La Comisión Nacional Forestal (Conafor) informó que en la jornada se reportaron 58 incendios forestales activos en 15 estados del país. Una de las regiones más afectadas es Veracruz.
Por Félix Márquez
NOGALES, México (AP).— En al menos 15 de los 32 estados de México se registraron ayer incendios forestales ocasionados en parte por la fuerte sequía que golpea algunas regiones del país.
La Comisión Nacional Forestal (Conafor) informó que en la jornada se reportaron 58 incendios forestales activos en 15 estados, los cuales afectaron cuatro Áreas Naturales Protegidas en los estados centrales de Morelos, Veracruz y el Estado de México.
Se estima que la superficie preliminar afectada alcanzó las mil 421 hectáreas, informó la Conafor en la red social X, antes Twitter. Hasta el momento, no hay reportes de lesionados.
Al corte de las 11:00 horas de hoy, se tiene registro de 58 #IncendiosForestales 🌳🔥 activos en 15 estados del país 🇲🇽. Para sofocar el fuego trabajan 2,085 personas combatientes.
👉4 de los siniestros ocurren en áreas naturales protegidas en #Morelos, #Veracruz y 2 en #EdoMéx pic.twitter.com/9Y3SsqopKl
— CONAFOR (@CONAFOR) March 25, 2024
Una de las regiones más afectadas fue Veracruz, con litoral en el Golfo de México, donde según las autoridades estatales se contabilizaron siete incendios que afectaron la Reserva Ecológica en Texhuacan, el paraje Aserradero, Axoxohuila, Soledad Atzompa, y Las Galeras en Ayahualulco, entre otras zonas.
En la localidad de Nogales, en las montañas de la región central del estado, las llamas arrasaron con vastas hectáreas agrícolas, calcinaron viviendas y ganado, y obligaron al desalojo preventivo de al menos cinco familias.
Elementos de los cuerpos de rescate, bomberos, militares y pobladores de Nogales laboraban intensamente para tratar de controlar el fuego.
En medio de la humareda Alondra Chávez, habitante de la localidad, intentaba de manera desesperada aplacar el incendio en un terreno con la ayuda de una rama.
“El aire nos está ganando y hacemos lo que podemos”, dijo Chávez mientras observaba la devastación.
Por su parte, Catalina Villafuerte, que reside en Aserradero, se encontraba en medio de un campo que quedó completamente calcinado por las llamas.
“Todo se acabó: máquinas que tenía para trabajar, camas, colchones; todo se acabó”, lamentó.