Economía

La pobreza no acaba con ayudas: es sacando del estancamiento a México, dice Santiago Levy (BID)

28/03/2017 - 1:47 pm

Santiago Levy del BID alertó que mientras México se concentre solamente en los programas sociales como vía para erradicar la pobreza, esta condición prevalecerá en más de la mitad de la población. Dijo que el problema está en el crecimiento de la informalidad legal, ya que 90 por ciento de las empresas del país son informales legales, de origen familiar, donde se contrata a tres o cuatro personas, no hay relaciones asalariadas y no hay aseguramiento social. Estas empresas son las que emplean a más de la mitad de la población en el país, aseguro durante el Foro Internacional “¿Por qué persiste la pobreza y la desigualdad en México?

Puebla, 28 de marzo (SinEmbargo).- Mientras México se concentre solamente en los programas sociales como vía para erradicar la pobreza, esta condición prevalecerá en más de la mitad de la población, cuando las cifras oficiales indican que el problema está en el estancamiento económico del país, señaló el doctor Santiago Levy, del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

En el Foro Internacional “¿Por qué persiste la pobreza y la desigualdad en México?”, organizado por la Universidad Iberoamericana Puebla, el economista explicó que la gran tragedia de México es que a pesar de que se tienen las mejores condiciones de crecimiento, casi únicas en la región, la pobreza y desigualdad persisten porque no se ha trabajado en la inserción de la población pobre en el mercado laboral y así, la mayoría de las entidades son sumamente improductivas y basan su economía en la informalidad.

Foto: Daniela Barragan, SinEmbargo

“En las últimas dos décadas el país hizo un esfuerzo para hacer crecer la economía, ahí está el Tratado de Libre Comercio de América Latina (TLCAN). Se ha permitido mejorar algunos indicadores de bienestar, pero no se ha logrado mejorar las condiciones de inserción de los pobres en el mercado laboral y eso se debe a que la productividad en el país está estancada y si eso sigue, no hay programa social que erradique la pobreza”, dijo en su presentación.

Para el doctor, el problema está en el crecimiento de la informalidad legal. Con base en datos del Inegi, del total de las empresas del país, de 4.1 millón de establecimientos, 90 por ciento tienen 5 trabajadores o menos y las que tienen más de 50 trabajadores, 0.75 por ciento.

El 90 por ciento de las empresas del país son informales legales, de origen familiar, donde se contrata a tres o cuatro personas, no hay relaciones asalariadas y no hay aseguramiento social. Estas empresas son las que emplean a más de la mitad de la población en el país.

“Eso es el país. Así se produce en México. El 43 por ciento del acervo capital del país está en el sector informal y esto influye en la productividad. En México hay dispersión de la productividad porque hay una gran masa de empresas informales que tienen números muy por debajo de la media nacional”, sostuvo.

Esto refleja que el país está invirtiendo demasiado en empresas informales y el sector formal de la economía es pequeño.

Otro dato muestra que el número de empresas en el país creció más de 50 por ciento y de trabajadores 47 por ciento, lo que indica que en los últimos 15 años crecieron más las empresas y que cada vez contrataron a menos trabajadores.

“Sí se deben mejorar los programas sociales, pero ese tema se debe trascender para realmente erradicar la pobreza. Los avances en la disminución de carencias no se traducen en la erradicación de la pobreza monetaria”, agregó.

La apuesta de los programas sociales hace 22 años, dijo, era poner a las familias pobres en el sector de los no pobres, de la informalidad a la formalidad y que tuvieran un ingreso propio, volviéndolos más productivos. Pero no cambió, hubo un retroceso y esa es la tendencia en los siguientes 20 años.

Foto: Daniela Barragan, SinEmbargo

“Se puede mejorar la focalización y la institucionalidad de los programas sociales siendo honestos. No se les debe cambiar el nombre, no se debe preguntar si sirvió, sino si se fomentó el capital humano de las familias pobres. Los programas no arreglan los incentivos de las empresas, entonces no se deben hacer más programas. Se debe salir de la lógica de los programas sociales, abrir las perspectivas y preguntarse qué se debe hacer con la informalidad para revertirla”, agregó el doctor.

“No se deben abandonar los programas sociales, pero para salir de la pobreza de forma permanente, se debe priorizar en la productividad”, concluyó.

Daniela Barragán
Es periodista por la UNAM, con especialidad en política por la Carlos Septién. Los últimos años los ha dedicado al periodismo de datos, con énfasis en temas de pobreza, desigualdad, transparencia y género.
en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video