Pemex explicó que se trata de un fenómeno originado por una fractura de aproximadamente mil 500 metros de longitud, con diversos puntos de emisión de hidrocarburo a la superficie del mar.
Ciudad de México, 25 de julio (SinEmbargo).- El derrame de hidrocarburos en la Sonda de Campeche, que fue denunciado por organizaciones civiles, se debió a un fenómeno natural conocido como “chapopoteras” y a una “pequeña fuga” en el campo Ek–Balam, de acuerdo con Petróleos Mexicanos (Pemex).
El director general de Pemex, Octavio Romero Oropeza, explicó que una de las manchas más grandes que pueden observarse vía satélite correponden a las chapopoteras en el campo Cantarell, formadas hace millones de años.
Después de que un grupo de ambientalistas denunciara un derrame de petróleo, con una extensión de 467 kilómetros, Pemex argumentó que la información “está distorsionada” y que se trata de dicho fenómeno originado por una fractura de aproximadamente mil 500 metros de longitud, con diversos puntos de emisión de hidrocarburo a la superficie del mar.
Sin embargo, Romero Oropeza aceptó que sí se vertió hidrocarburo en la zona por el daño de un ducto, que incluso coincidió con el incendio de la plataforma Nohoch-A el pasado 7 de julio.
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El director de Pemex compartió que fue el pasado 3 de julio cuando se presentó la fuga de hidrocarburos líquidos en el oleogasoducto 14, que tiene una antigüedad de 32 años de operación y se ubica en los alrededores de la plataforma Balam-TA.
Asimismo, detalló que la zona donde ocurrió la fuga se dio a conocer al día siguiente; la notificación a la Agencia de Seguridad Energía y Ambiente (ASEA) y la Secretaría de Marina (Semar) se realizó el 5 de julio y después comenzó a hacer las reparaciones con el barco Leonis.
El director general de Pemex Exploración y Producción (PEP), Ángel Cid Mungia, expuso por su parte que durante la reparación de la fuga, el mayor gasto fue el costo de la embarcación, cuya reparación sería de dos millones de dólares.
Romero Oropeza explicó que el día del incendio en la plataforma Nohoch-A fueron suspendidas las actividades, y el 10 de julio se reinicio la reparación provisional del ducto. Añadió que entre 18 y 19 de julio la Semar realizó una inspección aérea donde detectó una mancha de 5.2 millas náuticas.
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“Considerando el área de 467 kilómetros cuadrados informado por las asociaciones y asumiendo un grosor uniforme de la capa de aceite de un milímetro sobre la superficie del mar, Pemex tendría que haber derramado 3 millones de barriles. Si esto fuera cierto, implicaría que el evento ocurrido en Balam-TA sería 12 veces más catastrófico que lo ocurrido en el Barco Exxon Valdez en Alaska, donde se vertieron al mar alrededor de 250 mil barriles de petróleo”.
Por último, argumentó que el área erosionada por donde se fugó hidrocarburo es de un tamaño de centímetros de largo por un milímetro de ancho.
“De acuerdo con cálculos de nuestros especialistas y considerando el ducto operando a plenitud, solo se podrían haber derramado un volumen acumulado máximo de mil 368 barriles por los 18 días; es decir, 76 barriles por día”.
