ENTREVISTA | Toda buena causa tiene su canalla: Javier Cercas

27/05/2017 - 12:04 am

¿En la Guerra Civil de España todos los republicanos eran buenos y todos los que luchaban a favor del Franquismo eran malos? Ese es el debate que plantea Javier Cercas con su nueva novela El monarca de las sombras. La discusión tiene un sentido más allá de su país de origen. Todos tenemos nuestras propias guerras y todos debemos saber qué ha pasado exactamente con nuestra historia.

Ciudad de México, 27 de mayo (SinEmbargo).- Todas las familias tienen un héroe oficial; en la de Cercas lo fue durante muchos años Manuel Mena, un joven que al estallar la Guerra Civil se incorporó al ejército de Franco, que participó en los combates más duros de la guerra y que en septiembre de 1938 murió en la Batalla del Ebro.

Javier Cercas siempre fue reacio a indagar en la historia de su tío abuelo, hasta que se sintió obligado a hacerlo. El resultado de esa indagación es una novela absorbente, pletórica de acción, de humor y de emoción, que nos enfrenta a algunos de los temas esenciales de la narrativa de Cercas: la naturaleza radiante, poliédrica y misteriosa del heroísmo, la terca pervivencia de los muertos y la dificultad de hacerse cargo del pasado más incómodo.

Exploración a la vez local y universal, personal y colectiva, novela belicosamente antibelicista, El monarca de las sombras da una vuelta de tuerca inesperada y deslumbrante a la pregunta sobre la herencia de la guerra que Cercas abrió quince años atrás con Soldados de Salamina.

En entrevista con Puntos y Comas le preguntamos estrictamente si es la Guerra Civil las novelas con las que tiene éxito, una respuesta que se niega a dar, pero que a todas luces lo ha puesto otra vez en el candelero.

La nueva novela de Javier Cercas. Foto: Especial

–¿Tienes a Manuel Mena, dirige toda la novela?

–Tardé mucho en escribir. Toda la vida. Es la primera pregunta seria que yo me hice en la vida, esto tiene que ver con mi familia, con la violencia que todos hemos heredado en España, con esa mayor herencia. Siempre mi madre me habló de este chico, mi madre que es un poco también la protagonista de la novela, se refería a este muchacho, que tenía grandes inquietudes intelectuales y que a la hora de la Guerra Civil decidió luchar por el ala equivocada y alistarse en el ejército de Francisco Franco. Muere dos años después, ¿por qué? ¿Por qué se alistó para defender una causa injusta, que ahora sabemos que era injusta y muere en el lado equivocado de la historia? ¿Por qué mi madre me hablaba tanto de él? Mi madre tenía cinco años cuando él se inscribe en el ejército y siete cuando muere, me hablaba de él como el hombre valiente que iba a defender el buen nombre de la familia, de la patria. Ese interrogante estuvo siempre dando vueltas sobre mí.

­–Contar la historia es contar la historia de violencia de la familia

­–La herencia de violencia con la que yo cargo y todos cargamos. Mexicanos, argentinos, españoles, todos, la de ustedes no tiene que ver con la Guerra Civil, pero tiene que ver con otras cosas. No sabemos en qué consiste esa herencia de violencia porque nuestra familia no nos los cuentan. No hay nada más secreto que eso. Y lo que me propuse es desvelar ese secreto, ¿por qué es tan importante saber en qué consiste? Y entenderla, cargamos con ella. Yo soy mis antepasados y yo seré mis descendientes, no metafóricamente, sino que viven en mí, cargo con ellos. Si tú sabes en qué consiste esa herencia y la entiendes, puedes manejarla. Si no sabes de esa herencia de violencia y no la entiende, ella te maneja a ti. Si no sabes de dónde vienes no sabrás adónde vas.

­–En España ha habido cierta polémica con que vuelvas a la Guerra Civil

­–Yo tengo muchos lectores en España y no me quejo. El libro ha sido muy bien recibido y ha tenido críticas buenísimas, pero claro que ha habido gente que me ha criticado. Primero porque soy una persona demasiado conocida y luego porque si tú escribes un libro sobre este asunto y nadie te ataca, el libro es malo. Obviamente, estoy hablando de cosas muy delicadas. Porque este libro no habla del pasado, habla del presente. Ese pasado forma parte del presente. Yo estoy diciendo cosas muy delicadas de lo que somos los seres humanos. Estoy diciendo que quienes luchan por una causa justa no siempre son justos. Y quienes luchan a veces por causas injustas a veces son justos. Eso a la gente no le gusta que se diga. No hay duda quién tenía razón política en la Guerra Civil Española, eran los republicanos, hubo un Golpe de Estado contra una república democrática, mi familia no la tenía, Manuel Mena no la tenía, se equivocaron, ahora bien: ¿eso significa que todos los republicanos eran buenas personas? Pues no. Los que asesinaron a miles de monjas y sacerdotes a sangre fría, ¿eran buenas personas? No tenían la razón moral, tenían la razón política, estaban del lado bueno de la historia, pero eran unos canallas. Toda buena causa tiene su canalla. Hubo gente en el ejército de Franco que se equivocó de buena fe, que creyeron que esa era una solución posible para la situación en la que se encontraba. Mi familia se equivocó, Manuel Mena se equivocó, pero después de investigar sobre su vida no puedo decir que este “chamaquito” de 17 años no haya sido mejor que yo. Tengo todas las razones para pensar que fue el mejor de muchos. Moralmente mejor que yo, porque se jugó la vida por lo que creía.

­–Establecer este debate hoy es vital

­–¡Es vital! Pero no sólo en España, sino en todas partes. Por eso los mexicanos pueden disfrutar tanto la novela, mucho más que algunos españoles fanáticos.

­–Hablas de tu madre y de lo que significa la migración

­–Este es un libro que busca los orígenes, de donde vengo, yo soy fruto de la migración y mi madre es una víctima de la migración. Quien se va, nunca vuelve. Vivir en el lugar de destino y vivir en el lugar nuevo, eso es una vida a horcajadas. Este es un libro que busca mis orígenes ideológicos, mis orígenes familiares, quiero saber de dónde vengo, para saber dónde voy. Nunca había sido escribir sobre mi pueblo, Ibahernando, y eso era ideal para mi vida. Yo soy escritor porque me marché de allí, de un sitio pobre, triste, violento, solo, soy lo que soy y uno tiene que asumir lo que es.

Soy escritor porque me fui de mi pueblo. Foto: PRH Marta Calvo

­–¿Te llevó mucho tiempo escribir esta novela?

–Toda la vida, insisto. Creí que nunca la escribiría. Porque no sabía cómo convertir una historia particular en una historia universal, la historia de este muchachito es la historia de miles de muchachitos que han sido engañados por los adultos. Los hemos mandado al matadero, diciendo que las guerras son hermosas. Es dulce y honorable morir por la patria, dice un dicho y yo digo: mentiras, montones de mentiras, intoxicados por ideologías venenosas como el fascismo, que te prometen el paraíso y termina en el infierno. Manuel Mena no es un caso único, es como pintar tu aldea y pintar el mundo.

­–¿Es toda autobiográfica?

­–Sí, es toda autobiográfica, pero hay pequeñas gotitas de ficción. Hay dos narradores en este libro, un historiador que habla de mí en tercera persona y un narrador que es Javier Cercas, que se parece mucho a mí o que soy yo mismo y que narra el proceso de hacer esta novela. Yo a veces digo que escribo novelas de aventuras sobre la aventura de escribir novelas. El making off, dirían los cineastas.

Mónica Maristain
Es editora, periodista y escritora. Nació en Argentina y desde el 2000 reside en México. Ha escrito para distintos medios nacionales e internacionales, entre ellos la revista Playboy, de la que fue editora en jefe para Latinoamérica. Actualmente es editora de Cultura y Espectáculos en SinEmbargo.mx. Tiene 12 libros publicados.
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