Los actos de violencia contra las mujeres en México ocurren todos los días, en todos los espacios: escuela, trabajo, en las calles, en el hogar. Las víctimas reciben maltrato físico, psicológico, económico… por lo que organizaciones civiles en el país y en el resto del mundo exigen a los gobiernos implementar acciones para prevenir y erradicar los ataques.
Chimalhuacán, Edomex, 25 de noviembre (SinEmbargo).- Mariana Joselin Baltierra Valenzuela, víctima de feminicidio en el Estado de México, “escribió” una carta dirigida a Enrique Peña Nieto, Alfredo Del Mazo Maza y Miguel Ángel Mancera, en la cual lamentó la ausencia de justicia en su caso -y en muchos otros-. Exigió la captura de su asesino y solidaridad a la gente y a los medios.
La joven, de 18 años, fue localizada sin vida en julio al interior de una carnicería en el municipio de Ecatepec, y hoy miles marchan por ella y contra la violencia hacia las mujeres.
A 31 kilómetros del sitio en el que fue hallada Baltierra Valenzuela, en Chimalhuacán, se manifiestan este sábado mujeres con un objetivo: levantar la voz contra los asesinos, violadores, secuestradores, tratantes y demás criminales en México.
“¡No más feminicidios!”, “¡Fin al patriarcado y a la guerra contra la mujeres!”, “¡Ni una menos!”, las consignas.
Entre pancartas, cruces, fotografías y cánticos, las presentes llevan el mensaje de justicia.
El contingente partirá desde el Palacio Municipal de Chimalhucán, donde despacha Rosalba Pineda Ramírez.
“Soy Mariana Joselin Baltierra Valenzuela y hoy, en mi cumpleaños 19, les informo que hace casi cuatro meses, el 28 de julio del presente, fui brutal y cruelmente asesinada en el Fraccionamiento Las América del municipio de Ecatepec de Morelos, en el Estado de México. A la fecha, mi presunto asesino, Juan De la Cruz Quintero Martínez, continúa prófugo de la justicia’’, dice el documento citado al principio y que dio a conocer ayer la familia de Mariana.
“Me duele la soledad con que enfrenté por casi un día, hasta mi muerte, el abuso de mi asesino. Me duele que mi fragilidad y mi pequeño cuerpo me hayan impedido defenderme con éxito de mi agresor. Me duele el dolor y la impotencia de mis padres para lograr que se me haga justicia.
“Me duele que en mi cumpleaños no pueda recibir el abrazo de mis seres queridos. Me duele y me lastima ver a mi asesino caminar libremente al acecho de su próxima víctima. Me duele y me lastima que mi feminicida pudiera pasar a engrosar las estadísticas de casos no resueltos. Me duelen y me lastiman la injusticia y la impunidad que como lozas caen sobre las tumbas de las mujeres que, como yo, han perdido la vida en manos de feminicidas despiadados’’, profundiza la carta.
De acuerdo con información de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), el 70 por ciento de las mujeres y las niñas (a nivel mundial) sufrirá algún tipo de violencia durante su vida.
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Los actos de violencia ocurren en todos los espacios: escuela, trabajo, en las calles, en el hogar. Las víctimas reciben maltrato físico, psicológico, económico…
Asociaciones en México y el mundo exigen a los gobiernos implementar acciones para prevenir y erradicar ataques.
En México, “en las últimas semanas se ha hecho visible el aumento de violencia y asesinatos de adolescentes que previamente ha sido reportadas como desaparecidas sin que haya pistas o avances en las investigaciones para detener a los culpables”, lamenta la Redimir.
Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) revelan que de los 46.5 millones de mujeres de 15 años y más que hay en México, el 66.1 por ciento (30.7 millones) enfrentó a algún agresor en por lo menos un instante de su vida.
Entre el 2014 y el 2016, Baja California, Colima, Chihuahua, Guerrero, Estado de México, Michoacán, Morelos, Oaxaca, Sinaloa, Tamaulipas y Zacatecas fueron las entidades más peligrosas para las mujeres.
“A nosotros ya nos destrozaron la vida”, lamenta la madre de Diana Velazquez Florencio, asesinada el 2 de julio del 2017 en el Estado de México.
Los feminicidios en municipios como Ecatepec, Neza, Chimalhuacán están acompañados de impunidad, aseguran organizaciones presentes en el evento.
¡Los feminicidios son crímenes de Estado!, gritan a instantes de avanzar por calles del municipio mexiquense.
