museo, valuada en millones de dólares: “La fuente”, vulgar mingitorio, es el mejor ejemplo de las intenciones de Duchamp.
Ahora, los simpatizantes del lopezobradorismo han tomado la portada para transformarla en gifs, camisetas y carátulas para sus cuentas en redes sociales. O para volverla propaganda para llamar a votar por Morena en 2021, una elección crucial para el Presidente y su partido porque se juega la mayoría de la Cámara de Diputados.
— Daniel (@NyeluysS) May 27, 2021
The Economist y la revista Time publicaban en el 2012 que México sería una de las 10 potencias mundiales y Peña Nieto estaba salvando a México.
Las portada$ tienen precio… 👁 pic.twitter.com/zrr2mvWjI8
— Miguel Torruco Garza (@MiguelTorrucoG) May 27, 2021
Las intervenciones de la ilustración de The Economist empezaron ayer por la tarde, poco después de que el Secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, respondiera a la revista. “El editor internacional de The Economist no fue sensible a uno solo de los argumentos”, recamó, después de decir que se había reunido con él.
Luego, agregó: “Por el contrario, a unos días de los comicios en los que los mexicanos elegiremos libremente a nuestros representantes, su medio publica un par de artículos en los que se invita a votar en contra del Presidente y su partido”.
“La opinión y el llamado sorprenden, no por la posición ideológica de su medio, sino por su virulencia y fragilidad argumentativa. Detrás de estos pareciera permear la visión de que la mayoría de la sociedad mexicana, sobre todo la de menos recursos, está equivocada y apoya a quien no debe. La portada de hoy es la síntesis de la exasperación. Se sabe que los resultados de la elección, como ocurrió en 2018, no coincidirán con lo que ustedes desean”, señaló el Canciller mexicano.
“Hace poco se predijo que López Obrador difícilmente alcanzaría el poder y que, en caso de que el electorado mexicano lo eligiera, conduciría al país a un inexorable fracaso económico, caracterizado por devaluación, hiperinflación, endeudamiento y a un choque directo con Estados Unidos. Nada de ello ha ocurrido”, dijo.
Y más adelante señala: “¿Acaso no será tiempo de cuestionarse que son las élites enojadas y exasperadas con el Presidente López Obrador y no la mayoría que se siente representada y defendida las que estén equivocadas?”.