El actor intentará transmitir con una clase en línea el sábado 28 de agosto a través del Foro Shakespeare de Ciudad de México, la cual estará centrada también en el intercambio de conocimientos, en la reflexión sobre la situación actual y por supuesto muchos otros aspectos sobre formación actoral, creación de escenas o comunicación con el espectador.
México, 27 de agosto (EFE).- El actor mexicano Odiseo Bichir, reconocido especialmente por sus papeles de villano en telenovelas y apasionado del teatro, dijo en una entrevista con Efe que está tratando de comprender cómo puede ser mejor el mundo.
El intérprete se encuentra profundizando en dudas filosóficas desde hace algún tiempo, algo que se intensificó con la pandemia mundial de coronavirus. Del mismo modo consideró que es necesario buscar nuevos modos de llegar a la audiencia y eso intentará transmitir con una clase en línea el sábado 28 de agosto a través del Foro Shakespeare de Ciudad de México.
"Intento aprender y atender cómo tiene que ser, cómo puede ser mejor este mundo y en ello va mi propia existencia y si para lograrlo tengo que cambiarme a mí mismo pues lo haré, en eso estoy empeñado", explicó apasionado el actor.
Esta reflexión, dijo, llega con la intención de lograr mejorar las vías de comunicación y convertirlas, olvidando "las diferencias políticas, de credo, de género o de gustos estéticos", en algo "sincero y genuino (...) que ofrezca paz, alegría, fuerzas, justicia y libertad".
Este afán por mejorar el mundo desde sí mismo viene de detectar complejidades en ciertos casos mal atajadas y también ver que el teatro peligra por la falta de público y la distancia, aunque se siente positivo entorno a reinventarse.
"Es un momento difícil en el que los jugadores de futbol pueden festejar en un estadio vacío un gol abrazándose entre pero ellos los actores que interpreten a Romeo y Julieta tienen que responder ante las autoridades sanitarias para mantener la seguridad en un recinto teatral", dijo.
VOLUNTAD DE SER CREATIVOS
Aún así, es consciente de que hay que seguir protocolos por el bien común y destacó que su intención no es dar lástima.
"No queremos dar imagen de actor pasando el sombrero, lo que queremos es que reciba (la audiencia) lo que sabemos hacer. Creo que ante la pandemia será obligatorio encontrar nuevas formulas intercambios", manifestó.
En relación a esto destacó que hay muchas opciones posibles como la fidelización con los espectadores más habituales a través de obsequios por acudir virtualmente a presentaciones o intercambios.
De hecho, el actor está ofreciendo asesorías personales en las que el cobro puede consistir en "un chorizo argentino o chiles en nogada".
Aunque la clase a través del Foro Shakespeare requerirá una aportación económica a través de la web boletópolis, estará centrada también en el intercambio de conocimientos, en la reflexión sobre la situación actual y por supuesto muchos otros aspectos sobre formación actoral, creación de escenas o comunicación con el espectador.
"Desafortunadamente hay una diferencia muy importante cuando no podemos estar de cuerpo completo para la transmisión de ciertos datos y nuestro trabajo requiere una serie de lenguajes que quedarán fuera en esta sesión. (...) Lo que sí puedo prometer es que vamos a encontrar juntos elementos que nos van a ser muy útiles y prácticos", aseguró.
CAMBIOS INFRUCTUOSOS
Por último, Bichir quiso hacer un reflexión acerca del sector en el que más ha participado en su carrera actoral: el de las telenovelas, el cual, consideró, ha intentado realizar una serie de intentos fallidos por renovarse para recuperar las asombrosas cifras de audiencia que tuvo en pasadas décadas.
"Creo que injustamente algunas empresas privadas cometieron una injusticia y buscando dónde estaban los errores creyeron detectar que era responsabilidad del actor", explicó.
Según él, es por esto que los líderes de empresas privadas de televisión desoyeron la opinión de algunos actores que consideraron que no se podía faltar al respeto al público deduciendo que no podrían detectar sutilezas, con lo que fallaron en sus intentos por cambiar esta industria que, a pesar de todo, sigue siendo fuerte y colándose en muchísimas casas mexicanas.
"La empresa privada ha sido un poco miope en no aceptar que todos hemos cometido errores y que entre todos podríamos sacar adelante un nuevo navío que surcara los mares y que ofreciera otras cosas", terminó, para añadir que, aún así, desea que por fin haya cambios que tengan un buen efecto sobre empresas, audiencias y profesionales de la interpretación.