La oficina en México del periódico inglés The Economist no descarta que las denuncias de Emilio Lozoya Austin sean una ficción para librarse de la cárcel, en un país donde la corrupción es profunda, donde las instancias judiciales fallan y en donde la procuración de justicia puede ser un acto político.
Ciudad de México, 26 de agosto (SinEmbargo).- Las denuncias del exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex) Emilio Lozoya Austin, dan cuenta del "mayor escándalo de corrupción en la historia de México”, de acuerdo con el jefe de la oficina de The Economist en México, Richard Ensor.
Más allá de los escándalos de corrupción que “han asombrado a la sociedad mexicana” y que por su naturaleza afectan a los dos principales partidos de oposición (PAN y PRI) a Morena, el periodista británico reconoció en un podcast que hay dudas en el escrutinio público acerca del proceso de impartición de justicia y la manera en que el Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) está manejando el caso.
Por un lado, Ensor mencionó la filtración de las denuncias de Lozoya ante la Fiscalía General de la República (FGR). Al respecto, dijo que la filtración “ha llevado a acusaciones de que éste juicio, que debe ser muy serio, está en proceso de ser politizado”. Una situación de incertidumbre que se suma a las dudas acerca de la veracidad de lo dicho por Lozoya.
“Los críticos del señor Lozoya dicen que él está diciendo lo que necesita decir para evitar ir a la cárcel y para evitar que sus familiares vayan a la cárcel”. Sin embargo, Ensor refirió que “por supuesto, hay muchos que dicen que todo está un poco demasiado ordenado. Estamos hablando de una larga lista de lavado de los más feroces oponentes políticos del señor López Obrador a lo largo de los años en México. Algunas personas ya han concluido que el señor Lozoya está delatando una especie de ficción de corrupción para satisfacer al Presidente”.
Sobre la investigación en curso, el jefe de la oficina en México de The Economist dijo desconocer lo que sucederá.
Aunque el periodista reconoció que los mexicanos merecen "una muy completa prueba” que sustente las afirmaciones de Lozoya para llegar a la verdad, “el problema es que la oficina del Fiscal General no tiene un excelente historial de cumplimiento de éste tipo de investigaciones, y por lo tanto, hay una muy grande posibilidad de que lo que es potencialmente el más grande escándalo de corrupción en la historia de México, no empate con una investigación conmensurablemente seria”.
Richard Ensor también reconoció que algunas personas coinciden en que las filtraciones de las declaraciones de Lozoya ante la FGR "son un signo de que estamos en un lugar donde la ley ha terminado y la política y el teatro han comenzado”.
Cuestionado sobre las promesas de AMLO de acabar y perseguir la corrupción, el periodista señaló que el problema es más difícil de lo que parece, ya que "sancionar la corrupción en México está lleno de peligros, porque en una sociedad en que la corrupción es muy penetrante, nunca se sabe con seguridad lo que va a suceder cuando empiezas a perseguir culpables y a ver lo que tienen que decirte”.
Incluso, Ensor refirió que la persecución de corrupción en el país es un proceso que no garantiza que la parte acusadora salga ilesa. Como ejemplo recordó el escándalo de las grabaciones que involucran al hermano del Presidente AMLO en una entrega-recepción ilícita, o por debajo del agua, de dinero a favor de Morena.
El pasado 20 de agosto, el periodista Carlos Loret de Mola difundió unos videos que muestran a León Romero, nombrado por el Presidente para dirigir la distribuidora de medicamentos del Estado, entregando dinero en efectivo a Pío López Obrador.
De acuerdo con la información publicada en el sitio de noticias Latinus, León Romero grabó las entregas de dinero en 2015 y en el marco de los procesos electorales intermedios de ese año, cuando él se desempeñaba como asesor privado de comunicación social y operador político del Gobierno de Chiapas, entonces liderado por el ecologista Manuel Velasco Cohelo.
Al respecto, en el podcast de The Economist, el periódico británico recordó que el Presidente López Obrador ha dicho tener la conciencia tranquila porque se trató de donaciones de dinero del pueblo y que, por eso, él será capaz de enfrentar a la mafia de la corrupción de México.
“Ése alegato –afirmó Ensor– puede ser muy difícil o imposible de comprobar. Pero una cosa que es segura, es que éste es un ejemplo de qué tan peligroso es el peligro cuando profundizas en denuncias de corrupción en un país como México”.
El representante de The Economist también indicó que hay implicaciones políticas en la manera en que el Gobierno ha manejado las declaraciones de Lozoya ante la FGR.
Por un lado, explicó que AMLO es una "mente maestra en táctica política” que ya recibió beneficios de las denuncias de Lozoya, como lo son la deslegitimación de sus opositores políticos para las elecciones de 2021, así como el fortalecimiento de su "narrativa popular” (o discurso) que asegura que sus opositores confabulan en su contra para dañar su imagen y prestigio. “La mayor parte de esto –abundó Ensor– lo ha logrado sin asegurar ningún tipo de justicia o disuasión de la corrupción a futuro, o un sistema para defender el Estado de derecho”.