Diversas asociaciones de la sociedad civil se han organizado para crear la iniciativa “UniaoSP” con el objetivo de impedir “una crisis humanitaria” en las comunidades más vulnerables del estado de Sao Paulo como consecuencia de la expansión del coronavirus.
Sao Paulo, 27 de marzo (EFE).- El delantero brasileño Neymar, delantero del París Saint-Germain, se ha unido a una campaña de donaciones para ayudar con cestas básicas de alimentos y productos de higiene a las familias que viven en las favelas de Sao Paulo, una de las zonas más vulnerables frente a la pandemia de coronavirus.
“La solidaridad debe ser más contagiosa que el virus”, afirmó el camisa 10 de la selección brasileña en sus redes sociales.
Diversas asociaciones de la sociedad civil se han organizado para crear la iniciativa “UniaoSP” con el objetivo de impedir “una crisis humanitaria” en las comunidades más vulnerables del estado de Sao Paulo como consecuencia de la expansión del coronavirus.
Sao Paulo es la región más golpeada de Brasil, con 68 de los 92 fallecidos en el país por COVID-19 y mil 223 de los casi 3 mil 500 positivos registrados en apenas un mes, según el balance del Ministerio de Salud divulgado este viernes.
El proyecto también está apadrinado por el surfista Gabriel Medina, bicampeón mundial, y Luciano Huck, un conocido presentador de televisión y empresario, entre otras personalidades del país sudamericano.
“Que las personas piensen más en el prójimo en un momento de tanta angustia, incertidumbre y sufrimiento. No estamos captando recursos, estamos donando recursos propios y movilizando amigos y familiares”, expresó en Instagram el presentador Huck, quien tiene ambiciones políticas y hasta es barajado como posible candidato presidencial.
Las favelas brasileñas se han convertido en una de las zonas más vulnerables frente al coronavirus debido a la alta densidad de población y la falta de infraestructura en esas comunidades, algunas de las cuales no tienen ni agua corriente.
Además, una parte importante de su población trabaja en el mercado informal y se ha visto seriamente afectada por las cuarentenas decretadas en algunos estados de Brasil, como el de Sao Paulo, para intentar contener la propagación de coronavirus.
Todos los comercios de Sao Paulo, menos los de primera necesidad, están cerrados desde el martes por un periodo de 15 días, prorrogables.
El Gobierno de Brasil ha aprobado un subsidio para los trabajadores informales de 600 reales por mes (120 dólares) con la intención de ayudar a este grupo, que representa el 40 por ciento de la población ocupada, equivalente a cerca de 40 millones de personas en todo el país.