Agobiada por la inseguridad, la escasez de fuentes de agua potable y la contaminación, las predicciones sobre el resultado electoral en Guanajuato son contradictorias, pues mientras algunas encuestadoras que han realizado trabajo cara cara con la gente documentan una contienda cerrada e inclusive favorable a la oposición, otras consultoras anuncian que el PAN tendrá una amplia y cómoda ventaja.
Ciudad de México, 27 de marzo (SinEmbargo).- El Partido Acción Nacional (PAN) ha conservado la gubernatura de Guanajuato durante los últimos 33 años, la cual obtuvo como producto de la llamada “concertacesión” entre el gobierno priista de Carlos Salinas de Gortari y el PAN, acción con la cual el mandatario tricolor pretendió legitimarse políticamente, luego de su cuestionado triunfo electoral de 1988 sobre Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, de la coalición izquierdista Frente Democrático Nacional.
Luego de tres décadas, el panorama para el PAN no parece del todo claro en Guanajuato, donde se elegirá por primera ocasión en su historia a una Gobernadora, en los comicios del domingo 2 de junio del 2024.
Agobiada la entidad por la inseguridad, la escasez de fuentes de agua potable y la contaminación, las predicciones sobre el resultado electoral en Guanajuato son contradictorias, al cumplirse esta semana un mes de las campañas formales rumbo a la gubernatura, pues mientras algunas encuestadoras que han realizado trabajo cara cara con la gente, documentan una contienda cerrada, e inclusive favorable a la oposición, consultoras que escudriñan la opinión pública a través de llamadas telefónicas enviadas de forma automática con el uso de robots, anuncian que el PAN tendrá una amplia y cómoda ventaja.
La plataforma digital “Laboratorio de Periodismo y Opinión Pública” (Pop Lab) con sede en esa entidad, resume dos de los grandes problemas de Guanajuato: “Pese a insuficiencia de agua, Guanajuato prioriza expansión industrial. Ciudadanos de las zonas urbanas de Guanajuato resienten la escasez de agua con tandeos en sus hogares, no solo en el estío sino prácticamente todo el año, mientras la actividad industrial consume agua potable y la devuelve contaminada a cuerpos de agua prácticamente muertos”.
Llamó poderosamente la atención la encuesta dada a conocer el sábado 25 de noviembre del 2023 por la consultora Enkoll, que anunciaba una contienda muy cerrada en Guanajuato.
Las tendencias electorales que causaron mucha inquietud fueron reiteradas por la consultora Mendoza Blanco y Asociados, en su ejercicio demoscópico sobre Guanajuato, publicado el jueves 25 de enero del 2924.
Mientras que dos consultoras que realizan encuestas telefónicas automatizadas y con robots, ofrecen un panorama favorable y cómodo para el PAN.
La llegada del PAN al poder en Guanajuato está documentada por el académico Luis Miguel Rionda Ramírez, del Centro de Investigación en Ciencias Sociales de la Universidad de Guanajuato, en un artículo publicado en revista Frontera Norte, del Colegio de la Frontera Norte, Volúmen 8, número 16, de su edición julio-diciembre de 1996.
En las elecciones para gobernador de 1991 [el panista] Vicente Fox logró más de 417 mil votos, contra 622 mil que se adjudicaron a Ramón Aguirre [del PRI] —con serias sospechas de fraude masivo—, y los casi 100 mil de Muñoz Ledo [del PRD]. El desaseo del proceso llamó la atención nacional e internacional, en un momento en que estaban desarrollándose las negociaciones del Tratado de Libre Comercio México-Estados Unidos-Canadá, que era crucial para la administración de Salinas de Gostari.
Agrega el profesor investigador Luis Miguel Rionda Ramírez que la movilización ciudadana fue limitada. La apatía generalizada contrastó fuertemente con la respuesta pronta y radical del gobierno federal, que movilizó sus recursos tradicionales a fin de evitar un desgaste de la imagen democrática del país en los medios extranjeros. El candidato priísta fue declarado ganador oficial de las elecciones, pero el mismo día en que recibió su constancia de mayoría declaró que no se presentaría a tomar posesión de su cargo. Según las versiones más creíbles, Ramón Aguirre fue presionado por el propio presidente de la República a renunciar a la posibilidad de presentarse a tomar posesión.
El investigador Rionda Ramírez cuestiona el pretendido triunfo panista en 1991 en Guanajuato: a).- El voto priista mostró una sensible recuperación a nivel nacional, y es poco factible que en esta entidad la situación tendiese a lo contrario; b).- En opinión de muchos perredistas locales, Porfirio Muñoz Ledo se apresuró a “levantarle el brazo” a Fox por simple conveniencia política partidista, pero careciendo aún de los primeros resultados de su propio centro de cómputo; c).- Las actas de escrutinio tanto del PAN como del PRI nunca fueron exhibidas públicamente, aunque ambos partidos prometieron hacerlo, y d).- Varios priístas entrevistados informalmente por el autor no aceptan la versión del fraude masivo y solo reconocen que los operativos de compromiso del voto y acarreo de votantes fueron la clave para la amplitud de la victoria del priista Ramón Aguirre.
Sin embargo, la movilización panista llevó el caso guanajuatense más allá de la simple limpieza electoral y lo colocó entre los asuntos políticos que interferían con una prioridad nacional del gobierno de Carlos Salinas de Gortari, como era la negociación para el Tratado de Libre Comercio.
La solución salomónica que impulsó el gobierno federal consistió en los siguientes acuerdos y concesiones hacia el PAN, negociaciones políticas que a partir de entonces serían conocidas como las “concertacesiones”: 1).- Renuncia del candidato priista ganador; 2).- No se anularían las elecciones ni se convocaría a otras nuevas; 3).- Vicente Fox, el candidato panista, quedaba fuera de las posibilidades de acceder a la gubernatura; 4).- nombramiento inmediato de un gobernador interino de entre las filas del PAN, que fuese aceptable para el gobierno federal —la propuesta panista: Carlos Medina Plascencia, presidente municipal de León—; 5).- Este gobernador sería acompañado por un secretario de Gobierno de origen priísta —la propuesta del gobierno federal: Salvador Rocha Díaz, ministro de la Suprema Corte—, y 6).- el acuerdo más reservado de todos: el interinato duraría al menos los tres años que le restaban a la administración de Carlos Salinas de Gortari, que saldría en 1994, y no se convocaría a elecciones extraordinarias antes de este término, explica el investigador Rionda Ramírez. Medina Plascencia inició su gobierno en Guanajuato el 26 de septiembre de 1991. Las elecciones extraordinarias se realizaron el 28 de mayo de 1995. Las ganó Vicente Fox, quien en 1999 pidió licencia al cargo para contender por la presidencia de la República que ganó en el 2000.