Pekín, 27 jul (EFE).- Una operación de la policía china ha permitido rescatar a 89 niños y detener a 369 personas, así como desmantelar una de las mayores redes de tráfico infantil del país.
La operación, desarrollada en dos fases, se realizó en su mayor parte el pasado día 20, cuando una acción simultánea en 14 provincias de China y llevada a cabo por más de 2 mil 600 policías permitió rescatar a 81 niños y detener a 330 personas.
Según fuentes del Ministerio de Seguridad Pública citadas por el diario “Nuevo Pekín”, este grupo recogía niños en el sur de China para después venderlos por unos 40.000 yuanes (6.150 dólares o 4.300 euros) en las provincias de Henan y Shanxi, en el norte de China.
Esta operación, además de permitir la detención de numerosos secuestradores y a los transportistas, que cobraban unos 5.000 yuanes por viaje (770 dólares o 537 euros), ha servido para apresar a Li Haijun, uno de los cabecillas de la red, y culminar así una actuación que comenzó en febrero de este año.
Además de la operación del día 20, cinco días antes fueron rescatados en Cantón y Guangxi, divisiones administrativas del sur del país, ocho niños secuestrados en Vietnam y vendidos en China, al tiempo que se detuvo a 39 personas relacionadas con los raptos.
Esta práctica es habitual en el norte de Vietnam, donde mafias chinas secuestran o compran a los bebés para llevarlos al sur de China en barco y, desde ahí, moverlos en autobús para esquivar controles de carretera y pasar desapercibidos.
Además, fuentes del Ministerio anunciaron una modificación de la ley por la cual, tras ser rescatados, los niños debían permanecer en casa del secuestrador hasta dar con el paradero de sus familiares.
A partir de ahora, el Ministerio de Asuntos Civiles se hará cargo de los menores mientras se realizan las pruebas de ADN a los posibles familiares para su identificación y, de no encontrar a los padres, los niños serán dados en adopción a familias chinas.