Robert Muggah, uno de los autores del informe “Seguridad ciudadana en America latina: Hechos y cifras”, alertó que “la tendencia general [de la violencia] que se presenta en estos momentos en América Latina es la de que sigan aumentando los homicidios y el deterioro de la seguridad”.
El Igarapé Institute destacó que cinco de las 50 ciudades con mayor tasa de homicidios en el mundo están en México: Acapulco, Chilpancingo, Ciudad Victoria, Tijuana, Culiacán y Mazatlán.
Ciudad de México, 28 de abril (SinEmbargo).– El último informe del Igárape Institute “Seguridad ciudadana en América latina: Hechos y cifras” resalta que México fue el segundo país que más homicidios aportó al mundo en 2017. Y destaca que un año atrás junto a Brasil, Colombia y Venezuela acumuló una cuarta parte de los asesinatos que se registraron a nivel global.
El think thank con sede en Brasil desataca que en el año 2017, nuestro país reportó 25 mil 339 asesinatos, y el gigante brasileño, 57 mil 395.
Respecto a la tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes, México ocupó el número 17 del ranking con una incidencia de 20.4 casos. A la cabeza del listado está El Salvador (60); Jamaica(56); Venezuela (53.7); Honduras (42.8); San Cristobal y Nieves (42.0); Lesoto (41.2); Belice (37.2); Trinidad y Tobago (36); San Vicente y las Granadinas (35.5); Sudáfrica (34.3); Santa Lucia (34); Bahamas (31); Brasil (27.8); Guatemala (26); Antigua y Barbuda (25), y Colombia (22.0).
El informe destaca que a lo largo de 2016, en América Latina se cometió el 33 por ciento de los homicidios a nivel internacional, aunque solo concentró el 8 por ciento de la población.
Tan solo Brasil, Colombia, México y Venezuela acumularon una cuarta parte de los homicidios de la totalidad de naciones en ese año (114 mil de los 437 registrados a nivel mundial).
Brasil acumuló 56 mil 337 (13 por ciento); Mexico, 25 mil 967 (el 6 por ciento) y Venezuela 4 por ciento (16 mil 072), y Colombia, 15 mil 733 (Colombia 4 por ciento).
“Muchos países, estados y ciudades de América Latina se enfrentan a una crisis crónica de seguridad pública. A pesar de más de una década de crecimiento económico modesto, las tasas de delincuencia y victimización están aumentando, no disminuyendo. Sin embargo, la información reciente de 2017 muestra algunos signos de mejora. La violencia criminal se destaca de forma rutinaria como una de las principales preocupaciones de los ciudadanos de todo México, América Central y América del Sur. Y hay señales de advertencia de que las altas tasas de violencia criminal y victimización de la región continuarán aumentando si no se hace nada”, resalta la presentación del informe.
El Igarapé Institute resaltó que 43 de las 50 ciudades con mayor tasa de homicidio son latinoamericanas: San Salvador, El Salvador (136); Acapulco, México (108.1) y San Pedro Sula, Honduras (104.3).
Otras de las ciudades mexicanas que se encuentran en el sangriento top son: Chilpancingo , Guerrero (88.1); Ciudad Victoria, Tamaulipas (60.5); Tijuana, Baja California (49.8), Culiacán, Sinaloa (46.3); y Mazatlán, (46.3).
México también es el tercer país en América Latina con más ciudadanos que se dijeron víctimas de delitos (46 por ciento), solo detrás de Venezuela (48 por ciento). Y se encuentra entre las cinco naciones en las que menos ciudadanos se sintieron seguros Venezuela (14 por ciento), El Salvador (36 por ciento), República Dominicana (36 por ciento), Perú (40 por ciento) y México (40 por ciento).
“La tendencia general que se presenta en estos momentos en América Latina es la de que sigan aumentando los homicidios y el deterioro de la seguridad”, dijo a Robert Muggah, uno de los autores de este informe, a The Guardian.
Y abundó: “América Latina es un área inmensa y hay muchas variaciones. Pero como región –incluyendo a México, a Centroamérica y a Sudamérica– la tasa de asesinatos seguirá aumentando hasta 2030. Los únicos otros dos lugares en los que vemos aumentos parecidos son partes del sur y del centro de África y algunas zonas en guerra”.
El informe resaltó que las personas de entre 15 y 29 años son la mitad del número total de asesinados.
“Además de tener estos niveles extremadamente altos de homicidios, la gran mayoría de los homicidios se cometen con armas de fuego. En el 75 por ciento de los casos, se han utilizado pistolas”, detalló Muggah. La media del uso de armas de fuego es de un 40 por ciento.