Los centros de aislamiento voluntario COVID-19 funcionan desde marzo de 2020. En el de San Pablo Tepetlapa, situado en la Ciudad de México, se han atendido a 162 personas. En la última semana de febrero había 17 pacientes en aislamiento: 5 mujeres y 12 hombres.
Ciudad de México, 27 de febrero (SinEmbargo).- Los centros de aislamiento voluntario COVID-19 de la Secretaría de Marina son para las personas que se contagiaron, viven en espacios reducidos, no pueden llevar a cabo una cuarentena adecuada y prefieren no arriesgar a sus familiares.
El teniente de fragata Romeo Alegría Ocaña, encargado del Centro ubicado en el Polígono Naval de San Pablo Tepetlapa, en Ciudad de México, dice a la agencia Cuartoscuro que su unidad está abierta las 24 horas y sólo se admiten a pacientes cuya oxigenación es estable y no presenta alguna comorbilidad.
Si alguna de las personas llega presentar complicaciones en el Centro de Aislamiento, se le canaliza a otra unidad médica especializada.
El servicio es totalmente gratuito y la estancia pude ir de 14 a 21 días. A los enfermos de COVID se les proporciona tres comidas al día, además de que personal médico de la Marina monitorea constantemente sus signos vitales, describe Moisés Pablo, quien presentó una galería de fotos del lugar para Cuartoscuro.
Las personas aisladas pueden jugar juegos de mesa o salir a un espacio verde para pasar el tiempo, de acuerdo con la información de la agencia.
Los primeros días del aislamiento, sin embargo, las personas se la pasan en sus camas recostadas debido a la intensidad de los síntomas.
Dichos centros comenzaron a funcionar en marzo de 2020. En el de San Pablo Tepetlapa hasta el momento se han atendido a 162 personas. En la última semana de febrero había 17 pacientes en aislamiento, 5 mujeres y 12 hombres.
El equipo con el que cuenta la unidad está integrado por tres médicos, cuatro enfermeras y seis personas de apoyo, todos integrantes de la Secretaría de Marina Armada de México, detalla Moisés Pablo.
México cumple un año con COVID-19 exhausto tras la muerte de cerca de 200.000 personas y con una economía muy maltrecha, pero con la esperanza de remontar este 2021 con un ambicioso plan de vacunación.
El país detectó su primer caso de coronavirus SARS-CoV-2 el 28 de febrero de 2020. Se trataba de un italiano radicado en México, de 35 años, que llegaba de su país.
Para entonces medio mundo comenzaba a resentir los afectos de la pandemia y en América Latina se había reportado un día antes un primer caso en Brasil.
En este año la pandemia ha arrasado con las vidas de muchísimos mexicanos porque quien no ha padecido la enfermedad, ha perdido a un familiar o a un amigo, o engrosa las abultadas filas de la pobreza.
México suma más de 2 millones de contagios y 184 mil muertos y es el tercer país del mundo por decesos tras Estados Unidos y Brasil, según las autoridades sanitarias.
Aunque el instituto de estadística detectó en un reciente informe que había 38.000 muertos más atribuibles a COVID hasta agosto de 2020. En total, se superarían de largo los 200 mil muertos.
-Con información de Martí Quintana, de la agencia EFE.