“Somos la envidia económica de todo el mundo”, afirmó Donald Trump al celebrar el crecimiento del 4.1 por cienot en el Producto Interno Bruto (PIB) durante el segundo trimestre del año.
Washington, 27 jul (EFE).- La economía estadounidense se aceleró a un ritmo anual del 4.1 por ciento en el segundo trimestre de 2018, la mayor tasa desde 2014, un cifra que el Presidente Donald Trump celebró como “asombrosa” y que prometió será mucho más alta en el futuro.
El Departamento de Comercio publicó hoy el primero de sus tres cálculos sobre la evolución del Producto Interior Bruto (PIB) entre abril y junio en Estados Unidos, que supone casi duplicar el ritmo de expansión del trimestre precedente, que fue del 2.2 por ciento.
Este repunte vino dado en gran parte por el gasto de los consumidores, que en EU representa casi dos tercios de la actividad económica, que creció a una tasa anualizada del 4 por ciento, y la inversión empresarial también contribuyó a la aceleración económica con un alza del 5.4 por ciento.
Asimismo, las exportaciones apoyaron esta aceleración, al aportar 1.06 puntos porcentuales al crecimiento del trimestre.
Este indicador es el primero que incluye la escalada de tensiones comerciales desatadas por la agresiva agenda proteccionista de Trump, quien impuso aranceles a las importaciones de acero y aluminio así como a diversos productos procedentes de China.
Tras conocerse este dato trimestral, Trump ofreció una declaración en la Casa Blanca en la que calificó de “asombrosa” esta tasa anualizada del 4.1 por ciento, y aseguró será “mucho más alta” en el futuro.
“A medida que los acuerdos comerciales se logran uno a uno, vamos a ir con cifras mucho más altas, y estas son cifras asombrosas”, afirmó, días después de acordar con la Unión Europea (UE) trabajar hacia el objetivo común de “cero aranceles”
“Somos la envidia económica de todo el mundo”, agregó exultante.
Trump compareció acompañado por el asesor económico de la Casa Blanca, Larry Kudlow, y el director del Consejo Asesores Económicos, Kevin Hassett, quienes defendieron que este ritmo económico es “sostenible”.
Para los analistas, sin embargo, hay dudas de que se pueda conseguir prolongar este ritmo por un periodo amplio.
“La economía se está comportando bastante bien. Pero será complicado mantenerse así (…) Los productores pueden haber concentrado algunos productos de exportación en este periodo antes de que entren en vigor los aranceles”, indicó Michael Feroli, economista jefe de JP Morgan Chase.
Este primer cálculo del segundo trimestre acerca la promesa de Trump de llevar el crecimiento a una tasa anual del 3 por ciento, impulsado por un enorme plan de estímulo fiscal aprobado en diciembre que incluye notables recortes de impuestos para las empresas y, en menor medida, a los trabajadores.
El positivo dato de expansión económica se suma a la baja tasa de desempleo en EU, de poco más del 4 por ciento, y subraya la buena salud de la primera economía mundial.
Como reflejo, la Reserva Federal (Fed) se encuentra inmersa en una senda de gradual ajuste monetario, que la ha llevado a subir en dos ocasiones en lo que va de año los tipos de interés hasta el rango actual de entre el 1.75 y el 2 por ciento.
El banco central estadounidense celebra una nueva reunión de política monetaria la próxima semana, en la que no se espera que se modifique el precio dinero, algo que se espera ocurra en su siguiente encuentro, en el mes de septiembre.
Los mercados financieros vieron con buenos ojos el dato del PIB y el Dow Jones de Industriales, el principal indicador de Wall Street, subía un 0.13 por ciento poco después del inicio de la jornada.