Este especial satírico se ha convertido en el objetivo de los religiosos más conservadores, quienes ya organizaron una petición en línea con más de 2 millones de firmas que exige que el episodio sea censurado, que los comediantes sean “responsabilizados por el delito de vilipendio de la fe”.
Por Raphael Tsavkko Garcia
Estados Unidos, 25 diciembre (VICE).- El 3 de diciembre, Netflix estrenó un especial de Navidad de la compañía de comedia brasileña Porta dos Fundos [Puerta trasera] titulado La primera tentación de Cristo. El especial de 46 minutos de duración muestra a un Jesucristo homosexual (Gregório Duvivier) que presenta a su novio, Orlando (Fábio Porchat) con su familia y Dios (Antônio Tabet) después de pasar 40 días en el desierto.
En el especial, María y José organizan una fiesta sorpresa para el cumpleaños número 30 de Jesús, con la presencia de Dios, quien trata de convencer a María de huir con él y abandonar a José, un carpintero incapaz de construir siquiera una mesa. Los tres reyes magos llegan a la fiesta con una prostituta como invitada y ofrecen bocadillos hechos de jamón, los cuales intentan vender diciendo que están hechos de soya.
Orlando, quien trata de dejarle en claro a la familia de Jesús que ellos tienen una relación, es interrumpido una y otra vez por Jesús, que se siente avergonzado y parece tener dudas sobre su sexualidad, y que además debe decidir si llevar a cabo o no el papel del salvador de la humanidad.
Este especial satírico se ha convertido en el objetivo de los religiosos más conservadores, quienes ya organizaron una petición en línea con más de 2 millones de firmas que exige que el episodio sea censurado, que los comediantes sean “responsabilizados por el delito de vilipendio de la fe” y que Netflix emita una “retracción pública, porque ha ofendido gravemente a los cristianos”.
El congresista federal Eduardo Bolsonaro, hijo del Presidente de extrema derecha Jair Bolsonaro, tuiteó: “estamos a favor de la libertad de expresión, ¿pero por ello vale la pena atacar la fe del 86% de la población?”.
Los líderes políticos religiosos fundamentalistas y los opositores de las agendas pro LGBT en la Asamblea Legislativa de São Paulo (Alesp) comenzaron a reunir firmas para pedir la apertura de una CPI (Comisión Parlamentaria de Investigación) para investigar el presunto crimen del grupo de comedia contra el sentimiento religioso. Argumentan en un video que los comediantes “anulan el valor espiritual de la sagrada concepción y desdeñan la trayectoria de Jesús” y “atacan y vilipendian a las religiones”.
A @NetflixBrasil acaba de lançar um “Especial de Natal” onde Jesus Cristo (@gduvivier) é gay e tem relações com @FabioPorchat, além de se recusar a pregar a palavra de Deus
Somos a favor da liberdade de expressão, mas vale a pena atacar a fé de 86% da população? Fica a reflexão. pic.twitter.com/OtgLJ8ryGu
— Eduardo Bolsonaro?? (@BolsonaroSP) December 11, 2019
El martes, en la Cámara Federal de Representantes en Brasilia, la Comisión de Ciencia y Tecnología aprobó una solicitud para invitar a un representante de Netflix para que presente una aclaración acerca del episodio. Mientras tanto, los líderes evangélicos están convocando a hacerle un boicot a Netflix.
En Río de Janeiro, una organización fundamentalista católica presentó una demanda ante la Fiscalía exigiendo la censura del episodio, una posición que el fiscal también adoptó, por lo que no solo exigió la censura, sino también el pago de una multa de 2 millones de reales, lo que equivale a dos centavos de cada brasileño que profesa el catolicismo en el país. (La demanda fue desestimada el pasado viernes 20 de diciembre).
Los Bolsonaro y muchos parlamentarios que mostraron rechazo hacia el especial han sido criticados por defender leyes laxas relacionadas con las armas y predicar el odio contra las minorías, en particular contra los homosexuales. El Presidente Bolsonaro, por ejemplo, criticó recientemente a la Corte Suprema por dictaminar la criminalización de la homofobia, y se declaró un “orgulloso homófobo” y dijo que preferiría tener un “hijo muerto, a un hijo gay”.
Desde que asumió el cargo, Bolsonaro le ha otorgado cargos gubernamentales a políticos evangélicos y fundamentalistas, como la Ministra de Derechos Humanos, Damares Alves, quien ha sido acusada por tribus indígenas de secuestro de niños y una vez dijo que vio a Jesús en un árbol de guayaba. Las agendas religiosas contrarias a los derechos humanos han ido ganando terreno en todo el país. Varios miembros del gobierno se han declarado en una cruzada y una lucha cristiana contra el “marxismo cultural” con la intención de defender los valores familiares.
En Twitter, el actor y miembro de Porta dos Fundos, Fábio Porchat, respondió a las críticas diciendo: “Chicos, pueden dejar que yo resuelva esto con Dios, está bien, no tienen que preocuparse por ello. Ahora ya pueden enojarse nuevamente con la desigualdad que destruye nuestro país. Pero tienen que indignarse exactamente con la misma pasión, ¿de acuerdo?”.
Irónicamente, la controversia solo parece haber ayudado a publicitar el episodio especial, que ahora se ha convertido en la producción brasileña más vista en la historia de Netflix, y ya se emitió la orden de filmar otro especial para 2020.
Este es el segundo año en que Netflix ofrece un especial de Navidad con el grupo de comedia Porta dos Fundos, que se hizo famoso por sus videos en YouTube. Su especial de 2018, que ganó el Emmy a la mejor comedia, mostró a los apóstoles con una gran resaca después de pasar una noche bebiendo vino, mientras trataban de encontrar a un extraviado Jesús. Ese episodio, llamado “La última resaca” fue una clara referencia a la película de 2009 The Hangover, y no fue objeto de grandes protestas.