María del Sol Cruz Jarquín fue asesinada junto con la candidata a segunda concejal Pamela Terán Pineda y el escolta Adelfo Guerra Jiménez la madrugada del 2 de junio de 2018 en Juchitán Zaragoza, Oaxaca.
Ciudad de México, 26 de noviembre (SinEmbargo).- El asesinato de la fotoperiodista María del Sol Cruz Jarquín sigue sin ser esclarecido y sin una línea de investigación clara a más de un año y medio de los hechos. Soledad Jarquín, la madre de la joven, está convencida que detrás de la poca eficiencia y pasividad de la Fiscalía de Oaxaca está la mano del Partido Revolucionario Institucional (PRI) que no permite que las investigaciones avancen.
“La exigencia es que el PRI saque las manos del caso de mi hija porque yo necesito que se haga justicia, que encuentren a los verdaderos culpables”, dijo Soledad Jarquín en entrevista con SinEmbargo.
María del Sol Cruz Jarquín fue asesinada junto con la candidata a segunda concejal Pamela Terán Pineda y el escolta Adelfo Guerra Jiménez la madrugada del 2 de junio de 2018 en Juchitán Zaragoza, Oaxaca.
Soledad ha expuesto que el crimen en contra de su hija fue consecuencia de un delito electoral, pues María del Sol acompañaba a la candidata porque ella, que era empleada de una Secretaría estatal, es decir, una funcionaria en activo, fue enviada a cubrir la campaña política de la coalición PRI, PVEM y Nueva Alianza “contra su voluntad y so pena de perder su empleo”.
A la fecha, solo una persona está detenida como probable coparticipe del homicidio múltiple, pero el proceso penal contra el imputado se estancó: la audiencia intermedia, que debió desahogarse desde marzo pasado, fue suspendida en al menos dos ocasiones por fallas de la Fiscalía y ahora está pausada por la pandemia.
Soledad Jarquín logró que se abrieran al menos seis carpetas de investigación por la serie de delitos que se configuraron alrededor del crimen, como delito electoral, robo, corrupción y el triple homicidio. Sin embargo, todos ellos están impunes.
Por ese motivo, Soledad acudió a la conferencia matutina del Presidente Andrés Manuel López Obrador para pedir apoyo, pues aseguró que todas las carpetas de investigación están paradas.
“Está pendiente todo”, abundó la también comunicadora.
La madre advirtió que no va a parar y no se detendrá hasta encontrar justicia: “Ellos (las autoridades) apuestan al desgaste de nosotros, pero que les quede claro: no me voy a cansar”, dijo.
FOTÓGRAFA DESDE ADOLESCENTE
María del Sol Cruz Jarquín, de 27 años, era la tercera de tres hermanas y desde pequeña le gustaba la fotografía; tuvo su primera exposición a los 14 años de edad.
Cuando terminó la preparatoria, ella quería mudarse a la Ciudad de México para estudiar cinematografía, pero para su madre era complicado económicamente, pues las hermanas mayores cursaban sus carreras universitarias.
“Pero como ella era muy decidida y empeñosa, descubrió una escuela en Guadalajara donde no necesitaba equipo porque lo ponían en la escuela, entonces ella entró a estudiar ahí. Yo sabía que tenía mucho talento con la fotografía”, dijo su madre.
María del Sol finalmente estudió cine y fotografía en Guadalajara, pero al regresar a Oaxaca no encontraba empleo acorde a su profesión. Realizaba trabajos pequeños, como tomar imagen para bodas y eventos.
Soledad recordó que la joven duró al menos ocho meses sin trabajo, hasta que en enero de 2018 consiguió trabajo como jefa de Comunicación Social en la Secretaría de Asuntos Indígenas (SAI) del Gobierno de Oaxaca, que en ese entonces era encabezada por Francisco Montero López.
“Cuando ella obtuvo el trabajo estuvo muy feliz con lo que hacía, viajaba mucho y se daba vuelo fotografiando en las comunidades indígenas”, relató la madre.
EL DELITO QUE LA LLEVÓ A LA MUERTE
La satisfacción de María del Sol no le duró mucho. A los pocos meses de ingresar a la Secretaría, cuando inició el proceso electoral a finales de abril, el titular de la SAI, Francisco Montero López, envió a Juchitán, Oaxaca, a la mitad del equipo para apoyar la campaña electoral de su hermano, Hageo Montero López, candidato a presidente de Juchitán, hoy regidor plurinominal, así como de los integrantes de la planilla de la Coalición Todos por Oaxaca encabezada por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) junto con el Partido Verde Ecologista y Nueva Alianza.
María había tenido una discusión en la oficina porque su jefe había decidido que ella también se fuera a la campaña, compartió Soledad. “Ella no quería ir por algunas experiencias desagradables que había tenido antes, porque previamente la habían enviado a zonas indígenas sin viáticos ni garantías. Ella protestó, pidió que si la comisionaban al menos le ofrecieran garantías, pero su jefe le dijo que si no iba la iban a correr. Ella decidió quedarse con el trabajo y se fue a Juchitán”, narró.
La tarde del viernes 1 de junio, luego de cubrir eventos de campaña de Hageo Montero en dos comunidades de Juchitán y entregar su trabajo, María del Sol salió a cenar y a relajarse con dos compañeros de la campaña: un fotógrafo llamado José Eduardo y Jehú G.L, quien es sobrino de Hageo Montero. Pamela Terán se sumó y acudieron al bar llamado El Jardín. Pamela, integrante de la planilla de la coalición, era regidora con licencia y era candidata a segunda concejala de la alcaldía, es decir, aspirante a síndica.
“Era la segunda en la línea de la alianza PRI, Verde y Nueva Alianza. Cuando estaban en el bar, Jehú empezó a inquietarse, a recibir llamadas y de pronto dijo ‘yo ya me voy porque me está llamando mi mamá’”. Él se salió, pero hay una persona que dijo que Jehú le dio instrucción a José Eduardo, que le dijo que esperara cinco minutos y no le iba a pasar nada”.
A los minutos, salieron del bar. Eran pasadas las 02:00 horas. Pamela y María del Sol platicaban y detrás de ellas iba José Eduardo, quien estiró los brazos y le puso las manos en la espalda de ambas y en ese instante, se ve el polvo. Se produjo el ataque.
Los gatilleros les dispararon a las dos mujeres con un arma R15 y al chófer lo mataron con una 9 milímetros, en tanto que José Eduardo salió ileso. Después, lo más sospechoso es que él se desapareció.
“Fue un ataque de ocho segundos: en ocho segundo acabaron con la vida de tres personas”, añadió Soledad.
Cerca de las 8 de la mañana, un colaborador del Secretario de Asuntos Indígenas se presentó en el hotel donde se hospedaba María del Sol para decir que iba a recoger las maletas de la fotógrafa. El personal le dio acceso y se llevó la mochila en la que tenía su equipo fotográfico y su computadora, además de su maleta. Dos horas después, el hombre regresó la maleta y la mochila de ella, pero sin su equipo.
“Sabemos que fue un empleado porque el personal tomó una fotografía a su credencial”.
INDAGATORIAS
Jehú G.L, quien estuvo esa noche con las víctimas, fue detenido el 28 de agosto de 2018 como presunto responsable; pero fue liberado, luego de la audiencia de formulación de imputación en donde la juez consideró que no había elementos suficientes para seguir el proceso penal en su contra.
“A la audiencia inicial, él llegó con supuestas pruebas necesarias para revertir la investigación de la Fiscalía: georeferencia, testigos, la declaración de su mamá y una serie de disque pruebas que tiraron cada uno de los elementos que la Fiscalía aportaba como elementos que lo señalaban como coparticipe o probable responsable”.
José Eduardo, el fotógrafo y otro acompañante, fue detenido el 2 de junio de 2019, justo al año de los hechos. Sin embargo, el proceso penal se estancó puesto que la audiencia intermedia ha sido suspendida en dos ocasiones por fallas de la Fiscalía, agregó Soledad.
“No se ha podido realizar la audiencia. La primera vez se suspendió porque no les pusieron abogados a las otras dos familias: a la de Pamela y Adelfo. Es decir, llegamos a la audiencia y no tenían representantes y no se podía desarrollar. La segunda vez, audiencia programada 15 días después, se canceló porque el abogado de José Eduardo argumentó que no le habían corrido las pruebas en contra de su cliente. La tercera audiencia se programó para el 30 de marzo, pero para ese entonces ya se había decretado las medidas por la pandemia y no hubo tal audiencia”.
La otra carpeta de investigación que se abrió, por el robo del equipo, tampoco ha avanzado. La madre de María del Sol dijo que se tiene identificada a la persona que se llevó el equipo de cómputo, cámara de video y fotográfica, para borrar las huellas del trabajo de su hija, “es un priista, ni si quiera lo han podido llamar a declarar en la oficina del Ministerio Público. Lo citaron dos veces a la audiencia inicial, por robo simple. No se presentó y cuando yo les pido que lo hagan de manera judicial, me dicen que no lo encuentran”
Hasta el momento no hay un móvil claro, no hay una línea de investigación concisa del caso, comentó Soledad Jarquín. Las autoridades solo se fueron contra los dos eslabones más débiles, pero los autores materiales no han sido detenidos, y que decir de los autores intelectuales.
“José Eduardo tiene encarcelado desde junio de 2019 y ni para atrás ni para adelante. No hay más en la investigación. Esa investigación se quedó en estancada porque no vieron otras aristas, en este crimen no tenemos a quienes accionaron las armas. Menos tenemos, porque no investigan quien ordenó asesinar a Pamela y de paso a María del Sol. Eso no existe en el imaginario de la Fiscalía porque no investigan o no quieren investigar”, afirmó la madre.
LOS DEMÁS DELITOS
La Fiscalía de Oaxaca abrió tres carpetas de investigación: la primera por el triple homicidio, otra por robo y la tercera, por insistencia y perseverancia de Soledad, por delito electoral.
El delito electoral que se configura es en contra de Francisco Montero, el Jefe de Sol, por haber puesto a disposición recursos públicos de la SAI para la campaña electoral de su hermano y, en el caso de Hageo Montero, por haberse beneficiado de recursos públicos humanos y financieros.
“María del Sol estuvo ahí porque se cometió un delito electoral. Luego viene el robo de su equipo, que tiene implicaciones porque en su equipo están las pruebas de lo que ella estuvo haciendo en Juchitán”, dijo la madre.
Los Montero López, añadió, negaron en sus redes sociales que María del Sol estuviera designada a la campaña. Reconocieron que ella trabajaba en la SAI, pero arguyeron que ella había decidido quedarse en Juchitán por su voluntad.
Soledad, a raíz del crimen, insistió que había un delito electoral que perseguir y se abrió una carpeta de investigación también con la Fiscalía de delitos electorales, donde ella colaboró aportando pruebas, pero esta última indagatoria también está sin avance.
“Al principio había mucha apertura, pero luego la Fiscalía se cerró conmigo, al grado que me sacó del expediente, me dijeron que ya no puedo ver el expediente por delito electoral y yo ya no tengo acceso. Yo no tengo idea que está pasando”, dijo.
Y relató: “la Fiscal electoral Araceli Pinedo dijo que yo no soy víctima indirecta, que aquí la víctima indirecta del delito electoral es la sociedad. Entonces yo le pregunto, ¿entonces yo soy una paria? ¿No soy parte de la sociedad o qué?”
Hageo perdió la campaña, pero los votos le alcanzaron para ser regidor.
“Y como regidor siguió disponiendo de recursos públicos, a pesar de haber llegado a su puesto cometiendo un delito electoral”.
Soledad al no ver luz en la Fiscalía inició un procedimiento especial sancionador en el Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de Oaxaca para que se castigue el delito electoral, el cual, derivó en una investigación que se fue hasta el Tribunal Estatal Electoral, órgano que dictó que sí existió el uso indebido de recursos públicos, por el servicio profesional de María del Sol a favor de la campaña.
La Sala Xalapa del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ratificó la sentencia y amplió la multa a un total de 90 mil pesos en contra de Hageo Montero, la cual, hasta la fecha no ha pagado.
“La Secretaría de finanzas, la encargada de cobrar ese dinero, no lo ha hecho: yo he estado presionado vía Tribunal para ver si ya cumplió con la multa y resulta que no ha pagado la multa porque la Secretaría dice que no lo encuentra ¡y es un regidor! ¿Cómo explicas que no encuentren nunca a un regidor?”
Soledad abundó que el Gobernador de Oaxaca tampoco ha emitido una sanción a Francisco Montero, por poner recursos públicos para la campaña de Hageo, su hermano.
“Lo que hay es una gran impunidad. Los Montero López son gente de mucho dinero, con poder religioso también”. Me estoy peleando con gente del PRI porque los están protegiendo”, abundó.
Soledad, luego de su visita a la mañanera, sostuvo primero una reunión con la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, quien le prometió que revisarían el caso. En particular será la Conavim quien revisará la carpeta de investigación y, en su efecto, emitirá recomendaciones.
“Hay una promesa, de que van a buscar resolver. Que van a buscar los mecanismos. Ellos van a revisar lo que hay de investigación y van a darle seguimiento al caso con la Fiscalía. Conavim va a revisar y, por lo que entendí, ya está haciendo ese tipo de revisiones en otros casos; lo que hacen es checar el expediente, y hacer recomendaciones y observaciones a las fiscalías. Yo espero que suceda lo mismo en el caso de María del Sol y la fiscalía responda”.
NO VOY A PARAR
Soledad cuenta con medidas de protección del Mecanismo de Protección para Periodistas y Defensores de Derechos Humanos, sin embargo, el miedo y el riesgo siempre está latente. La mujer y la organización en la que participa, Consorcio Oaxaca, han recibido diversas amenazas.
No obstante, asegura que no parará hasta que su hija obtenga justicia.
“No voy a dejar de señalar las cosas que están mal hechas. Lo voy a estar diciendo sistemáticamente. Ellos (las autoridades) le apuntan a la pérdida de la paciencia y al cansancio de la gente, pero no nos vamos a cansar, aunque a veces nos levantemos derrotadas y sin ganas, algo te mueve, que es el amor a tu hija. No me voy a cansar, que les quede claro. Y voy a esperar a que cambie el rumbo político de Oaxaca, eso puede pasar, eso puede ser posible y entonces si espero abrir puertas con más facilidad”, finalizó.