Donald Trump, Presidente de los Estados Unidos, reconoció este viernes que la relación con Corea del Norte ha cambiado radicalmente en los últimos meses y anunció una próxima reunión con el mandatario asiático que, espera, desemboque en la desnuclearización de la Península, sin embargo, no se mencionaron fechas.
Por su parte, Angela Merkel, mandataria de Alemania, en vísperas de la reunión que tendrá con Trump, reiteró su apoyo a las medidas de sanción que EU ha interpuesto a Norcorea y advirtió que ambos países se mantendrán vigilantes hasta que el programa nuclear de ese país llegue a su fin.
Washington (EU), 27 abril (EFE).- El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reconoció hoy que la situación con Corea del Norte ha cambiado "radicalmente" en los últimos meses y deseó que su futura reunión con Kim Jong-un, para cuya celebración hay "dos países posibles", sea "productiva".
"Las cosas han cambiado radicalmente desde hace solo unos pocos meses; desde los intercambios de insultos (...). Me reuniré con Kim pronto y esperemos que sea (un encuentro) productivo", declaró Trump durante una rueda prensa celebrada en la Casa Blanca junto a la canciller alemana Angela Merkel.
Por su parte, Merkel alabó la "fuerza" del mandatario estadounidense al establecer una política de sanciones contra Pyongyang que "ha abierto nuevas posibilidades", aunque advirtió que ambos países se mantendrán "vigilantes" hasta que el programa nuclear norcoreano llegue a su fin.
Las declaraciones de ambos líderes se producen en el marco de la visita oficial de la canciller a Washington, a donde llegó este jueves, y coincide con el encuentro mantenido hoy entre los líderes de las dos Coreas, Kim Jong-un y Moon Jae-in.
"Nos alienta el encuentro entre Kim y Moon", sostuvo Trump, quien rechazó comentar si ha hablado personalmente con el líder de Corea del Norte pero destacó que, en estos momentos, Pyongyang está tratando a Estados Unidos con "gran respeto".
El mandatario estadounidense expresó su deseo de que el acercamiento entre ambos países desemboque en la desnuclearización de la Península ya no sólo por el pueblo coreano, si no también por la gente "de todo el mundo".
"Ciertamente es algo que espero poder hacer por el mundo", declaró Trump, quien al ser preguntado al respecto no tuvo reparos en atribuirse la "responsabilidad" de que finalmente pueda llegar la paz a la Península de Corea, técnicamente en guerra desde 1950.