Moody’s ha expuesto que las previsiones de los tres países americanos se han reducido de manera notable respecto a las previsiones realizadas antes del impacto del brote vírico. En cuanto a las previsiones para 2021, Argentina registraría un crecimiento del 2.5 por ciento, México, del 2.2 por ciento y Brasil, del 3.3 por ciento. Estos pronósticos también suponen un fuerte descenso respecto a los originales.
Madrid, 28 de abril (EuropaPress).- La agencia calificadora Moody’s ha estimado recesiones significativas en el Producto Interno Bruto (PIB) de México, Brasil y Argentina para este año, con contracciones del 7, 5.2 y del 6 por ciento, respectivamente, en el marco de la crisis sanitaria y económica del coronavirus COVID-19 y el desplome de los precios del petróleo.
La firma ha señalado que los costes económicos del coronavirus en medio de una contracción de la economía a nivel global se están acumulando rápidamente, lo que ha hecho que, además de los descensos en las previsiones para este año, las proyecciones de las economías en 2021 estén por debajo de los niveles previos a la propagación de la enfermedad.
Moody’s ha expuesto que las previsiones de los tres países americanos se han reducido de manera notable respecto a las previsiones realizadas antes del impacto del brote vírico. En cuanto a las previsiones para 2021, Argentina registraría un crecimiento del 2.5 por ciento, México, del 2.2 por ciento y Brasil, del 3.3 por ciento. Estos pronósticos también suponen un fuerte descenso respecto a los originales.
La agencia ha resaltado los riesgos de posibles descensos en sus previsiones en el caso de que la pandemia no sea contenida y las medidas de aislamiento tengan que ser reimplantadas.
Incluso sin medidas de aislamiento de una mayor duración, Moody’s alerta de que podría implantarse una dinámica en la que se proceda a la destrucción a gran escala de negocios y sectores enteros, así como altas tasas de desempleo estructurales y una pérdida permanente de capital humano, además del malestar en el consumo y la inversión.
Por otro lado, la compañía ha destacado a México y a Brasil, junto con Turquía, Indonesia, Arabia Saudí y Rusia, como dos de los países que han adoptado medidas menos rigurosas para contener el virus, lo que no ha evitado un impacto severo en sus economías, haciendo que el riesgo de que el brote vírico desencadene una crisis de salud mayor sea más alto en estos países que en otros.
Moody’s proyecta una contracción del 5.8 por ciento para los países del G20 en 2020, advirtiendo que, incluso con una recuperación gradual, el PIB de las economías más avanzadas en 2021 estará por debajo de los niveles previos al coronavirus.
“La contracción en la actividad económico en el segundo trimestre será severa, mientras que la recuperación general a partir de la segunda mitad del año será gradual”, ha afirmado el vicepresidente de Moody’s, Madhavi Bokil.
Bokil también ha apuntado que es probable que la recuperación sea desigual entre sectores, ya que “el miedo a la infección probablemente alterará el comportamiento del consumidor incluso después de que se levanten las restricciones sobre la actividad comercial y la movilidad”.
De este modo, el vicepresidente de la compañía señala que aquellas actividades con un alto nivel de contacto humano, como salir a cenar, ir al cine o volar son improbables que se normalicen por completo hasta que los niveles de la enfermedad caigan hasta niveles muy bajos o hasta que una vacuna o un tratamiento esté disponible.