La falta de profesionalización, la carencia de personal especializado y las dificultades propias de una ciudad como Juárez son algunas de las razones que explican el número de casos sin justicia, argumenta Wendy Chávez, titular de la Fiscalía Especializada en Atención a Mujeres Víctimas del Delito por Razones de Género (FEM) en el estado de Chihuahua.
De acuerdo con la funcionaria, una vez que el agente del Ministerio Público tiene pruebas suficientes del delito, el desahogo puede tardarse una semana. De haber fallo condenatorio, indica, se necesitará una semana más para el establecimiento de la pena y del monto para la reparación del daño.
Por Itzel Ramírez y Rocío Gallegos
Ciudad Juárez, 26 de agosto (LaVerdad).– Tenía 15 años cuando sufrió un ataque sexual en la colonia Rincón del Cielo. La adolescente fue violada el 18 de abril 2015. Casi cuatro meses después la autoridad abrió una carpeta de su caso que a la fecha aún se mantiene en estatus de investigación, sin que se reporten detenidos, imputados o algún otro avance.
Su caso, sin embargo, no es el único en espera de justicia en Ciudad Juárez. El 71 por ciento de las 3 mil 348 víctimas de violación sexual registradas en esta localidad de enero del 2010 a julio del 2019 tienen su caso en la impunidad, revelan datos proporcionados por la Fiscalía General del Estado de Chihuahua.
Las cifras exhiben que siete de cada 10 carpetas integradas por la autoridad por este delito se encuentran en proceso de investigación, en archivo temporal, sobreseídas por muerte del imputado o prescripción del delito y en otras categorías que en los hechos se traducen en el estancamiento de las averiguaciones.
Se han resuelto sólo los casos de 959 víctimas de violación sexual, es decir, únicamente el 29 por ciento de las investigaciones policiales abiertas desde el 2010 han logrado una resolución final con sentencias condenatorias o absolutorias, otorgamiento del perdón o suspensión del proceso.
“Las víctimas están en total desamparo”, advierte frente a ese panorama de impunidad, Arain Patricia Ramírez, defensora integrante de la Asociación de Abogados Penalistas de Ciudad Juárez.
La impunidad está en los casos en los que las víctimas no cuentan con medios económicos o de presión para lograr avances en la investigación, acusa la abogada quien ha acompañado casos de violación sexual de mujeres y niñas.
Consultada sobre este panorama, Wendy Chávez, titular de la Fiscalía Especializada en Atención a Mujeres Víctimas del Delito por Razones de Género (FEM), dice que “las cargas (de trabajo) no nos permiten avances como quisiéramos”.
La Fiscalía que encabeza Chávez cuenta apenas con 10 agentes del ministerio público para atender delitos sexuales en Ciudad Juárez, pero además de atender los casos de violación investigan abusos sexuales, hostigamientos y sexting, entre otros. Y aunque han habilitado un área adicional para atender casos que llegan a sus manos con acusado detenido, no se dan abasto.
Ante el panorama, la Fiscal que conduce las investigaciones de delitos contra mujeres y niñas asegura que el personal a su cargo tiene el compromiso de integrar los asuntos lo más rápido posible y ofrece a las víctimas “a hacer todo lo que esté en nuestras manos” para que los asuntos caminen.
ENCABEZA JUÁREZ TOP TEN POR VIOLACIONES
Los casos de violación sexual muestran un incremento de más del 300 por ciento en la ciudad, en los últimos 9 años y siete meses transcurridos, para sumar en este periodo 3 mil 348.
Por la cantidad de víctimas de este delito, Juárez ha repetido por cinco años consecutivos como el municipio con mayor número de violaciones en todo el país, de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública. En 2018 la ciudad fronteriza compartió el primer lugar con Chihuahua, la capital de la entidad.
Las cifras oficiales muestran que en el 2014 se registraron 377; en el 2015, 512; para el año siguiente, 467; en el 2017 fueron 520; y el año pasado, 558. Hasta el 31 de julio de este año sumaban ya otros 317 casos. En su mayoría son mujeres y niñas.
La Fiscal Chávez dice que considera positivo que cada vez más personas tienen confianza en la denuncia.
No obstante, las acusaciones de las víctimas ante la autoridad no se han traducido en justicia en muchos de casos. Hay al menos 2 mil 389 de ellos sin avances.
La falta de profesionalización, la carencia de personal especializado y las dificultades propias de una ciudad como Juárez son algunas de las razones que explican el número de casos sin justicia, argumenta Wendy Chávez, titular de la FEM en el estado de Chihuahua.
De acuerdo con la funcionaria, una vez que el agente del Ministerio Público tiene pruebas suficientes del delito, el desahogo puede tardarse una semana. De haber fallo condenatorio, indica, se necesitará una semana más para el establecimiento de la pena y del monto para la reparación del daño.
Sin embargo, aclara, la cantidad de carpetas que tiene cada agente afecta el desarrollo de las investigaciones.
“Son tantos juicios que a veces hay que estar llevando varios seguidos, pues hace que el personal que está llevando a cabo la investigación se enfrasque en una sola actividad y retrase el resto”, explica Chávez.
Arain Patricia Ramírez, abogada penal, discierne de los dichos de la Fiscal. Para la defensora, más que falta de personal, la impunidad relacionada con las violaciones tiene que ver con fallas en el sistema de justicia.
“Si la víctima no presiona, la carpeta no avanza. Si a la víctima se le olvida, a ellos (agentes del MP) más. La carpeta no se mueve si ellos no quieren, es a voluntad, así es el sistema”, critica.
–¿Por qué si tienen tantas carpetas rezagadas donde hay evidencia no las atienden? se pregunta y se contesta: “pues porque esas víctimas están solas, nadie las acompaña”.
La Fiscal Chávez menciona que en la ciudad enfrentan un problema para el seguimiento de las investigaciones que impacta en la impunidad: población flotante por la migración.
Por ese fenómeno, agrega, la gente denuncia y luego se va, por eso se observan casos, incluso ya judicializados, en donde no se tiene disponible ni a la víctima y se obtiene sentencia absolutoria, lo que no es aplicación de la justicia.
Asegura que actualmente la FEM está en proceso de una reestructuración para la atención de delitos de violencia de índole sexual, que se impulsa para tener una unidad exclusiva para casos de violación.
Los datos de la Fiscalía General del Estado de Chihuahua advierten que las mujeres son la mayoría de las víctimas de violación. Por cada hombre hay 3.4 mujeres que han sufrido el mismo delito. Una diferencia entre géneros llama la atención: la edad promedio de víctimas mujeres asciende a 20 años, mientras que para hombres es de 15 años.
A las violaciones se suman otros delitos cometidos contra las víctimas, algunos que van desde el abuso sexual y abuso sexual agravado, amenazas, lesiones, omisión de auxilio simple, omisión de cuidado, hasta la privación de la libertad, trata de personas y homicidio. El más común, de acuerdo con lo informado por la FGE, es el de violencia familiar.
De acuerdo con la Fiscal, es precisamente el entorno más inmediato (familiares, vecinos, amigos) en donde más se cometen las violaciones contra mujeres.Los casos abiertos no son garantía de la aplicación de la justicia. Mariel, una mujer cuya identidad queda bajo resguardo, se enfrentó al reto de iniciar un procedimiento en contra de su ex pareja sentimental y padre de su hija de 10 años. Hace poco más de dos años, una salida familiar marcaría la vida de la menor: su padre biológico y ex pareja de Mariel comenzó a violarla; desde esa fecha la niña calló la violación hasta que en junio pasado le confesó a su madre cómo y cuándo había sido violentada por su padre.
ENTRE IMPUNIDAD Y EL SILENCIO
Al día siguiente, Mariel acudió a las autoridades para presentar la denuncia penal, las pruebas periciales confirmaron la existencia de lesiones en el cuerpo de la niña causadas por violación. A la fecha, no hay orden de aprehensión librada contra el padre, que convivía regularmente con la menor hasta el inicio del proceso.
Mariel dice que está consciente del alto riesgo de que su ex pareja se sustraiga. Hecho que, dice, ha explicado una y otra vez a la persona que lleva su caso. Mariel duda de la capacidad de las autoridades para aprehender a quien, acusa, violó a su hija.
Rosalba Robles, doctora en Ciencias Sociales, resalta los obstáculos que enfrenta una víctima de violación, agravados por la falta de justicia.
“No hay sentencia en términos del daño causado, no sólo vive daño físico, hay un daño emocional, la persona no vuelve hacer la misma persona después de una violación, eso lo dicen los psicólogos, los terapeutas, los profesionales de la salud”, dice la investigadora social.
“No recuperas la vida después de una violación, por más que piense que logró la justicia. No existe una posibilidad de regresarla a la vida que tenía antes”.