Alerta Roja ya se encuentra disponible en Netflix. Una pista de baile, una prisión aislada y la selva son los escenarios que Reynolds y Johnson utilizarán para atrapar a la ladrona de arte más buscada del mundo, Gadot.
Por Álvaro Piqueras
Ciudad de México, 27 de noviembre (AS México).- El pasado 12 de noviembre Netflix estrenaba una de sus grandes apuestas para el último tramo de 2021. Alerta Roja, dirigida por Rawson Marshall Thurber, y protagonizada por tres de las estrellas más solicitadas del panorama hollywoodiense actual, Dwayne Johnson, Ryan Reynolds, y Gal Gadot, es una película de acción con tintes de thriller y comedia producida por “The Rock”, que ha generado mucha expectación.
En primer lugar, porque ha sido la plataforma de contenidos digitales la que se ha llevado el gato al agua por delante de grandes productoras y distribuidoras como Sony, Warner Bros o Universal Pictures, que aspiraban a recaudar un buen pellizco con el blockbuster en cuestión. Y en segundo lugar, porque había mucho interés por comprobar el resultado final de una cinta llamada a ser un gran éxito.
La trama a priori parece atractiva. Un criminólogo del FBI y el ladrón de arte más buscado del mundo se hacen cómplices para atrapar a una escurridiza estafadora que siempre va un paso por delante. Es decir, persecuciones, aventura, robos, acción y giros argumentales en torno a tres huevos cubiertos de joyas que al inicio de la película se da a entender que pertenecieron a la mismísima Cleopatra tras un regalo del general romano Marco Antonio.
Sin embargo, Hiram Garcia, del equipo de la productora de Dwayne Johnson, ha asegurado a TheWrap que todo se trata de una invención fruto de la imaginación del guionista y director Rawson Marshall Thurber, lo que se conoce en el argot cinematográfico como un Macguffin, un elemento narrativo que hace que los personajes avancen en la trama pero que no es vital para la misma.
“Thurber había ideado toda la historia que se escucha al inicio de la película como un fascinante relato. Te cuenta cosas sobre la época y sobre Cleopatra para explicar realmente el Macguffin de la película”, asegura el productor, que destaca que la mayoría de personas a las que se les presentaba la idea de la película antes de iniciarse el rodaje daban por verídico el relato.
“La historia de fondo está tan bien concebida que desearías que fuera real, pero no, fue totalmente inventada. Es una idea muy divertida que se le ocurrió al director”, culmina Hiram Garcia.