México, 27 Sep (Notimex).- Es importante que México construya un robusto sistema de protección de la salud que permita enfrentar fenómenos como la desigualdad en el acceso a la salud, el desabasto en medicinas y que se cuente con tratamientos adecuados, entre otros factores relacionados con la responsabilidad del Estado como garante de la salud.
Así lo aseguró el titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez luego de señalar que la protección de la salud es un derecho humano no patrimonial ni negociable y debe ser garantizado y exigible.
Mediante un comunicado, la CNDH señaló que el ombudsman nacional participó en el Simposio CONAMED 2015 “El Derecho a la Protección de la Salud”, que se llevó a cabo en el auditorio de la Academia Nacional de Medicina, donde moderó la mesa de trabajo “Alcances del derecho humano a la protección de la salud”.
En el evento González Pérez destacó que “la protección del derecho a la salud y los problemas de salud pública corresponden a todas las instancias y autoridades e implican la implementación de acciones conjuntas con un enfoque de inclusión y acceso a todas las personas”.
Además, agregó, lo anterior debe realizarse reconociendo la dinámica de este derecho y su relación con la garantía de otros como la alimentación, vivienda, trabajo, integridad personal, vida y medio ambiente sano.
En México, dijo, se debe entender el derecho a la protección de la salud, como el estado de completo bienestar físico, mental y social y no solamente como la ausencia de afecciones o enfermedades.
Mencionó que el estado físico y mental, se consigue satisfaciendo todos los derechos humanos, con base en los principios de interdependencia e indivisibilidad y el bienestar social, al acceder a satisfactores económicos, ambientales, culturales y políticos.
Resaltó que ante los retos que plantean los problemas de nuestro presente es necesario un abordaje multidisciplinario y social de las enfermedades y las condiciones médicas específicas.
Por ello, “debemos dialogar sobre cómo asegurar las condiciones plenas para que cada afección a la salud pública pueda ser tratada de manera gratuita y bajo los más altos estándares de calidad”, precisó.