Culiacán, 26 Dic. (Notimex).- La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) identificó a algunos de los agresores de la masacre en la que perdieron la vida nueve personas, el pasado 24 de diciembre, en una comunidad del municipio de Concordia.

En conferencia de prensa, el titular de la PGJE, Marco Antonio Higuera Gómez, informó que aunque la fiscalía a su cargo ya tiene la posible identidad de algunos de los agresores, por la secrecía propia de la investigación es información reservada.

El funcionario estatal señaló que de acuerdo con las primeras investigaciones, estos hechos tendrían relación con la lucha entre bandas delincuenciales que operan en la venta y distribución de drogas.

Entre esas bandas incluyó por un lado células de los Beltrán Leyva y los Zetas y por el otro de los grupos del Pacífico.

CONSULTAR INFORMACIÓN RELACIONADA: Al menos nueve habitantes de la Comisaría de El Platanar de los Ontiveros, Sinaloa, fueron ejecutadas por un grupo armado el pasado 24 de diciembre a las 18:30 horas. “Tenemos una Navidad en donde no tenemos absolutamente nada qué festejar, es lamentable que pasen estos hechos donde gente inocente muere, estoy desde el día de ayer (lunes) en las oficinas de Palacio municipal esperando noticias y hasta ahorita son todos los datos que tenemos”, mencionó el Presidente Municipal. VER LA NOTA

Por el tipo de armas utilizadas, señaló, se puso en contacto con el representante de la Procuraduría General de la República (PGR) en Sinaloa, para que se coordinen en las investigaciones, además de otros delitos federales que pudieran surgir.

Ante los medios informativos de la localidad, Higuera Gómez refirió que los agresores habrían llegado en grupo de 30 personas, acribillando primero a cinco de sus víctimas, incluyendo una decapitación, y posteriormente a otras cuatro personas.

Los agresores arribaron a un domicilio en la comunidad Platanar de los Ontiveros, en donde sacaron por la fuerza a Francisco Gutiérrez Tirado, Feliciano Martínez Gutiérrez, Francisco Javier Lizárraga Pérez y Marcelino Rueda Medrano.

Señaló que en ese lugar se localizaron 17 casquillos percutidos calibre 7.62X39 milímetros, así como dos ojivas del mismo calibre.

Posteriormente, un nuevo reporte señalaba que cerca de ese lugar, en una tienda de abarrotes habían asesinado a otras cinco personas, una de ellas identificada como Francisco Parente Medina, dueño del establecimiento.

En ese evento también murieron Jesús Eduardo y Francisco Javier Parente Páez, hijos de la primera víctima, así como Víctor Adolfo Medina Garay, sobrino, y Tomas de Jesús Rodríguez Aguirre, vecino de esa localidad.