De acuerdo con el estudio "México: La gobernabilidad en tiempos de la cuarta transformación", de grupo GEA-ISA, el 10 por ciento de los participantes vieron como acierto de Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México, el ataque a la corrupción, pero 11 por ciento considera que el mayor error fue haber quitado las guarderías infantiles.
En conferencia de prensa, Guillermo Valdés, socio de GEA, destacó que la tendencia de su popularidad sigue siendo sólida y creciente, similar a los resultados que presentaron otras casas encuestadoras cuando cumplió sus primeros 100 días, que incluso lo colocaron con cifras de aprobación de 80 por ciento.
Por Rocío Melgoza
Ciudad de México, 27 de marzo (Economía Hoy/SinEmbargo).– La aprobación del Presidente Andrés Manuel López Obrador es grande, pero en buena parte de debe a que ha construido su confianza a base de dinero repartido a través de la entrega de programas sociales, señala el estudio "México: La gobernabilidad en tiempos de la cuarta transformación", de grupo GEA-ISA.
En conferencia de prensa, Guillermo Valdés, socio de GEA, dijo que en el levante que se realizó a mil personas del 14 al 17 de marzo, se observa que la aprobación de López Obrador pasó de 57 por ciento en diciembre a 64 por ciento, un aumento de siete puntos porcentuales.
Destacó que la tendencia de su popularidad sigue siendo sólida y creciente, similar a los resultados que presentaron otras casas encuestadoras cuando cumplió sus primeros 100 días, que incluso lo colocaron con cifras de aprobación de 80 por ciento.
Sin embargo, explicó que en parte, la solidez que ha alcanzado López Obrador está sostenida en el reparto de recursos en programas sociales para adultos mayores y jóvenes, por lo tanto, el apoyo social podría cambiar si la nueva administración llega a fallar en el reparto.
"Es la combinación del carisma personal, la gente lo aprecia, lo percibe sencillo y cercano a ellos, más una promesa de populismo de apoyos directos, más la confirmación de gestos simbólicos que vienen a satisfacer este deseo de venganza contra políticos corruptos, pero lo más importante es esta política social que beneficia a la gente directamente con la entrega de dinero en tarjetas".
Por su parte, Ricardo de la Peña, ejecutivo de ISA, consideró que también tiene que ver el desgaste de popularidad de los otros partidos, la carencia de respuesta ante problemas en otras administraciones y una serie de reformas que la gente no concibió como un apoyo directo".
De acuerdo con el estudio, el 33 por ciento dijo ser ya beneficiario de programas sociales y un 31 por ciento aseguró que sabe que será beneficiaria en el futuro, lo que en suma coincide con las cifras del 64 por ciento de aprobación.
En su mayoría son adultos mayores, 27 por ciento; dos por ciento son beneficiarios el programa de becas "Jóvenes Construyendo el Futuro" y el resto sabe que próximamente comenzará a recibir el recurso, según datos de la encuesta.
"Prospera quita apoyo para salud y el tema alimentario, sólo quedó salud, entonces un 75 por ciento dice que ya se vio afectado tasa por estos recortes de la administración de López Obrador", mencionó Guillermo Valdés.
Además, en el estudio también se destaca que la gente amplía el plazo a López Obrador para que dé resultados, ya que 61 por ciento estaría dispuesta a esperar dos años o más para que cumpla.
ACIERTOS Y ERRORES
El análisis de GEA -ISA señala que el 10 por ciento de los participantes vieron como acierto de AMLO el ataque a la corrupción, pero 11 por ciento considera que el mayor error fue haber quitado las guarderías infantiles.
También, el 87 por ciento reprueba el recorte de recursos a albergues para mujeres víctimas de violencia pero 82 por ciento ve con "buenos ojos" el operativo contra el huachicol.
Por último, Ricardo de la Peña consideró que la reciente polémica que generó AMLO con su carta a España en la que le exige una disculpa pública por las vejaciones contra nativos de la época de la Conquista, no generará un cambio importante al contrario, puede suceder como en el caso del combate al robo de hidrocarburos en el que sí se generó descontento, pero al final la población lo avaló.
"Podemos ver que la aprobación depende de un elemento particular respecto a una visión de inconformidad y perspectiva de mejora personal, de forma tal que cada acto particular no lleva necesariamente a un cambio y no hay señales de que sea un parteaguas".