La gobernadora y sus pachangas

25/10/2011 - 12:00 am

Yucatán es uno de los cinco estados de la República con mayores problemas de violencia contra las mujeres. Es también una entidad con problemas ambientales y, según cifras del Coneval, entre 2008 y 2010 el número de yucatecos que viven en pobreza extrema aumentó 1.6% hasta quedar en 9.8%; por otro lado, el porcentaje de ciudadanos sin acceso a la alimentación pasó de 16.2% a 21.4 por ciento.

En contraposición, y aunque desde 2007 los ingresos del estado aumentaron 37%, los gastos de la administración de Ivonne Aracely Ortega Pacheco crecieron cerca de 43 por ciento. Quizá no sea la mejor gobernadora, pero tras cuatro años en el cargo queda claro que el fuerte de doña Ivonne tiene más que ver con la organización de pachangas.

La mandataria nació el 26 de noviembre de 1972 y a los 12 años tuvo que dejar la escuela y comenzar a trabajar. Terminó la secundaria y la preparatoria de manera abierta y, tras iniciar con un par de marranos como productora porcícola, logró tener una tienda de abarrotes, una carnicería y una mesa en el mercado local.

Dice que le gusta leer, su autor favorito es Dan Brown; también asegura que su platillo favorito es el Chocolomo, le encanta la trova, y que se metió en la política por culpa de un drenaje que ningún presidente municipal se animó a terminar.

Electa gobernadora en 2007, Ortega Pacheco fue alcaldesa de Dzemul, diputada local y federal, y senadora de primera minoría. Fue también coordinadora de giras en el sureste del país para Roberto Madrazo Pintado. Es, además, sobrina del fallecido Víctor Manuel Cervera Pacheco, dos veces gobernador yucateco y miembro del gabinete de Carlos Salinas de Gortari.

Dio sorpresas desde su precampaña, ya que entre otros priístas que soñaban con la gubernatura, venció a Dulce María Sauri Riancho, a quien –se rumora– la derrota del PRI en las elecciones presidenciales de 2006 le costó la candidatura.

Su campaña por la gubernatura yucateca no estuvo exenta de escándalos. A finales de marzo de 2007, un grupo de vándalos fue detenido mientras destruía propaganda de los adversarios políticos de Ortega Pacheco. El líder de los detenidos reveló que fueron contratados por la priísta para, supuestamente, desestabilizar el proceso electoral. Además, la dirigencia local de Acción Nacional acusó al diputado federal Emilio Gamboa Patrón de encabezar a un grupo de gobernadores que apoyaba financieramente la campaña de Ortega Pacheco.

Antes de ganar las elecciones, la priísta prometió reducir el gasto público en un 10% anual, generar 100 mil plazas laborales en cinco años y construir una ruta ferroviaria entre Puerto Progreso y Cancún. Según Luis Montoya, entonces líder estatal del PAN, Ortega gastó más de 100 millones de pesos. Son varios los nombres que le ayudaron en su campaña. Felipe Enríquez Hernández, diputado por Nuevo León y responsable en buena medida de las victorias de Natividad González Parás y de Enrique Peña Nieto, se encargó de operar la campaña de la priísta con el apoyo de empresarios como Arturo Millet Reyes y Rodolfo Rosas Moya.

Venció en las urnas por 63 mil votos de ventaja al candidato del PAN, Xavier Abreu Sierra. Recibió la administración del estado el 1 de agosto de 2007 de manos del panista Patricio Patrón Laviada, y desde entonces hasta ahora hay fiesta en Yucatán.

Sus informes ciudadanos son verdaderas verbenas en las que la gobernadora no escatima en lujos para consentir a su grupo de invitados, casi siempre compuesto por celebridades y políticos de muy alto nivel. Pachangas que parecen más reality show de Televisa o TV Azteca, con decenas de invitados famosos. Entre los nombres de personalidades que han acompañado en sus fiestas, están los de Galilea Montijo, Edith González, Roxana Castellanos, Silvia Pinal, Carmen Salinas, Vicente Fox y Martha Sahagún, Wendy Braga, Juan Gabriel, Roberto Hernández Ramírez, Manlio Fabio Beltrones y líderes sindicales como Marco Antonio Bernal y Víctor Flores.

No hay oportunidad que se le escape a la gobernadora para promover su imagen. Es política de la casa organizar un concierto anual con alguna celebridad de fama mundial, pretextando la necesidad de mostrar a nivel mundial la belleza de Yucatán. Con Chichen Itzá como escenario, se han presentado Elton John, Plácido Domingo, Sarah Brightman y, según rumores, el invitado para el próximo año será Paul McCartney. Con la ayuda de su amiga Angélica Araujo Lara, alcaldesa de Mérida y favorita de Ivonne para que sea su sucesora, la gobernadora consiguió que Shakira se presentará en su estado.

Pero el show no termina ahí. La gobernadora ha “prestado” el estado a Televisa y a TV Azteca para que graben sus telenovelas ahí. Melodramas como “Sortilegio” y “Vidas Robadas” se hicieron en Yucatán. El apoyo a las dos televisoras le garantizó espacios en varios medios para promover su imagen y sus logros. Ortega aprovechó para tomarse fotografías junto a actores y productores, luciendo sus mejores vestidos. En 2009, Carlo Antonio Rico, productor del concurso “Nuestra Belleza México”, anunció que el evento se realizaría en el estado del sur. Inmediatamente, la gobernadora celebró la decisión y dijo: “Ser sede de este importante certamen será una gran oportunidad para difundir a México y el mundo los atractivos que tiene Yucatán y ante ello agradecemos que nos hayan elegido como sede”.

Sin embargo, eso no es lo que el pueblo le demanda.

La falta de resultados tiene a los yucatecos descontentos. En febrero de 2010, durante la pelea de box entre Gustavo “Guty” Espadas y el dominicano Elio “Kid” Rojas, el público, ocho mil personas aproximadamente, no dejó de abuchear a Ivonne Ortega Pacheco, a pesar de varios intentos por parte de su equipo de distraer a la gente.

Los empresarios también ha intentado ponerle un alto al mal desempeño de la priísta. También en 2010, miembros de la Coparmex demandaron a la gobernadora derogar el incremento de impuestos estatales y cancelar la contratación de una deuda por 2 mil 600 millones de pesos.

Ese tema, la deuda del estado, es muestra clara de la mala administración que ha realizado Ivonne Ortega Pacheco. Cuando recibió el control del estado de manos de Patrón Laviada, la deuda pública era de apenas 300 millones de pesos. Según datos de la diputada federal panista Rosa Adriana Díaz Lizama, en 2008 el monto ascendía a los 730.9 millones de pesos, para llegar a los 2 mil 076.1 millones en 2009; 2 mil 898 millones de pesos en 2010 y se calcula que alcanzará los 2 mil 912 millones de pesos este año.

Razones para el descontento hay de sobra. Apenas la semana pasada, un grupo de ciudadanos solicitaron ante la Cámara de Diputados demandó un juicio político contra la priísta por presuntas irregularidades durante su gestión.

 

El futuro de Ortega Pacheco

En ese contexto, y aunque insiste en negarlo, Ivonne Ortega Pacheco ya está lista para sumarse a la campaña de Enrique Peña Nieto. Según varios medios nacionales, la gobernadora viajó a McAllen, Texas, junto con otros gobernadores priístas, a un rancho de Enrique Martínez y Martínez, ex mandatario de Coahuila. Como resultado de esa reunión quedó sellado “El pacto de McAllen”, según el cual los priístas se comprometieron a “blindar a Peña Nieto y no exponerlo”. Los rumores dicen que la gobernadora podría pedir licencia durante el mes de diciembre o en enero del próximo año para convertirse en la coordinadora de campaña del ex gobernador del Estado de México. Así que, muy pronto, se sabrá si las pachangas de Yucatán se trasladan al mismísimo CEN del PRI…

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